💥Eres mi medicina 💥 (bakugou x lectora)

cap 15 pt1

B A K U G O U

Su mano se posó en mi mejilla acariciándola levemente con su pulgar, era un contacto torpe, vacilante. Tome su cintura con delicadeza y la acerque más a mi, haciendo el toque de nuestros labios más firme, nuestras narices se acariciaban y de vez en cuando nuestros dientes chocaban demostrando nuestra inexperiencia en esto.

Siempre pensé que mi primer beso sería como los clichés de las novelas literarias, en las que describen las supuestas mariposas en sus estómagos, los brillitos al rededor de ambos, o el supuesto sabor dulce de los labios de la persona contraria. Esto se siente mil veces mejor de lo que describen esas estúpidas novelas, sus labios se sentían como el mar, emanaban una agradable calidez y el roce de sus ásperos labios me era realmente adictivo.

Me mente estaba hecha un lio, llegaban a mi preguntas a las cuales no me tomaré el tiempor de darles respuestas, solo me concentre en disfrutar del momento.

Después de unos largos segundos nos separamos, relamí mis labios sintiendo un extraño hormigueo en mi boca y extrañando la calides de los labios de T/N. Fijé mi mirada en el rostro que estaba a centímetros del mío, ella se encontraba aún con los ojos cerrados y un fuerte sonrojo se expandía por sus mejillas incluso llegando a colorear sus orejas, sus labios estaban rojos y empapados, al igual que los míos, unos cuantos segundos pasaron hasta que abrió sus ojos. Ese hermoso y maldito brillo seguía ahí, abrí mi boca con la intención de decir algo, lo que fuera, pero toda intención de hablar quedó en el olvido cuando ahora ella había chocado sus labios contra los míos, iniciando nuevamente esa danza ahora de manera más profunda, sentí mi corazón acelerarse aún más, si es que eso era posible, su mano paso de trás de mi nuca jugando con mis cabellos, yo por mi parte agarre con más firmeza su cintura y la pegue a mi aún más.

Nos separamos con un pequeño y delgado hilo de saliva aún uniendonos y con nuestras respiraciones alteradas,  conectamos nuestras miradas y por unos segundos crei que el brillo de sus ojos incremento, opacando fácilmente a cualquier estrella que adornaba el cielo nocturno.

Estábamos a nada de fundir nuestros labios nuevamente en un beso, hasta que escuchamos como la puerta principal se abría con agresividad, nos separamos inmediatamente, el brillo de sus ojos desaparecio siendo reemplazado por una mirada llena de angustia y miedo

Se levantó a una gran velocidad y tomo mi mano llevándome hacia el armario que se encontraba al lado de su escritorio

–Quedate aquí y no te muevas– dijo en un susurro– y por favor, por nada del mundo vayas a salir.

No me dió tiempo a responderle si quiera,  cuando cerró la puerta del pequeño armario dejándome con la palabra en la boca, allí adentro no estaba del todo obscuro gracias a la poca luz que entraba por las pequeñas aberturas que tenia esa puerta de madera del armario, me acerque más a esas aberturas con la intención de mirar a través de ellas. La puerta de la habitación de T/N se abrió con tal fuerza que rebotó con la pared contigua creando un sonido muy fuerte, dándole paso a dos figuras prepotentes, el olor a alcohol inundó la habitación.

Y el primer golpe llegó en forma de cachetada, tan malditamente fuerte que hizo que T/N cayera abruptamente al piso.

–Maldita niñata de mierda como te atreves a robarme—gritó aquel hombre agachándose a su altura para tomar su cabello entre sus manos y jalarlo— si no entiendes por las buenas será por las malas.

Abrí aún más mis ojos con sopresa al ver cómo la otra figura que estaba en la habitación, a quien pude reconocer como la mamá de T/N, desaparecio por unos segundos para luego regresar con un cinturón en sus manos

Unos

Dos

Tres

Cuatro..

Ya perdí incluso la cuenta de cuántos azotes llegaron a parar en la ya maltratada espalda de T/N, siento mi estómago contraerse del coraje e impotencia de no hacer nada, los gritos, sollozos y alaridos que suelta taladran mi cabeza haciendo que una presión dolorosa se implante en mi pecho.

Los azotes no sé detenían, y las súplica de T/N tampoco, y al parecer eso hizo irritar a su mamá ya que sin ningún cuidado pateó su abdomen.

Estaba a nada de salir, pero la puerta no se abría, note como la mirada de T/N estaba clavada en mi y su mano estaba sutilmente levantada en dirección a la puerta que estaba frente a mí.

–¡No!– gritó, pero a diferencia de antes, ese grito no iba dirigido a sus padres, si no a mí.

Mi cuerpo se paralizó, podía sentir mis manos cosquillear y el sudor acumulándose en mis palmas, mi respiración se agito y apreté fuertemente mis puños ante la impotencia de no hacer nada, quería salir, explotar a los malditos que le estaban haciendo daño y llevarmela cuánto antes de aquí.

Pero no.

Solo me quedé observando cómo sus padres la lastiman sin compasión alguna,  sin darme cuenta mis ojos se llenaron de lágrimas e inconscientemente enterraba mis uñas en mis palmas.

5 minutos —que para mí fueron como una eternidad— pasaron hasta que por fin sus padres salieron de la habitación cerrando la puerta tras de si, salí solo cuando escuché el coche arrancar nuevamente y alejarse rápidamente de la casa.

La velocidad con la que me acerque a T/N fue irreal, la tome en mis brazos, con cuidado de no tocar mucho su espalda, y la llevé a su cama acostandola boca abajo. Levanté lentamente el abrigo negro que tenía puesto encima para poder dejar su espalda descubierta, notando cómo la blusa que llevaba abajo, antes blanca, ahora estaba completamente manchada y pegada a su piel sangrante. Mis manos volvieron a temblar con mucho más fuerza que la última vez a escucharla quejarse del ardor.

No sabía que hacer.

¿Llevarla a mi casa era una opción?

¿Pero que mierda se supone que le diré a mis padres si llevo a una T/N sangrando a mi casa así por así?

¿Que excusa se supone que diga?

Unos sollozos me hicieron mandar todos mis pensamientos a la mierda, ayude a T/N a subir a mi espalda con mucho cuidado la subí en la moto para ir en dirección a mi casa.