En la religión de la Antigua Grecia, los dioses olímpicos eran los principales dioses del panteón griego, que moraban en el Monte Olimpo.
La Mitología Griega es el conjunto de mitos y leyendas pertenecientes a la cultura de la Antigua Grecia, que t...
En la mitología griega, Helio o Helios (en griego antiguo Ἥλιος Hếlios, 'sol') es la personificación del Sol.
Helios era el dios griego del sol, y era considerado uno de los dioses más importantes en la mitología griega. Era hijo de los titanes Hiperión y Teía, y hermano de Selene, la diosa de la luna, y Eos, la diosa del amanecer.
Se creía que Helios conducía un carro dorado a través del cielo cada día, llevando el sol con él. Según la leyenda, el carro era impulsado por cuatro caballos alados, que se desplazaban a través del cielo desde el este hasta el oeste. Al final del día, Helios regresaba al este para comenzar su viaje de nuevo.
Helios era adorado en toda Grecia, pero su culto principal estaba en la isla de Rodas, donde se construyó un impresionante coloso en su honor. Este coloso, que medía más de 30 metros de altura, fue una de las siete maravillas del mundo antiguo.
Además de ser el dios del sol, Helios también era considerado el dios de la visión y la percepción. Se creía que tenía la capacidad de ver todo lo que sucedía en el mundo y que podía otorgar visiones proféticas a aquellos que lo adoraban.
En la mitología griega, Helios también tuvo varios hijos, incluyendo a Faetón, quien intentó conducir el carro del sol y casi causó la destrucción del mundo. Helios también tuvo una hija llamada Circe, quien se convirtió en una poderosa hechicera.
En resumen, Helios era un dios importante en la mitología griega, representando el sol y la percepción. Su culto fue muy popular en toda Grecia, y su legado sigue siendo recordado en la cultura popular hasta el día de hoy.
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La historia más conocida sobre Helios es la de su hijo Faetón, que intentó conducir el carro de su padre por el cielo pero perdió el control e incendió la Tierra. A veces se aludía a Helios con el epíteto homérico Panoptes ('el que ve todo').
