shut Up, stupid Jay [SAGA WALKER-JONES]

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Elizabeth

Toda mi familia ha tenido una historia, mis hermanos consiguieron sus metas, y yo ni siquiera he conseguido dar mi primer beso.

Mi hermano mayor Dorian está planeando su boda con su prometido Clyde, mi hermano Owen es el cantante de una banda muy popular, mi hermana gemela se atrevió a salir del armario con mis padres y a presentarles a su novia, y mi hermana pequeña ha conseguido una beca en una prestigiosa escuela de Seúl.

Y yo que estoy a punto de cumplir los 18, lo único que he hecho bien en mi vida es absolutamente nada.

Siempre he querido encontrar el amor, encontrar un propósito en la vida y teóricamente eso es algo que te enseñan tus padres, pero por parte de mis padres y seguramente de los de muchas más personas, el amor que vimos de nuestros padres fueron peleas y discusiones cada dos por tres, algunas más fuertes que otras, yo de mis padres aprendí que tienes que estar cien por cien seguro de estar enamorado/a de otra persona, que si estáis juntos por compromiso, por las apariencias eso muchas veces no acaba bien, es por eso que no encontrado el amor, porque creo que podría acabar como mis padres y lo último que quiero es acabar como ellos.

La vida no era lo mejor que tenía en general y el destino me lo ponía peor, no solo no podía con mi familia, en clase tenía que aguantar al imbécil de Jay Evans. Llevo conociendo a Jay desde que los dos teníamos tres años, cuando era pequeña el capullo llego a arrancarme un mechón de pelo porque si, porque le apetecía, al principio me intentaron convencer de que como éramos pequeños eso era normal, luego a los nueve cuando mis padres se divorciaron, él llegó a morderme y cuando fui a avisar a la profesora, llorando, la señora solo me dijo,"es que le gustas ", y una polla, a los quince en mi primer en la graduación, convenció a todos incluido mis hermanos a que me hicieran un Carrie, no era normal que nadie me eligiera y menos como reina del baile, pero que subiese al escenario y cuando me dieran la corona me cayese un cubo de pintura roja encima, según mis profesores no se sabe quién fue, pero yo sé que fue Jay, ese estúpido pelirrojo, lo vi reírse de mí, lo vi mirarme desafiadamente.

Cuando acabamos el instituto antes de empezar bachillerato, pensé que no lo volvería a ver, que sí al menos hacíamos bachillerato, los dos no tendríamos que coincidir, pero el destino me odia y resulto que vamos a la misma clase y encima hacemos el mismo bachillerato, no es bonito levantarte de buen humor y que un idiota te amargue el día, porque encima hace bromas sobre lo que paso en nuestra graduación.

Ir al instituto sabiendo que te vas a encontrar a un imbécil, es como meterte en el océano y nadar con los tiburones sin jaula, pero claro, tenía que acabar el bachillerato, y por ello tenía que ir a clase.

Como cada mañana esperaba a que la tardona de mi hermana gemela estuviese lista para irnos, algo raro de ella y yo es que aunque seamos gemelas espejo, se puede notar quien es quien, Jo tiene el pelo más corto y lleva mechas azules en las puntas del pelo, yo soy más de pelo largo y mi rubio natural, por no decir que también se nota en el modo de vestir y nuestros gustos, jo siempre va de negro, o con alguna camiseta de Nirvana o Guns and roses y bueno la ropa ancha, en cambio, yo siempre voy con colores pasteles, sobre todo el azul o el rosa, y bueno con los gustos ya es otra cosa, Jo siempre es de salir de casa, irse de fiesta, en cambio, yo soy más de quedarme en casa leyendo un buen libro o viendo alguna serie.

-Perdón me he distraído escuchando a Nirvana - dice mi hermana bajando por las escaleras mientras mira su teléfono.

-Cómo siempre, ¿vamos o qué?- digo mientras pongo los ojos en blanco.

El camino hacia el instituto era siempre el mismo, Jo con su música o chateando por teléfono con su novia, eso hasta que llegábamos a casa de Lana, mi mejor amiga, Lana siempre salía de casa con su hermano Zack, los dos se parecían para llevarse dos años.