Besa a tu estafador (si puedes)

No me casaré contigo.

Alberu salió de la cámara de Cale Henituse en el palacio con pasos rápidos y un mal sabor de boca.

'Por que hice eso.'

No importaba lo estúpido que se sintiera ahora, no podía retractarse. Alberu se detuvo junto a una alta columna y se apoyó en ella mientras se pellizcaba el puente de la nariz. "¿Por qué diablos hice eso?"

Recordó la vista de Cale Henituse debajo de él. Las mejillas sonrojadas del joven y sus ojos muy abiertos, antes de que los cerrara con fuerza. La forma en que había temblado levemente, y su olor sobresaltado, que había dado vueltas por la habitación, no del todo hostil a los avances repentinos de Alberu, pero definitivamente lleno de confusión y aprensión.

Con un gemido, Alberu se agachó y ocultó el rostro entre las manos. Que desastre. Después de controlarse a sí mismo durante 23 años y sobrevivir a un juego político de alto riesgo en el que podría ser asesinado por su propia familia si daba un paso en falso, ¿ esto fue lo que finalmente lo hizo estallar?

Las palabras de Cale Henituse aún resonaban en sus oídos.

"No me casaré contigo".

Sus palabras habían sido pronunciadas rápidamente, nítidas y claras, sin vacilación.

"Aclaro en caso de que Su Alteza tenga pensamientos en esa dirección. No tengo ningún interés en un matrimonio político, o en involucrarme en la lucha por el trono".

"¡¿Quién dijo que iba a preguntar, ah?!" Alberu ahora se quejaba en voz alta. Pero lo vergonzoso era... No era como si no hubiera pensado en ello.

No un matrimonio real, por supuesto, sino un negocio. No había forma de que se liberaran el uno del otro sin sufrir pérdidas, por lo que también podrían beneficiarse mutuamente. O eso había pensado Alberu, pero parecía que Cale Henituse no tenía problemas para arrojar a Alberu a los lobos.

"Jaja... Qué despiadado". Alberu se rió entre dientes mientras se pasaba las manos por la cara.

Y también...

Qué familiar.

Alberu no era ajeno a la eliminación de obstáculos en su camino, sin importar la forma que tomaran. Si hubiera pensado que podría haber hecho a un lado a Cale Henitus sin sufrir grandes pérdidas, Alberu podría haberlo hecho. Sin embargo, tal como estaba, Cale era demasiado importante, sin mencionar que actualmente era demasiado útil, para meterse con él.

Y el bastardo lo sabía.

"Esto se siente desagradable". Murmuró Alberu. Realmente lo hizo. Era como mirar un reflejo distorsionado de sí mismo. Su otra mitad.

Sin embargo, la otra mitad de un estafador mentiroso seguía siendo un estafador mentiroso y, por lo tanto, era muy molesto tratar con él.

Cale Henituse claramente no se preocupaba por la percepción que el público tenía de él, y eso lo hacía peligroso. Dejó a Alberu con muy pocas formas de controlarlo. Cale valoraba el dinero, pero aunque Alberu podía dárselo, no podía hacer nada con respecto a la ya considerable riqueza de la familia Henitus, por lo que no era una gran correa.

"Maldita sea." Alberu maldijo mientras bajaba las manos y miraba sin ver las baldosas del suelo.

Alberu nunca había esperado encontrarse con su predestinado compañero. Las posibilidades eran algo así como 1 a 10.000. Así que no es imposible, y no es tan raro que nunca hayas oído hablar de él, pero aún así no es común. Sin embargo, el día del banquete, cuando entró en el salón, Alberu lo supo casi al instante.