Capitulo 2

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-Sesshomaru-Susurro Aome al ver que el yokai había aparecido de la nada, el demonio por otro lado la observaba con su típica expresión fría, aunque por dentro se moría de ganas por acercarse a la sacerdotisa, esa maldita necesidad de verla todos los días por las noches cuando él podía era un privilegio, no había duda aquella sacerdotisa se le hacia muy atractiva, aunque nunca lo admitiría abiertamente, se dispuso a irse, pero fue detenido por la mano de Aome- Me podrías ayudar a encontrarme con el grupo es que me perdí y no sé qué camino tomar-Sesshomaru respondió con su típico "hmp" y Aome se disponía a seguirlo pero el yokai, la tomo por la cintura para después volar con ella en sus brazos hacia donde estaban sus amigos, después de eso decidió esconderse porque su medio hermano estaba cerca y no quería que lo detectara, Aome se metió en su saco de dormir y acurruco a Shippo a su lado para que los dos durmieran mejor después de eso llego Inuyasha al campamento, ellos seguían durmiendo por lo que el hibrido al no notar nada sospechoso en el aire decidió acostarse

Al día siguiente con el grupo de Inuyasha

Todos estaban alistando sus cosas para irse, pero Inuyasha se dio cuenta de algo muy extraño el olor de Aome estaba algo cambiado por lo que olfateo un poco más dándose cuenta que era en olor de su medio hermano, por lo que cuando Aome se distancio del grupo Inuyasha comenzó a seguirla quería una buena explicación respecto a su aroma

- ¿Dónde estuviste anoche? -Interrogo estaba muy enfadado

-Fui a caminar un poco y me perdí-Contesto ella no se encontraba con ganas de dar explicaciones, es mas no tenía por qué hacerlo, el hibrido se acercó tomándola de las muñecas y clavando sus uñas en ellas, la sacerdotisa al darse cuenta de esto se asusto

- ¿Por qué mientes? - Interrogo el hibrido enterrando con más fuerza las uñas en las muñecas de la chica- ¡Se perfectamente que estuviste con el imbécil de Sesshomaru!

- ¡Suéltame, Inuyasha me lastimas! - Contesto ella quería correr, huir de ese lugar sería lo más sensato, al ver que Inuyasha no la soltaba en un intento desesperado de zafarse de su agarre dijo el conjuro y salió corriendo en dirección al bosque, donde se encontró cerca de un rio, y comenzó a llorar se sentía débil, traicionada, nunca pensó que Inuyasha fuera capaz de hacerle daño, pero lo había hecho y ya no había vuelta a atrás así que cogió su mochila, se desinfecto las heridas que el hibrido le había ocasionado para después vendárselas, luego de eso decidió que era hora de irse a su época pues ahí ya no era requerida allí, pero interiormente no se quería ir por lo que iría en busca de una bruja-amiga llamada Huan, entrenaría con ella y se volvería más fuerte, para no depender de nadie, solo de ella misma

En la tarde con el grupo de Inuyasha

Todos se encontraban preocupados buscando a Aome ya que dentro de muy poco iba a ser de noche, y no querían que ella estuviera sola en el bosque, por otro lado, Inuyasha estaba tranquilo no se veía preocupado, pero si estaba enfadado ese detector de fragmento lo estaba comenzando a sacar de quicio, pues tenían que volver a la búsqueda de los fragmentos cuanto antes, pero sin Aome sería difícil reunir volver a esa búsqueda

- ¡Que se hizo esa estúpida de Aome! -El hibrido estaba furioso, pues no la encontraban por ningún lado, como si se la hubiera tragado la tierra, Inuyasha no sentía su olor por ningún lado, lo que lo frustraba mas

- ¡Clámate Inuyasha! - Espeto la exterminadora, pues ella conocía el carácter violento de Inuyasha-Lo más importante es que ella este bien

En la noche

Con Aome

Decidí acampar cerca de un lago para comer pescado, quizás me lleve mucho tiempo buscar a Huan, pero tengo que hacer un esfuerzo estoy segura que ella aparecerá apenas este cerca de su escondite, tengo que tener en cuenta que como estoy sola, me encuentro expuesta a que los demonios u ogros me ataquen, ya sea por mis poderes de sacerdotisa o por ser humana tengo que estar alerta; afortunadamente en el bolsillo de mi uniforme guardaba una manilla que me dio ella, solo espero que no se les ocurra atacar esta noche, decido colocar un campo de energía a mi alrededor para estar tranquila y segura, luego de eso me duermo pues mañana será otro día

Con el grupo de Sesshomaru

Nuestro querido yokai se sentía inquieto a causa de la conversación que había tenido la noche pasada con la sacerdotisa, no dejaba de pensar en ella y Yako su bestia interna no hacia mas que recordarle lo mucho que la deseaba con ellos a su lado, ese idiota de Inuyasha no hacía más que lastimarla, ¿Por qué seguía con él? Él ya había elegido a la sacerdotisa muerta, ella que hacia hay seguía lastimándose, y él no podía hacer nada más que observar eso, no se podía meter, no mientras ella estuviera con su medio hermano, en la noche decidió irse, tenia deseos de verla, por lo que dejo a Rin a cargo de Jaken y Ah-Un su dragón de dos cabezas, al ver que la miko no estaba con su medio hermano se alteró, pues era consciente de los peligros que ella corría en el bosque, así que se dispuso a buscarla por cielo y tierra durante toda la noche, no estaba tranquilo y Yako tampoco lo estaba, su bestia interior estaba demasiado agitada y no era para menos, ella era fuerte pero era humana, así que era débil y frágil como un cristal, decidió calmarse ella no debía estar muy lejos

-Miko ¿Dónde estás? -Se preguntó para sí mismo, en eso encontró su extraño pañuelo color rojo, estaba cerca, decidió guardarlo y apresurarse a buscarla antes de que se encontrara con algún demonio u ogro y fuera demasiado tarde

Te Necesito Miko (Inuyasha)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora