¡𝙼𝚒 𝙽𝚒ñ𝚎𝚛𝚘!- 𝙼𝚒𝚗𝚂𝚞𝚗𝚐

7

Narra Han...

Paso mucho tiempo desde que descubrimos que pasaríamos esa noche encerrados en el instituto. Ninguno de los dos podíamos realizar ninguna llamada, el mío se quedó sin pila al igual que el de Minho. Ya no sabemos que hacer para que el tiempo pase rápido y poder salir de aquí. Lo peor es que al reloj de manecillas del instituto no le entendía, sentía que el tiempo se hacía una eternidad. Para matar el tiempo decidimos ir al salón de deporte, jugamos baloncesto viendo quien era mejor encestando.
El solo hecho de llevar unas horas encerrados me pone de mal humor, me sentía tan cansado, el solo hecho de tener que limpiar el resto del día me agotaba más, tenía mucha hambre, si tan solo pudiera salir de este lugar, eh ir a mí casa descansar.

-Hyung, muero de hambre.-murmuro llevando una mano en mi estómago.

-Vamos a la cafetería, a ver qué hay de comer.

Comenzamos a caminar, yo iba un paso más delante que el, pero aún así sentía una mirada sobre mi ser, me estremesi, pero mejor seguí mi camino, seguramente pensará que soy alguien tan aburrido, y que nadie quisiera pasar el resto del día con alguien como yo.

Llegamos a la cafetería, precedimos a bajar las escaleras, no me percate por dónde pisaba, pero por alguna razón no sale como pensaba y me tropeze y caí al suelo, mire mi tobillo, sentía mucho dolor intentaba masajear para evitar el dolor, pero cada vez era más intenso.

-¡¡Auch!!- gritaba del dolor tirado en el suelo.

Minho dejo de caminar y se giró hacia mi, sentí sus pisadas acercándose a mí con rapidez, bajando hacia mi, tomando mi tobillo con mucho cuidado, revisando que estuviera bien.

-¿Te encuentras bien?¿Te duele mucho?-dice sin despegar su mirada de mi.

-¡¡Noo, Hyung!!- digo soltando un chillido del dolor- Me duele mucho.- digo señalando mi tobillo.

-Dejame ver.- dice incorporándose en una mejor posición para estar un poco más cerca de mi.

Revisaba con sumo cuidado mi tobillo, parecía muy preocupado, el solo observaba detalladamente mi tobillo revisando que no tuviese ninguna herida. Así estuvimos unos minutos hasta que me ayudó a levantarme del suelo, me tomo por las caderas, yo solo procedí a posar mis manos sobre su cuello, sentí mi rostro arder, de lo cerca que estábamos, pero eso termino en cuanto me dejó en una banca, busco algo de comer para ambos en la nevera, eligió una pizza con papas fritas. Pero ahora solo me sentía cansado, y lo único que, quería era descansar, poder cerrar mis ojitos y caer en los brazos de Morfeo. Pero unas palabras me sacaron de mi trance.

-¿Sabes algo?- murmura mirándome fijamente sin apartar su mirada de mi- No eres como realmente pensaba que eras.

-¿Y como pensaba que era?- cuestione confundido.

-Yo me imaginaba que eras un mocoso mimado, y caprichoso, que desea que todo se haga como realmente quiere, y que quiere todo lo que está a su paso..- dice robando un pedazo de la pizza que estaba por meter a mi boca.- pero ¿Sabes? Retiro todo aquello que pensé alguna vez de ti...

-Yo no soy así, Hyung, es solo que... No entiendo porque le caigo mal.

-Estaba molesto porque tenía que cuidar de ti...

-¿Cuánto tiempo lleva saliendo con, Tzuyu?- pregunté cambiándole el tema, pero en realidad quería preguntarle, pero algo en mi no entendía por qué tenía tanto interés en saber sobre su vida amorosa.

-Un año, bueno, en realidad el próximo viernes es nuestro aniversario.

-Que bien, por usted, me alegro mucho.- murmuró forzando una sonrisa.

-Planeo regalarle una caja con diferentes tipos de maquillaje y también decorada con fotos de ambos, y escribirle todas las razones por lo cual la quiero...- Me contaba sus planes extremadamente concentrado en cada detalle que quería hacer, yo solo lo escuchaba.

-Es algo... grandioso, Hyung..

-¿Porque te cae tan mal Tzuyu?-Su pregunta me sorprendió, no esperaba que preguntara eso, en realidad era tan evidente que no la soportaba, es obvio que no nos soportamos.

-Si le digo, eso no cambiará nada... En realidad quisiera vivir en paz cuando se trata de convivir con ella en el instituto...

-¿Pero dime cuál es la razón para poder comprender lo que sucede entre ustedes dos y porque?-me cuestiona con seriedad en su voz.

-Bien, en realidad me hace la vida imposible, es una grosera, será su novia, si es bonita, pero eso no le quita lo horrible que es... Es una bruja, se nota que no la conoce bien.- le digo rodando los ojos.