Insistencia de un alfa ଓ Jimsu

prólogo

En el oscuro y enigmático mundo de Kim Taehyung y Min Yoongi, el amor era una mera ilusión, eclipsado por un deseo sexual que siempre estaba presente. No había amor verdadero ni lazos familiares que los unieran en esa relación, solo una conveniencia económica que les favorecía a ambos. Su matrimonio fue un acuerdo pactado por sus padres, y al principio, ambos individuos se ignoraron por completo, hasta que llegó la tan esperada luna de miel. Desde entonces, se convirtieron en una pareja aparentemente estable y hermosa, despertando envidia en todos aquellos que conocían solo los rumores y las apariencias.

Cuando Taehyung tenía necesidades, Yoongi lo sabía muy bien, ya que había compartido su vida con ese hombre durante cinco largos años. Conocía el momento exacto para satisfacer los deseos de Taehyung, ya que como omega, tenía el deber de desempeñar su papel de buen esposo. Tal vez en el futuro, incluso desempeñaría el papel de una buena madre.

Sin embargo, una vez que su esposo alcanzaba el clímax, Taehyung simplemente se levantaba después de recuperar el aliento y se dirigía al baño, necesitado de un momento de soledad, para luego entregarse al sueño. Mientras tanto, Yoongi se quedaba en la cama, esperando pacientemente a que Taehyung se uniera a él, deseando apagar las luces y compartir un verdadero vínculo emocional. Después de todo, él también era una persona con necesidades y deseos, pero el alfa siempre parecía preocuparse solo por sí mismo.

En esa fatídica noche, mientras Kim Taehyung ajustaba su corbata, Yoongi se encontraba en la sala de estar, sumido en la soledad y acompañado únicamente por una copa de vino.  Se sentía solo y extrañaba el amor que aquella persona le daba, el cariño, los besos, las caricias, los regalos, los halagos, la atención y la dicha de sentirse amado. Extrañaba volver a sentir esa extraña sensación con esas palabras: "Serás mío, serás mi omega y llevarás mi marca algún día".  Pero, ¿eran esas palabras verdaderas? Park siempre le aseguraba que su alfa ansiaba tenerlo cerca todo el tiempo, y que incluso estaría dispuesto a enfrentarse a su esposo si fuera necesario. Yoongi podía sentir en lo más profundo de su ser que Jimin lo amaba y se preocupaba genuinamente por él, ya que nunca antes había encontrado a alguien tan complaciente y comprensivo como ese joven alfa. Incluso insistía en que se divorciara de Kim, alegando que aquel hombre solo estaba interesado en su fortuna y que no lo amaba como él lo hacía. Yoongi era consciente de que alguien como Kim no merecía estar a su lado, pero ¿acaso él merecía a alguien como Park?

Una vez que terminó de beber su copa de vino, Yoongi se levantó con determinación y se dirigió a su habitación. Eligió cuidadosamente la ropa más cómoda que tenía en su armario y se arregló el rostro con sutiles toques de maquillaje. Sabía que era hora de tomar una decisión, de romper con la monotonía y la insatisfacción que invadían su vida.

"Encuéntrame en nuestro hogar, pasaré la noche allí. Te necesito". Fueron las palabras que salieron de sus labios, cargadas de urgencia y anhelo. Eran palabras que transmitían la esperanza de encontrar algo más, algo que pudiera saciar su corazón y despertar esa pasión y conexión que tanto añoraba.

Park, al escuchar esas palabras, sintió cómo su cuerpo se estremecía. La sorpresa y la tensión se apoderaron de él, mientras sus manos agarraban las llaves con firmeza.