Giraba y giraba en un torbellino de colores, las cálidas llamas verdes creadas mediante polvos Flú me envolvían y la vista de las diferentes chimeneas mágicas que pasaba me mareaba ligeramente. En definitiva viajar de esa manera no era de mis favoritas, prefería la suave y cómoda escoba que compartía con mi padre o en metro muggle, aquel extraño automóvil de dimensiones exorbitantes que viajaba a una velocidad superior a la de cualquier escoba de carreras que hubiera probado hasta la fecha.
No pasó mucho tiempo hasta que divise la chimenea en la que tenía que bajar, inclinándome ligeramente como me habían enseñado hace ya bastante tiempo y cayendo por la acogedora chimenea del Caldero Chorreante. Me levante presurosa y me aparte antes de que mi madre o mi hermana pudieran acercarse a mí e intentar apartar los restos de ceniza que se habían quedado prendados a mis cabellos y mis ropas, Victoire se acercaba peligrosamente y yo, realizando un excelente movimiento evasivo logre escabullirme del lugar y entrar en el baño de señoritas del lúgubre pero reconfortante local. Al entrar en la estancia me coloque frente al gran espejo de los lavabos; evalué mi imagen y, conforme con lo que veía, me arregle un poco el cabello y sacudí mi ropa para librarme de la mayor cantidad de cenizas posibles; al notar que era una batalla perdida lancé un suspiro teatral y me dispuse a salir, abriendo la puerta rápidamente y caminando como un torbellino hasta la salida, más no esperaba que alguien más pasara por esos lugares.
Un repentino dolor en mi nariz me hizo darme cuenta de que había chocado con una gran masa de carne ligeramente suave pero con una asombrosa consistencia. Me acariciaba mi nariz para aliviar el dolor mientras fulminaba con la mirada a aquella pared humana que se había metido en mi camino cuando me di cuenta de que estaba observando a un extrañamente conocido rostro coronado por un rebelde cabello azul eléctrico. El rubor cubrió mi rostro y mi cuello cuando me percaté de que la persona con la que había chocado era nada más y nada menos que Teddy, mi Teddy Lupin.
-Hola Dom, vaya forma de saludar que tienes-
El se reía mientras se abrazaba su cintura con una de sus manos, posiblemente el lugar donde mi cara se había estampado; yo lo miraba con los ojos abiertos y expresión desconcertada y el simplemente sonreía. Pasamos unos cuantos minutos en esa misma posición hasta que lo observé levantar su mano y picar delicadamente la punta de mi nariz.
-Dom, ¿estás bien?, no me digas que te he causado una conmoción cerebral, porque no estoy seguro de que encuentre un medimago en este lugar y momento-.
Sus palabras sonaron tan absurdas para mí que sin poder evitarlo comencé a reírme estrepitosamente, doblándome sobre mi costado a causa del dolor que me provocaba la estruendosa risa. Teddy me miraba fijamente con una de sus rubias cejas levantada mientras una sonrisa sincera se dibujaba en su hermoso rostro cuando, sin planearlo ninguno de los dos, ambos nos miramos fijamente y comenzamos a reírnos de nuevo, casi revolcándonos en el suelo a causa de las risas incesantes que nos dominaban.
No paso mucho tiempo hasta que escuche las voces de mis padres llamándome, aunque como aún seguía riendo no pude parar para contestarles, por lo que como pude tomé a Teddy del brazo y ambos nos arrastramos hasta que Bill y Fleur Weasley nos encontraron respirando entrecortadamente tratando de controlar los temblores provocados por la risa. Ambos sonrieron ampliamente al reconocer a mi acompañante y, esperando a que nos calmáramos, se acercaron lentamente y abrazaron tiernamente a Teddy, el cual los abrazó como si fueran sus padres; aunque Teddy hacía lo mismo con todos los adultos de mi familia.
-Hola Teddy, es bueno verte por aquí-
-Lo mismo digo tío Bill, tía Fleur, realmente no esperaba encontrarlos en este lugar-
Yo miraba fijamente la reunión familiar, centrándome especialmente en la reacción de Victoire cuando unas suaves manos envolvieron mis ojos y la voz de mi primo favorito sonó en mis oídos, sacándome una dulce sonrisa de reconocimiento.
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Toujours Pur ~ Dominique
FanfictionLa historia de Dominique Weasley, la segunda de las hijas de Bill y Fleur Weasley, y sus andadas en el colegio Hogwarts de Magia y Hechicería