SOY HETERO, PERO ME GUSTA MI MEJOR AMIGO || YOONSEOK

- atardecer -

— Ve más despacio — pide entre jadeos Hoseok.

— No se porque te quejas tanto, ni siquiera estoy yendo rápido — se detuvo mientras soltaba la mano del pelirrojo.

Yoongi, quería llegar lo más rápido o se perderían lo que quería enseñarle. Siguen caminando, piensa mantener la velocidad actual porque ya se han retrasado demasiado, pero al voltear a verlo y mirar que tiene el rostro completamente como su cabello, gotas de sudor por su frente mojando los mechones que caen sobre su frente y la respiración agitada, se detiene.

Hoseok, parece agradecer porque suspira enternecido. Lleva sus manos a sus muslos inclinándose hacia delante para recuperar el aliento. Maldice por lo bajo. Sabía que eso no era nada para Yoongi, porque era un deportista, pero para él era demasiado agotador. Bailar no se comparaba al desgaste físico que estaba teniendo al subir esa colina.

— Te dije que ibas muy rápido — reprocha alzando su camisa para limpiar las gotas de sudor que mojan su rostro. Dejando su abdomen descubierto por la acción.

— Hubiéramos venido en el coche pero no quisiste.

— No sabía que me traerías hasta acá Min Yoongi, mejor me hubiera quedado en casa y no estaría sudando como un cerdo.

Yoongi, levanta la vista, viéndolo con ojos de enojo, pero al darse cuenta de la desnudez de su abdomen sonríe. Esa maldita sonrisa de los mil demonios, la sonrisa gomosa más linda que existe. Le mira maliciosamente. A pesar de que no quiere que eso le afecte, no puede, su sonrisa va directamente a su pecho.

— Bueno creo que tampoco esta tan mal, ahora soy fan de caminar colinas y sudar horriblemente, ¿falta mucho?
— pregunta pasando la lengua por su labios, provocando al mayor.

— Si tanto te gusta, entonces iré más rapido, estaba siendo considerado, pero veo que no lo necesitas —soltó burlón — falta poco, apresúrate o todo el esfuerzo no habrá valido la pena.

Yoongi, vuelve a tomar su mano y ahora corren. Corren sin parar, el menor definitivamente ahora si iba a desmayarse.

Unos cuantos minutos más por fin llegan. Yoongi, gira la cabeza para darle un vistazo rápido y en serio se plantea en comerse a besos a su dongsaeng. Se ve jodidamente sexy, todo sudado y rojo. Hoseok, inhala y exhala varias veces por la boca de manera tan exitante que se pregunta si es siquiera normal que alguien pueda hacer tales gestos estando cansado. Lo vuelve a tomar de la mano haciendo que ahora se sienten bajo un árbol.

La vista era impresionante, se podía observar toda la ciudad, cientos de edificios, pilas de autos sobres las calles. Era genial ver todo desde ahí. Eran aproximadamente las seis de la tarde.

Estúpido Yoongi, lo había hecho caminar casi una hora, pero había valido totalmente la pena.

Yoongi, se posiciona frente a él y le da una botella de agua.

— ¿Desde cuando eres tan amable conmigo, hyung?

— Estúpido, siempre me he preocupado por ti, pero nunca te das cuenta — chasquea en molestía.

— Si me doy cuenta — se burla— solo que me gusta hacerte enojar — se acerca y deja un beso en su mejilla— no te enojes.

Yoongi, sentía que se derretía en ese momento. Hoseok, solo le había besado la mejilla y este había quedado helado.

Por otro lado, Hoseok se había percatado de lo rojo que se había puesto su hyung y se aprovecharía de eso.

— Hyung respira o vas a estallar de lo rojo que estás — se acerca — o de casualidad quieres que te de otro beso.

Yoongi, seguía sin responder, se había desconectado de la realidad. Volvió en sí cuando sintió de nuevo los labios de Hoseok sobre los suyos. Moviéndose dulce y lentamente, un beso totalmente diferente a los que se habían dado anteriormente. Este tipo de besos le gustaban más. Hacía que sintiera mariposas en su estómago, hacía que se pusiera nervioso, hacía que se perdiera en sus pensamientos.

Pensamientos donde solo habitaba Hoseok.

Besar a Hoseok era mejor que besar a cualquier chica.

El beso siguió, era delicado, Yoongi lo acomodo sobre sus piernas tomándolo de la cintura, el pelirrojo tenía los brazos envueltos en su cuello. Se escuchaban los chasquidos del beso suave que se estaban dando. Parecía que los labios de ambos no se querían separar, solo se separaban mili centímetros para volver a tomar un poco de aire. Ambos estaban hipnotizandos que no se dieron cuenta que el atardecer había pasado.

Despues de unos minutos, Hoseok fue el que rompió el beso, tenía una sospecha de que era lo que su hyung le quería enseñar y ya había pasado.

Bajo de las piernas de Yoongi y se acomodo a un lado de él. Ninguno dijo nada por unos minutos. El ambiente era tranquilo, ambos habían disfrutado el beso, pero no hablarían de las emociones que había desatado en cada uno. Sólo eran mejores amigos y ahora follamigos.

— ¿Qué me querías mostrar hyung? — preguntó mirándolo fijamente.

— Creo que no los perdimos.

Ambos comenzaron a reír.

Definitivamente había sido una tarde que desembocaría nuevas emociones, pero también nuevas inseguridades.