Capítulo 15

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Me levanto, me aseo y me visto. Bajo a la cocina para desayunar y me encuentro a Cheryl sentada en la isla tomándose un zumo de naranja. No hemos vuelto a hablar desde anoche, yo no tengo ganas y ella me evita.

Voy al armario, cojo un vaso y me echo un poco de zumo que aún queda en la jarra.

- Buenos días ¿no? - me pregunta sin mirarme.

Le echo un vistazo rápido y luego sigo con lo que estaba haciendo.

- Supongo - le contesto - ¿dónde está mi madre?

- ¿Tengo cara de saber dónde está tu madre?

Ya le ha vuelto la mala leche, resoplo. Al escucharme me mira.

- Estará trabajando con mi padre.

Asiento con la cabeza sin interés.

- Hoy tengo cita con la psicóloga ¿me acompañas? - ella no me responde, solo se me queda mirando - porfa, y luego si sigo teniendo ganas de vivir vamos al centro comercial.

Sé que le gusta comprar ropa y me lo confirmó cuando al pronunciar centro comercial se le dibujó una enorme sonrisa y se le quitó el mal humor.

- Claro - me responde - ¿a qué hora es la cita?

- A las 11: 00 am.

- Son las 10 y media.

- Sip, por eso nos vamos ya.

//

- Bueno, Toni, siéntate - me dice sonriendo mientras me señala el sillón en el que tantas veces me había sentado - Emm, ¿por dónde quieres empe...?

- Te lo quiero contar todo, Emma, desde que nací hasta ahora - le corté.

- ¿Estás preparada? - asiento - de acuerdo, narra lo que quieras o con lo que más te sientas cómoda, yo te escucharé todo el tiempo y solo hablaré cuando termines. - vuelvo a asentir.

- Vale , a ver - respiro profundamente para prepararme.

- Tranquila - me dice mientras se echa sobre su silla.

- Ya conoces a mi madre, pero nunca te hablé de mi padre y mucho menos de mi hermana. Cuando yo nací tuve la suerte de ser la menor y de tener una hermana mayor, Jane. Me sacaba 10 años y prácticamente ella era la que cuidaba de mí. Yo nunca me dí cuenta de que es lo que pasaba en esa casa hasta que cumplí los 6 años, fue como si la venda que me impedía ver la verdad se hubiese caído. Cuando yo nací me pusieron Antoinette, ya sabes que fue por mi padre. Él maltrataba a mi madre, física y psicológicamente, por eso mi madre estaba más en el hospital que en mi casa, se perdió muchos cumpleaños míos y de Jane, mi padre es que ni se acordaba de ellos - suspiré - Un día, mi padre llegó a casa borracho y drogado, Jane sabía lo que iba a pasar así que me encerró en su cuarto e intentó distraerme, como siempre hacía cuando papá discutía con mi madre. La pelea fue en aumento y Jane me pidió que me quedase en el cuarto, que ella iba a bajar un segundo pero que por nada del mundo bajase y que me quería muchísimo - agacho la cabeza y se me resbala una lágrima por la mejilla - Como tardaba más de la cuenta bajé y la escuché pelear con él intentando salvar a mi madre. Al llegar al final de las escaleras vi como mi padre agarraba un cuchillo para apuñalar a mi madre, Jane se metió en medio y la golpeó. Ella cayó a un lado y se dio con la encimera en la cabeza, murió. Desde entonces tuve que ser independiente y cuidarme de mí ya que nadie lo hacía. Años más tarde mi padre murió de una sobredosis y mi madre se enganchó al no superar la muerte de Jane aún, luego las dejó.

- Dios - me responde con los ojos llorosos.

- No he tenido unos padres que me cuidasen, de hecho nunca les importé y la única persona que yo le importaba murió. Sueño con cosas del pasado casi siempre y me producen muchísima ansiedad. ¿Cómo quieres que perdone a mi madre si para ella nunca he existido, incluso cuando mi padre ya no estaba?

- Es un tema delicado, hay que verlo desde muchos puntos de vista.

- ¿Si? pues dime alguno, a ver si soy capaz de comprenderla.

- Ella estaba sufriendo maltrato, intentando sobrevivir de un hombre que cualquier día la iba a matar, luego probó cosas que no tenía que haber probado pero no tenía otra opción después de todo lo que había pasado.

- Yo he pasado por muchísimo también y no me he drogado - le respondo con rabia.

- Toni, en cuanto ha recuperado su vida ha empezado a preocuparse por ti, te ha traído aquí, no quiere perder a la única hija que le queda.

- Ya es tarde para que se preocupe por mí, ya sé cuidarme sola - respondo levantándome - no quiero seguir hablando, nos vemos otro día.

Me dirijo hacia la puerta y toco el pomo.

- He visto que ya no usas vendas.

Me giro sin soltar el pomo y la veo sonriendo. Está orgullosa de mí, por una vez en mi vida alguien que no fuese mi hermana estaba orgulloso de mí.

- Desde que Cheryl vive conmigo no me hago daño, creo que mi cabeza está ocupada intentando no discutir con ella y no pienso en nada más - ella amplía más la sonrisa si eso es posible.

- En la próxima sesión hablaremos de tu orientación sexual - me guiña el ojo y yo me sonrojo.

Me vuelvo a girar hacia la puerta para salir pero la vuelvo a mirar.

- ¿Sabes? Agradezco que te des cuenta de si me hago daño o no, mi madre ni siquiera se preocupa por eso.



















Toni 🥺

Esta tarde a lo mejor subo otro capítulo :')

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