La muñeca de su majestad

La sangre

—Caleya , mi ama , despierta —susurro y me intento librar del brazo de mi señora .
Caleya me agarra con más fuerza y niega repetidas veces , el aroma entra por la ventana y eso siempre me pone de buen humor.
—Caleya es hora , las doncellas han estado preguntando por ti.
Me giro y unos enormes ojos azules me miran con pesadez.
—¿A que se debe tanto escándalo?
Cayela me da un beso en la frente y noto como su humor mejora.
—No han dicho nada , ya las avisé que dentro de diez minutos lo volvieran a intentar.
—Eres la mejor  Elentari.
Sonrío y la abrazo .
Cayela es mi ama , mi señora , daría la vida por ella como ella y su familia . Ellos me salvaron .
—Elentari— Cayela me agarra de la cara y me pongo tensa .
Lo sabe.
—Cayela...
—Te he visto, borra esa mirada de agradecimiento.
—Lo intentaré.
—Elentari tú eres y serás por siempre mi tesoro más preciado , eres parte de mi familia y serás parte por siempre .
Asiento y no puedo hablar más .
Las doncellas entran y no empiezan a preparar para otro día más , otro día más en palacio.
Mientras una de ellas , la más menuda me hace un trenza para recogerme el cabello , la otra me aplica un poco de labial y polvos .
Cayela se había negado a ponerse vestidos y había optado por su atuendo oficial .
—Lista.
Me miro y suspiro .
—Gracias , os podéis retirar—les digo y muestro mi sonrisa más encantadora.
Las doncellas se ponen rojas y salen con rapidez .
En cuanto salen toco el reflejo que me da .
Siempre es lo mismo , una cara pálida y unos ojos amarillos , mis ojos son los únicos ojos amarillos del reino , ya que soy una nim , es decir soy mitad humana mitad, mitad...no sé .
Jamás he descubierto que soy , sé que soy humana pero no sé si soy elfa , hada , sirena , enana .
Mi belleza según cayela está fuera de los límites de los humanos , eso es una de las cosas por las cual me mantiene a su lado.
No vayas por ahí , resuena en mi cabeza .
Me levanto y me doy fuerzas . Soy una persona importante , soy una persona importante, me repito varias veces mientras salgo y voy hacia el salón .
Antes de que pueda entrar escucho como cayela grita y al momento el sonido de platos rotos .
Me adelanto y miro .
—¡No!— Cayela esta roja , no es buena señal.
Fay se pone a su lado y con calma le pone la mano en el hombro la veo murmurar y veo como poco a poco la princesa se tranquiliza.
Fay es la segunda muñeca de la princesa.
Es una maga que fue vendida como esclava por sus propios padres , la princesa se obsesionó con su belleza y no dudó en mantenerla a su lado .
Fue la segunda mujer que fue aceptada por el rey como muñeca de la princesa .
—Cayela, vuelve a sentarte—le pide su majestad el Rey.
Ella lo hace y me mira en busca de consuelo o quizás necesidad por tocarme .
—Elentari ven—me pide y no lo dudo .
Fay me saluda con su típica sonrisa y yo le guiño el ojo .
Me siento a la derecha de Cayela y Fay a su izquierda .
Cayela me agarra la mano por debajo y la aprieta .
—Es hora de que hagas tus deberes como princesa , el pueblo necesita saber que te vas a casar. Tienes veinticinco años , Cayela.
Malhumorada , Cayela se ríe .
—Mi hermano esta para eso , ¿no , padre?
—Cayela tu hermano hace tres años que partió para luchar contra los bárbaros , no tú.
Ella suspira.
La mirada del Rey pasa a ser más cariñosa.
—Mi vida no te estoy pidiendo ahora mismo un embarazo ni un descendiente. La corte está impaciente , tu madre y yo también .
—Me gusta estar en palacio junto a padre— le sonríe .
—Hija mía , Byron llegará dentro de tres días , y es , posiblemente, tu futuro marido . Lo sabías Cayela, sabías que este día llegaría .
Cayela vuelve a ponerse roja , Fay le vuelve a colocar la mano en el hombro.
—Ese mequetrefe no está a la altura de una princesa como yo.
—Byron cambió , tiene veintiocho años , es todo un hombre y futuro gran espadachín.
Ella no dice nada .
—Hace seis años que no os habéis visto y por lo que sé solo has contestado a seis de sus muchas cartas .
—Estaba ocupada.
Las criadas nos sirven el desayuno y vuelven a su posición.
Cayela le da un sorbo a su zumo con ginebra. Lo huelo desde aquí .
—Entiendo tu posición y tú acabarás entendiendo la mía . Es el segundo de sucesión de su reino por lo que si os casáis se quedará aquí . Su reino es honorable, uno de los mejores en cuanto a espadachines y arqueros . Su ejército será el tuyo algún día . Hija mía no lo elegí al azar ni por una vidente, lo elegí por ti , por tu seguridad y por la seguridad de la familia .
Cayela no dice nada .
Fay sigue con su mano en el hombro y Cayela sigue apretando la mía .
El rey bebe un trago de su bebida y se pone de pie .
—Tres día, hija mía , en tres días todo comenzará —dice y se va .
Cayela me suelta la mano y llama a una sirvienta, la cual sin decir nada le sirve más bebida .
—Esto no quedará así , no me lo puedo creer . Mi futuro en las manos de un hombre , ¿por qué no están en las mías? —nos pregunta a ambas .
Antes de que podamos responder aparece Istar la última de las muñecas de su majestad.
Istar es , bueno es todo lo contrario a Fay y a mí .
Istar es la guerrara y las más exótica diría yo .
Su color de piel es como la arena del desierto de Kiel , sus ojos son negros y enormes como dos platos. Su constitución es atlética y definida , es la mujer más alta que he conocido.
Fay es la más baja y las menuda , Fay es como un hada.
Istar menea la cabeza y sonríe con picardía.
—¿Me perdí una pelea?—nos pregunta .
—Se podría decir que sí —le responde Fay.
Levanta la mano y la invita a sentarse a su lado .
Istar corre como un caballo y se sienta , comienza a comer mientras nos mira en busca de respuestas.
Cayela sigue bebiendo y yo me como mi tazón de frutillas .
—Quieren que me case—dice Cayela después de un tiempo.
Istar deja de comer y pone mala cara .
—¿Otra vez con esa sandez? No se preocupe mi señora que pronto se le olvidará a su majestad.
Fay la mira y niega.
—Llegarán en tres días—le dice Fay.
Istar pega un golpe a la mesa y veo como sale volando un pedazo.
Las sirvientas corren para limpiar y asegurarse de que no está herida .
—¡Fuera!—Istar las echas y la pobres salen corriendo.
Después la obligaré a pedir perdón.
—Cayela ya sabes mi opinión sobre el matrimonio.
Cayela suspira y asiente.
—Pero , siendo sinceras , Byron sería un gran marido.
De repente las tres nos giramos y miramos a Fay.
—Fay..
Istar intenta hablar pero Cayela levanta su mano .
—¿Por qué dices eso?
—Se rumorea que el segundo príncipe tiene sus propios muñecos , es decir que quizá sí le convenga este matrimonio. Si os casáis ganaréis ambos , nuestro reino un gran ejército y ellos magos . Su país es perfecto para investigar la luz de las estrellas . Siendo aún más sincera yo creo que si no se casa con él acabará con alguno peor.
Empiezo a reflexionar sobre las palabras de Fay .
Cayela odia separarse de nosotras ese es el principal motivo por el cual detesta el matrimonio , también desteta dejar su tierra pero , si Byron tiene sus propios asuntos..
Cuanto más lo pienso más interesante me parece .
—Elentari , ¿y tú qué opinas?—me pregunta Fay .
Ahora tres pares de ojos me miran con intriga , mi opinión es decisiva , siempre lo ha sido .
Mi don principal es crear escenarios factibles para ganar , hace años estuve al mando del ejército de su majestad . Mis planes son certeros y efectivos, pero esto no es la guerra o puede que sí.
Mi cabeza da mil vueltas y al final asiento .
—Si es como dice Fay y los rumores sin ciertos sería el mejor marido para usted. La verdad es que difícil de opinar ahora mismo sin conocer a Byron . Los rumores de palacio suelen ser rumores pero podemos saber si es verdad . Lo más sencillo es que fuera directa con él pero eso lo podría asustar , tomaremos las medidas necesarias en cuanto lleve aquí una semana , en ese tiempo podré dictaminar algo .
Las tres asienten y Cayela , por fin , sonríe.
—Bueno , aún no me termina de convencer pero lo aceptaré , le daré la mejor bienvenida posible e Istar se te prohíbe amenazar , cortar , pegar o tocar a Byron y a su ejército.
Istar refunfuña .
—A no ser que sea necesario , claro .
Parece más satisfecha .
—Sí mi señora .
Las cuatro terminamos de comer en un silencio cómodo.
Mientras miro por la ventana me pregunto porque aún siento un nudo en el pecho .
La noche se cierna sobre nosotras mientras miramos cómo Istar intenta atacar a un enemigo invisible.
De repente un mayordomo de su majestad la reina entra sin avisar.
Cayela lo mira .
—¿Qué haces por aquí , Frederic?
El hombre de mediana diana empieza a sudar .
—Princesa , damas , su majestad la reina manda a llamar a Elentari.
Cayela lo mira mal pero me pongo de pie .
—Entendido.
—Elentari..
—Cayela volveré en diez minutos , sabes que su majestad no suele llamar en vano.
—Diez minutos, no más .
Asiento y salgo .
Frederic me guía por el angosto pasillo hasta llegar a la habitación de la reina .
Llama y entro .
Su majestad la reina está sentada en una silla .
Sus ojos azules como el color de su hija me miran con cariño.
—Siempre rápida.
—Su majestad —saludo .
—Madre , así me tienes que llamar . Son diez años desde que te conocí que te lo he dicho.
Yo sonrió y ella me invita a tomar asiento.
—Madre , ¿qué sucedió?
Ella mira hacia la venta y luego hacia a mí.
—Onix necesita ayuda .
Se me hace un nudo en el pecho a escuchar su nombre . Hace años que no lo escuchaba , el nombre del principe.
Onix siempre fue amable conmigo , aún lo recuerdo cuando se fue a la guerra , por fuera estaba entero pero sus ojos mostraban el miedo .
—Con su permiso, majes.. madre—me retracto,—el príncipe me lo dejó claro , jamás ayudarlo en su propia guerra—digo y siento el escozor de mis palabras.
—Él no lo sabrá , está a punto de terminar la conquista pero el último pueblo bárbaro es inteligente. Han masacrado a doscientos de los nuestros . Están bajo mínimos y mi hijo está herido .
—Yo..
—Hablé con Hyde , está de acuerdo con usar tu poder .  Él nunca lo sabrá , Elentari eso te lo juro por la corona .
Tengo sentimientos encontrados, si se enteran de que usé mi poder...
—Será un secreto. Yo no puedo hacer nada desde aquí .
Asiento y sin más me acerco hacia el enorme mapa que tengo delante de mí.
Levanto mi vestido y saco la daga que llevo escondida.
Me hago un raja en la mano y pongo la mano encima del mapa .
De repente todo se vuelve negro y ahí estoy yo en medio de la batalla . Me encuentro en frente del gran bárbaro y su ejército. Son menos pero grandes , mi poder comienza a fluir y se me ocurren millones de tácticas las voy tachando de una en una hasta encontrar la más efectiva.
Ellos conocen su tierra y saben sus puntos fuertes .
Seis movimientos hacia el norte , cuatro de ellos están entre los árboles con veneno pero no es letal , con cinco arqueros estarán muertos . La misma táctica se repite diez veces más .
En cuanto mueran pasan y lo siguiente es más complicado habrá ochenta de ellos en las cuevas pero con dos hechiceros protegiendi a los espadachines será fáciles de matar , magia de fuego y saldrán , solo habrá dos bajas , no , ninguna hay un mago que tiene suficiente poder .
Sigo y sigo hasta llegar al líder , solo lo cubren seis secuaces unos de ellos tiene una fuerte afinidad a la tierra . El suelo se convertirá en un pantano pero no es más que una ilusión .
Si se avanza  por detrás será más fácil llegar .
Morirá porque Onix le cortará la cabeza . No puedo detectar más movimientos.
Abro los ojos y veo como su majestad me mira anonadada.
—Increíble.
Todo está detallado y escrito pues mí verdadera magia es mortal.
Antes de ser adoptada por ellos fuí una niña mercenaria , he asesinado a muchas personas por un trozo de pan . Soy una pecadora .
La reina me abraza por detrás y me calma .
—Eres la joya más preciada para nosotros querida , deja tus malos pensamientos.
—Lo siento..
La reina me toca la mano y mi herida desaparece.
Ella fue una de las magas más poderosas de la historia.
—Gracias , gracias de corazón. Has salvado a mi reino y a mi hijo de nuevo.
Me quedo callada y acepto el abrazo cálido y maternal que me da .
A veces , solo a veces me gustaría olvidar lo que fui pero , siendo egoísta , gracias a eso sigo aquí .