Bucle.
Es un bucle, no hay mejor palabra:
Un momento estás roto, al 100, no hay nada, sientes que ya da lo mismo, a quién le podría importar, muy rápido, importas, de algún agujero de ratas sale alguien dispuesto a ayudarte, a ser tu soporte, aunque sean 10 minutos al día, te llena y te devuelve la sonrisa, lo agradeces.
Lamentablemente el hombre es una máquina casi perfecta, casi. Esa persona también siente, tiene problemas, inseguridades, toda esa masa aterradora de pensamientos, también la tiene.
Y aquí está el dilema, ¿Qué hacer?¿Qué decir?, eres bueno escuchando, no más.
Esto de desarmarse uno mismo para reconstruir a alguien más, es... pesado.
Pesado, porque es necesario, pero molesto; no eres mala persona, pero viene el dicho ese, "hoy por ti...", entonces ¿Qué más? hay elección, puedes vivir sin ayuda, aunque nunca está de más, si quien te ha sacado de una grande se está hundiendo frente a ti, ¿Qué hacer?.
No lo sé, repitamos este bucle, solo para ver cómo va.
