- enojo -

4.8K 690 95
                                    

Yoongi había aprendido muchas cosas a lo largo de su veintiun años, pero jamás entendería porque su padres no lo apoyaban en sus sueños.

"O te esfuerzas para conseguir lo que quieres, o alguien se esforzará más y te arrebatará tus sueños"

Y en definitiva, él no pensaba pasar por lo segundo. Nadie podría pasar encima de él, tendrían que contarle las piernas antes de hacerlo. Sabe lo que quiere, lo que necesita hacer para obtenerlo y nadie va impedirlo, ni siquiera sus padres, ellos no iban a decidir su vida y mucho menos su futuro, ahora es una persona adulta y seguiría su propio corazón, solo él sabe lo que es mejor.

Tiró el balón hacía la canasta y gruñó al notar que este no entró. Sus músculos están demasiado tensos y comienza a molestarse, su pecho no deja de subir y bajar, sabe que no debería desquitar su furia con el balón, pero de alguna forma, es la única manera que tiene para poder tranquilozarse.

"necesitas calmarte" pensó.

Esta consiente que sus padres jamás lo apoyarán en sus decisiones, siempre fue un buen hijo, ¿por qué simplemente no respetaban lo que él amaba y deseaba hacer?. No podía contener su enojo, no importa cuántos tiros fueran, no podía encestar alguno. Fastidiado y agobiado lanza el balón hacia las gradas. Le dolía que su familia no lo apoyará, se sentía cansado, mental y físicamente.

— El pobre balón no tiene la culpa — gira la cabeza al escuchar esa voz, sabía perfectamente a quien pertenecía. Hoseok, lo veía con las cejas fruncidas, brazos cruzados y sus labios formando un triángulo. Lo miró de mala manera, sabía que el no tenía la culpa, pero estaba tan enojado y que llegara en ese momento no era la mejor opción, no desde que comenzó a sentirme extraño cerca de él. — ¿Te pasó algo?

— ¿Qué haces aquí, no se supone que estarías en tu clase de baile?, te dije que yo iría por ti, ¿tan difícil era esperar allá?— escupió de manera torpe y tosca.

No respondió. Yoongi, sabía perfectamente que significaba eso, así que lo examinó minuciosamente e instantáneamente se percató de lo bien que se veía. Llevaba unos jeans cargo blancos, unas converse rojas, una chaqueta azul estampada y de una talla demasiado oversize para su flacucho cuerpo, llevaba ese estúpido gorro azul que lo hacía ver descaradamente adorable. Hizo contacto con sus ojos, podía notar como lo observaba furioso, sus pestañas largas sobresaliendo de esos bonitos orbes, una cortina de cabello cubrían sus ojos marrones, siguió analizando su rostro, su perfecta nariz, que cualquiera que la viera envidiaría tenerla, tonto Hoseok, con sus mejillas regordetas, las cuales se encontraban rojas debido a que venía de bailar, siempre quería tomarlas y poder morderlas todo el día.

Sumergido en su burbuja "analizando lo bonito que es mi MEJOR AMIGO", llegó finalmente a sus labios, seguían apretados formando un triángulo, cualquiera que lo conociera, sabría lo que esa mueca significa, a su lado destacanban dos lindos hoyuelos, debía traer algún tipo de bálsamo ya que su labios se veían humectados y apetitosos, ¿que se sentirá besarlos?

— ¿Yoongi? — la voz del menor le cayó como una cubetada de agua fría, sacándolo de sus mas homosexuales pensamientos y haciéndolo volver a su realidad.

— Discutí con mis papás, nada que te deba interesar — respondió sincero, tal como lo hacía siempre, sin percatarse de lo tosco y grosero que seguía sonado, encogió los hombros volteando, restandole importancia mientras camina en dirección a una de las bancas donde se encuentran sus cosas — Nada nuevo.

El menor chasquea la lengua, las palabras de su mejor amigo le afectan, pero sabe lo agobiado que debe sentirse, así que se acerca a él, lo toma de hombro haciendo que volteé.

— ¿Sabes que hago cuando me peleo con los míos? — Yoongi niega— me pongo los audífonos, busco la canción que me escribiste y que se joda el mundo—.

El mayor se voltea aún más molesto, molesto porque su amigo tiene razón, que se jodan todos, pero lastimosamente para él no era así de fácil, se sugestionaba y agobiaba por cualquier cosa. A veces quisiera ser un poco más como su amigo.

Sigue guardando sus cosas, se siente demasiado cansado y sudado, solo piensa en ir a las regaderas, ducharse y salir de la universidad, pero no sin antes llevar a su mejor amigo hasta su hogar, justo como de costumbre — ni siquiera la música podría ayudarme en estos momentos Seok, espérame en la entrada — es lo último que dice y sale.

Ya en las regaderas se comenzó a cuestionar de lo estúpido que había sido con su amigo, para empezar, él no tenía la culpa, su mejor amigo siempre había estado para él y lo único que había tratado de hacer en ese momento era ayudarlo. Desde que conoció a Hoseok a los cinco años, supo que sería la única amistad sincera que tendría en toda su vida y terminó de confirmarlo después de varias decepciones y traiciones por parte de otras personas. Era un estúpido de primera. ¿Por qué siempre jodia todo?. Hoseok, no tenía porque soportar que le hablarán de esa manera, él merecia lo mejor del mundo. Se apresuro a ducharse y salir, quería diculparse con él, tal vez invitarlo a su casa a jugar video juegos, o cualquier cosa, pero quería arreglar lo que había hecho.

Llego a la entrada, busco rápidamente a su amigo, pero no estaba por ningún lado. A lo lejos pudo ver a Jimin, compañero de salón de Hoseok, así que corrió hacia el.

— Jimin.

— ¿Qué quieres? — responde de mala gana, haciendo ver su evidente molestia.

— Hoseok, ¿lo has visto?, le dije que me esperaba en lo que me ducha...— fue interrumpido.

— Hoseok ya se fue, parecía que había llorado y dijo que no se sentía bien — Se acercó al mayor — Si me llego a enterar que tú tuviste algo que ver Min Yoongi, ten por seguro que te cortaré el pene — amenazó para luego girar e irse, dejándolo muy asustado, temiendo por su pobre pene. Jimin era chiquito, pero dios, era el mismísimo diablo, si algo se proponía lo hacía y si alguien se metía con su querido Seokie era persona muerta, haría todo por arruinarle la vida.

Despues de esa para nada agradable charla, decidió marcarle, "tip, tip, tip.. el numero que usted marco no se encuentra disponible", una, dos, tres, cuatro, hasta que a la quinta llamada respondió.

—Hoseok, salí y no estabas, ¿por qué no me esperas...— no pudo terminar de preguntar. Lo que dijo su amigo lo dejo sin palabras, seguido de eso, se colgó la llamada.

— Vete a la mierda Min Yoongi, no me molestes más.

SOY HETERO, PERO ME GUSTA MI MEJOR AMIGO || YOONSEOKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora