One Shot [Riven x Flora]

Traitor

Te amé en tu peor momento

Pero eso no importó

Te tomó dos semanas

Ir y salir con ella

Supongo que no hiciste trampa

Pero sigues siendo un traidor

Dios, desearía haber pensado en esto

Antes de ir, y enamorarme de ti.

Chillidos de emoción a mi alrededor y mi corazón rompiéndose como un vaso de cristal cayéndose al suelo, todo pasa rápido ante mis ojos pero el corazón lo entiende antes que mi mente. Todo llegó a nada, toda esperanza estada hecha añicos y no hay nada que esperar.

-Riven me pidió ser su novia- seguía chillando emocionada Musa, fingi una sonrisa mientras las demás la llenaban de preguntas.

¿Podria escuchar cada detalle de su increíble historia? Como el chico que amo y que creía que me amaba le decía todo lo que yo quería escuchar a otra, a mi amiga.

Sabia que no debía ser egoísta y debía alegrarme por ella, pero mi corazón late con mucha fuerza.

Ella sonrie -Me dijo que me ama, que soy la única que quiere en su vida aunque no sepa expresar bien lo que siente a veces- explicaba.

Sentía inmensas nauseas ante todo lo que sucedia, como podía cambiar todo en un minuto.

-Dijo que ante sus ojos no hay otra chica más para el, solo estoy yo. Que quiere tener todo conmigo.

Mentira. Esas mismas palabras me las habia dicho a mi también, ¿acaso lo mio eran falsas palabras?

Las mismas palabras que le dijo a Musa me las había dicho a mi antes, no significaba nada para el.

Musa sonreia aun -Hace semanas notaba sus miradas, por fin dio el paso.

Hace semanas me hablaba aun para decirme que le parecía unica, ¿era solo un juego?

Me levanto con una sonrisa forzada y camino hacia la puerta -Voy un momento abajo, luego vuelvo chicas.

Ninguna dijo nada, pero sus miradas hablaban de más. Baje al patio, estaba oscureciendo, camine hacia el bosque cercano y me senté bajo un árbol.

Las lagrimas descienden por mis ojos, hablaba con ella mientras me prometía falsas cosas y me decía palabras bonitas sin significados para el.

No tuvimos nada, no fuimos nada pero no quita el hecho que se sienta como una traición. No tardo ni unos días para ir con ella y decirle lo mismo que a mi.

No la culpo a ella, merece todo esto porque es la indicada pero como duele el amor.

Me dijo paranoica cuando le comenté que miraba con amor a Musa, se que no lo siente para nada. Se que no le importa el hecho de dañarme, aun habiendo estado para el en sus peores momentos, nada le importo.

Puede que el no haya sentido que fueramos nada, pero se siente como una traición.

Trato de controlar mi respiración y calmar mis latidos, la brisa fría choca contra mi cuerpo y tiemblo.

Duele tanto, aunque se que no es lo que merezco pues no hice nada mal para ello. Debi haberlo visto venir para no quedar como la tonta quizas...

Cierro los ojos suspirando con dolor con los latidos relantizados ya, pero los abro al escuchar unos pasos.

Layla, se sienta a mi lado -Flora- me llama -¿Como te encuentras?

Supongo que mis ojos rojos por las lágrimas me delatan algo -El me dijo lo mismo- murmuro.

Asiente -Sabia que tenias algo con el antes, supuse que no te pudo sentir del todo bien.

Niego con la cabeza -Me alegro por Musa, me alegro muchísimo- confieso sincera.

-¿Pero...?- sigue ella.

Suspiro -No quita el hecho de que me sienta traicionada Layla, de que me duele y me sienta estúpida.

Niega pero yo sigo hablando -Si, porque sabia como el la miraba aunque siempre me lo negaba.

Se queda callada -No entiendo que me faltó para que se quedará conmigo, para que cumpliera sus promesas.

-No vale ya la pena preguntárselo Flora....- intervino.

Suelto un sollozo -Me quería...- digo entre lágrimas.

Layla niega -No te mientas a ti misma, si te quisiera te habría elegido- susurro.

Y era verdad, si de verdad me hubiera querido como decía me habría elegido a mi...

Ella me abraza y lloro aun sobre su hombro, como duele un corazón roto.

-Estuvimos a nada de serlo todo- sollozo.

Se queda callada por unos minutos hasta que me tranquilizo -A veces es mejor aceptar que todo acabó, no tenia futuro.

Asiento con dolor -Si el destino te lo quito es porque no era para ti.

-Yo lo quiero a el...- susurro en un suspiro de voz.

Los recuerdos con el vuelven a mi mente, todos felices con nuestras risas sin ningún tipo de dolor. ¿En que fallamos para no amarnos como deberíamos? La respuesta es simple, el no es para mi ni yo para el.

El ya tiene a alguien que si es para el, yo aun no lo tengo.

Layla me abraza de nuevo al ver mi silencio repentino, mis ojos se vuelven a llenar de lágrimas ante los cientos de recuerdos con el y todas nuestras sonrisas.

Cuanto quisiera volver a ellos otra vez, si hubiera sabido que esa tarde soleada en el lago iba a ser nuestra última juntos me hubiera quedado más tiempo.

-Como hubiera deseado haber pensado en esto antes de haberme enamorado de el- susurro con dolor.

Tenia que aceptar que no era a mi a quien amaba, no tenia la culpa el ni Musa ni yo. No se elije a quien amar.