La mañana que Minho subió al tren con destino a su trabajo pensó que no estaba teniendo la menor de sus mañanas, pero conocer a Han Jinsung solo le demostró que no podía tener un mejor día.
🚃 Lee Know x Han [Minsung]
🚃 Historia corta [6 capítulo...
Volverán del amor en tus oídos las palabras ardientes a sonar; tu corazón de su profundo sueño tal vez despertará.
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La mañana siguiente estaba Jinsung en el tren como todas las mañanas de lunes a viernes, era el último día de la semana laborable y él solo ansiaba que MinHo llegara para observarle.
El coreano llegó apresurado, por poco y perdía el vagón, se detuvo frente a él, ese día el vagón iba atestado de personas y por llegar tarde no encontró un sitio donde sentarse, al contrario de Jinsung.
El joven se puso de pie, dejando a un lado su asiento que de inmediato fue tomado por alguien más, pero a eso a él no le importaba porque ahora estaba frente a MinHo, tan cerca él uno del otro.
—Hola. —Murmuró MinHo.
—Hola. —Susurró de vuelta Jinsung, agarrando con fuerza el fierro que le mantenía con equilibrio, en ese momento no sabía que le haría perder el balance más rápido, si los movimientos del tren o la intensa mirada del coreano.
El resto del viaje pasó en silencio, solo se observaban con un claro deseo e interés. Exploraron sus cuerpos, se besaron, se contaron sus más profundos miedos, deseos y sueños, todo con la mirada.
Llegaron a una nueva estación y un par más entraron, provocando que se apretaran más y él terminara con el pecho pegado al de MinHo, sentía tantas ganas de besarlo pero no se atrevía, no se sentía merecedor de probar sus labios.
—He notado que me sigues a veces. —Soltó MinHo. — ¿Haces eso por qué te gusto?
Jinsung no sabía donde esconderse de la vergüenza, se sintió tan pequeño e indefenso.
MinHo sacó un papel de su bolsillo y lo metió en los bolsillos de Jinsung. —Esta vez no se me olvida, escríbeme.
Salió del tren y una vez más se quedó como un idiota en medio del vagón.
Rebuscó el papel en sus bolsillos y lo leyó. Era su número telefónico.
Levantó la mirada a la puerta del tren, y apretó el papel con fuerzas sintiendo como volvía a ponerse en movimiento.
