𝐎𝐧𝐞-𝐒𝐡𝐨𝐭𝐬||𝐁𝐥𝐮𝐞 𝐋𝐨𝐜𝐤 𝐏𝐫𝐨𝐲𝐞𝐜𝐭

𔘓𓂃𝗨𝗯𝗲𝗿𝘀⚽𓍯

Escenario que se me ocurrió por los capitulos mas recientes del manga.

Advertencia : Spoilers ❗

-¡Felicidades por sus millones!- entraste de golpe en el comedor de los chicos con una gran sonrisa y bolsas en tus manos.

Te miraron después de que el leve susto se había ido de sus cuerpos, agradecian que traían consigo los traductores que se les habían ofrecido.

-Oh, ¿A que se debe su entrada tan glam?

-¡Traje unos cupcake! - coreaste con diversión.

- ____ -san, ¿Como entró con eso?- Nikko apunto a la caja donde traías los postres.

-Oh. Anri es un ángel caído del cielo. Si Ego se hubiera enterado me hubiera dado el sermón de mi vida.- contestaste con una sonrisa.- Adelante, coman.

-Es increíble que tenga 25 años y se comporta como una adolescente. - Oliver añadió.

-¡Ey!- un sonido de ofensa salio de ti.- ¡Hablas como si no fueras mayor de edad!

Los demás veían con gracia la escena montada, convivían contigo desde que Snuffy se presentó a Blue Luck Proyect, así que como jugadora de la línea femenina de los Ubbers y entrenadora de tu equipo, tu aceptaste en venir sin reproche, no solo tú, al parecer había otras cuatro jugadoras de ligas diferentes. Pero ese era otro tema.
Solo querías ver quien de estos jugadores prometedores será el que escogerá Snuffy.

Y al parecer así fue, Snuffy puso sus ojos en Barou Shoei, un joven que para tus ojos era alguien de mucho talento y esfuerzo.

-¿No arruinaría nuestra dieta?- Barou preguntó. Ah, siempre cuidándose.

-Barou. Siempre comen casi lo mismo, no te hará daño meter más calorías a tu dieta.- lo trataste de convencer. Cosa que funcionó.

Te sentaste con ellos a platicar, era divertidas las anécdotas que ellos te contaban. Les habías agarrado cariño.

- A propósito. ¿Cuál fue la razón por la que usted juega fútbol?- Sendou te cuestionó. Inmediatamente las miradas de los chicos fueron hacia ti, también querían saber cual fue tu razón y propósito.

-Oh. Bueno, el dinero. - tu voz se oía sincera.

Las expresiones de los chicos eran de pura decepción, al poco tiempo que llevabas conviviendo con ellos sabian que eras alguien muy interesada que no le importaba hacer algo con tan solo ganar dinero, alguien que conseguía lo que quería. Obviamente, con limites. Pero, dentro de ellos (muy profundo) pensaban que eras alguien que le apasionaba el fútbol.

- Sabía que diría algo como eso.- el dueño de ojos bicolores habló con una sonrisa, algo desilusionada.

Soltaste una pequeña risa.
- Snuffy me encontró. - empezaste a contar bajo las miradas atentas de unos jugadores.- Estaba en situación de calle, sin dinero.