Lou<3 {Larry Stylinson}

3.

Louis estaba sentado en el sofá con sus piernas cruzadas. A cada momento cambiaba el canal buscando algo que le gustara pero no conseguía que.

Harry salió del cuarto y miro a su novio allí sentado, vio sus labios y recuerdos de la mamada que le hizo en el baño llegaron a su mente, él quería algo más.

–Louis –llamo su atención.

El castaño desvió su mirada de la pantalla del televisor hasta el chico más alto.

–¿Dime, amor?

Harry se acercó hasta él.

–¿Podrías venir conmigo por favor?

Louis asintió levantándose y siguiendo a Harry hasta la cocina, quedaron parados a lado de la mesa y el castaño confundido miro a su novio.

–¿Qué pasa, Hazz?

Harry le sonrió.

–¿Recuerdas que siempre te quejas de tu estatura?

Louis rodo los ojos.

–Sí.

–Bueno, hoy te demostrare que no importa, ahora, bésame.

El castaño arrugo el entrecejo pero ¿quién era él para negarle un beso a su novio? Así que se paró de puntitas para poder besarlo, pero Harry se colocó derecho, aumentando un poco su estatura haciendo que se le hiciera imposible besarlo.

–Harry agáchate –dijo con un puchero–. No llego hasta tus labios.

El rizado sonrió mirándolo.

–Tal vez no eres suficientemente alto como para besarme, pero eres excelente para esto.

Antes de que Louis pudiera decir algo Harry ya lo había volteado y dejado con el pecho contra la mesa. Sus muñecas fueron atrapadas en su espalda. El rizado le bajo los pantalones holgados que llevaba poco a poco junto a los bóxer dejando sus nalgas expuestas. Con sus dedos tanteo la entrada y metió uno sin previo aviso. Louis jadeo ante la sorpresa. Harry comenzó a sacar y meter el dedo, encorvándolo tocando el punto sensible de Louis.

Cuando lo dilato lo suficiente. Su miembro ya estaba duro bajo la tela de su bóxer. Se los bajo rápidamente, manteniendo a Louis en la misma posición, quejándose por la falta de contacto.

–Escupe.

Louis hizo caso y escupió en la mano de Harry, este agarro esa saliva y la paso por todo su miembro, usando la saliva del castaño como lubricante.

Alineo su pene en la entrada de Louis y se metió hasta al fondo en él, haciendo que este gimiera.

Sus penetraciones eran constantes, manteniendo firmes las muñecas de Louis en su espalda.

–Vez como no eres tan pequeño para esto, bebé –susurro en su oreja mordiendo su lóbulo.

Y siguieron así. Hasta que ambos llegaron al orgasmo.

Solo quería recordarles que esto es una mini-historia, por eso que los capítulos son tan cortos. De igual manera no tendrá muchos partes.