Cuando menos me lo esperaba

ESTUDIAR CON JAKE, ¿UN SUEÑO O UNA REALIDAD?

Lara

¿Qué me pongo para ir a estudiar con Jake? No quiero enseñar mucho cuerpo, pero empieza a hacer calor y con sudadera no puedo ir. Me decido por unos cargo pants verdes y un top blanco, me pongo mis Convesrse, cojo mis cosas y bajo a la puerta.
-¿Dónde vas?-me pregunta Adam
-¿Acaso te importa?
-Claro, eres mi hermanita
-Mentira, tú nunca te has preocupado por mí
-Serás...
Tocan el timbre, abro la puerta antes que Adam y la cierro delante de sus narices. Veo a Jake.
-Hola pecas
-Hola
-¿Nos vamos?
-Si
Pasamos el camino hablando sobre la vida, al llegar a la biblioteca, nos sentamos en una de las mesas.
-Vale, ¿por dónde quieres empezar?
-No sé
-Pues abre la página 49
La abro, Jake me empieza a explicar el tema, pero no le muestro mucha atención, ya que lo estoy mirando, tiene unas cejas poco pobladas, una nariz muy respingada (ojalá tenerla cómo él), una mandíbula muy marcada, le hace el toque sexy y lo que más me gusta, su pelo negro despeinado. Él levanta la vista, yo la bajo enseguida.
-¿Me estás mirando?-me pregunta
-No
-Si si
-¡¿Para qué iba a mirarte!? Si eres más feo...
Mentira, es muy guapo
-Eso duele
-Me da igual
-Shhh, chicos estamos en una biblioteca-nos dice la bibliotecaria
Jake y yo nos miramos, una carcajada se escapa de mi boca.
-Calla, que nos van a regañar
-Me la pela
-Pues a mí no, vamos, seguimos con el tema
-No quiero estudiar más
-Vamos Lara
-¿Vamos afuera? Así podemos hablar
-Me parece bien. ¿Vamos a un local y comemos?
No quiero comer, menos si es comida basura
-No tengo hambre
-Me da igual, nos vamos a una pastelería muy buena
Fantástico, una pastelería, a comer dulces. Al llegar, nos sentamos en una mesa, James pide un batido de Oreo y un gofre, yo pido un iced-coffee.
-¿Solo quieres un café con hielo y leche?-me pregunta Jake
Bastante culpa tengo con la leche, ¿por qué me iba a comer algo más?
-No tengo más hambre
James se levanta de la mesa y va hacia el camarero y le dice algo, vuelve a la mesa y se sienta. Lo miro con mala cara.
-¿Qué le has dicho?-le pregunto de mala gana
-Ya verás
10 minutos después, el camarero viene con el batido de Jake, su gofre, mi café y otro gofre. ¿2 gofres? Se tiene que equivocar. Nos sirve.
-Te he pedido un gofre-me dice Jake
-¡Te he dicho que no quería nada!
-Mala suerte, ahora te lo comes
-Es que...
-No hay excusas Lara. ¿Crees que no me he dado cuenta? Come
Esta frase me da un escalofrío por todo el cuerpo. ¿Se ha dado cuenta de mi tca? Espero que no. Hablamos un poco sobre el colegio, lo fácil que era, sin preocuparnos por nuestros estudios.
-Antes no nos hacían leer como 10 libros por semana-dice
-Ya, que pereza me da leerlos
-Pero si a ti te encanta leer
-Sí, pero me gusta leer mis libros
-Háblame sobre tus libros
-Te vas a aburrir
-Tú nunca me vas a aburrir
Vale, esta frase me ha hecho ilusión...
-Lara, venga háblame de tus libros, por favor
-¿Por qué tienes tanto interés en mis libros?
-Por qué me gusta escucharte, hablar sobre lo que te gusta
-Bueno, me gustan los libros de... romance
-Oh, ¿y de qué trata el libro que estás leyendo?
-No quieres saberlo
-Sí quiero
-No estás mentalmente preparado para saberlo
No quiero que se sepa que me gustan las novelas eróticas, dónde los personajes se tocan como frutas del mercado y se dan como cajones que no cierran...
-¿Bueno, tus libros favoritos?
-No tengo uno, pero me gustan mucho los de Joana Marcús
-No sé quién es
-Me lo imaginaba, ella es de España y nosotros de Australia
-¿Lees libros en español?
-Sí, hablo español, alemán e inglés
-Oh, qué guay, yo solo sé hablar inglés. Estoy aprendiendo alemán, pero no es fácil
-Pues vale
Hablamos un ratito más. Se ha hecho tarde, son las 7.
-Voy a pagar-dice Jake
-Yo también
-No, invito yo
-No hace falta
-Calla, hoy invito yo
Me callo y dejo que Jake pague. Al terminar, Jake me lleva a casa.