Lucierganas[Finalizada][Corregida]

- Navegante -

Ace sabía la perfección que había nacido para ser un navegante, era algo innato en su forma de ser, no un talento vacío que desperdiciaría por el rostro de su vida, un talento que amaba y practicaba diariamente cada día de su vida.

Cuando obtuvo su fruta del diablo fue realmente difícil, porque, ¿Qué clase de navegante no podía nadar?, Pero gracias a Luffy y Sabo esa estúpida idea se derribo de su cabeza y se convirtió en uno de los mejores navegantes del nuevo mundo.

Los grandes piratas lo cotizaban, la Marina lo quería, los emperadores lo querían.

Ace no era estupido, había recibido más de una vez la oferta de Shanks e Bug mom, lo que no se esperaba era que los piratas de barba blanca también lo querían.

- ¿Por qué ellos quieren algo de mí? - Ace era realmente desconfiado, después de todo a lo largo de la historia los piratas de barba Blanca han sido conocidos por haber sido los contrincantes número uno de El rey de los piratas.

Tal vez solo quería en su cabeza, como una especie de trofeo o algo por el estilo...

- ¿Tal vez porque eres el mejor navegante del nuevo mundo? - Le habló con ironía uno de sus informantes.

- o tal vez creen que pueden entregarme a la Marina y conseguir alguna especie de trato - Su informante suspiró, Ace era uno de los chicos más desconfiados que había conocido en toda su vida.

- ¿No vas a aceptar la oferta de uno de los emperadores del mar?¿El hombre más fuerte de todo el mundo? - Ace negó.

- no me interesa ni la oferta ni el concepto de familia que tienen en su banda pirata - Ace ya tenía una familia, era pequeña, pero era calidad y lo amaba.

- bien entonces no tengo nada más que decir, te llamaré la próxima vez que tenga información para ti - Ace asintió mientras veía su informante alejarse, no era como si él mismo no pudiera obtener información, simplemente estaba muy ocupado con diferentes trabajos como mercenario, prefería que alguien acumulara la información y se la contara, era mucho más sencillo que comenzar a leer los periódicos y quedarse dormido a mitad de camino.

- ¿Así que los piratas de barba Blanca quieren algo de mí?, Tal vez tenga que ocultar mi pista por algún tiempo - Ace miraba con cariño al mar, esperaba poder navegar tranquilamente por un tiempo.

La noche cayó lentamente en la isla, Ace apreciaba el hermoso cielo mientras caminaba por la playa, respirar profundamente el olor del mal en realidad lo hacía sentirse bastante bien.

- ¿¡Por qué nos estás haciendo esto!?¡Se supone que somos familia!¡Se supone que somos hermanos! - Ace se paralizó en su lugar al escuchar esas palabras, era de noche y no podrían verlo, pero a ver si podía ver la espalda de un hombre gordo y corpulento, lo que parece hacer la silueta de un hombre en el piso agarrándose el estómago.

- ¿Hermano?¿Qué culpa tengo yo de que ustedes me consideraran un hermano?¡Solo fueron una herramienta para llegar a mi verdadero objetivo! - Ace no salí a meterse en problemas, ¡Pero ese hombre era un reverendo idiota!¡Iba a darle una paliza!

Se lanzó sin contemplaciones, derribo a este hombre, vio algo rodando en el piso pero no tenía ni idea de qué era, no en la oscuridad de la noche, sus propias llamas lo cegaban así que en realidad no podía haber mucho.

- ¿¡Quién mierda eres tú!? - Ace bufó, ni siquiera le iba a responder solo lo iba a matar.

Rápidamente su puño se llenó de fuego, el hombre parecía dispuesto a levantarse para apuñalarlo, así que antes de que él actuara, atravesó su corazón con un puño de fuego.

No tenía nada de lo que arrepentirse, después de todo era navegante y mercenario, en los mares era morir o matar.

Se iba a dar la vuelta para mirar al hombre que había salvado, pero se mantenía acurrucado en la arena, la nena tenía un color raro...¡Sangre!

- ¡Oye no te atrevas a morir ahorita después de que te salve el culo! - Ace se agachó, tenía que parar la hemorragia de alguna manera, yo lo que parecía ser una fruta del diablo, ¿Por eso se había generado toda esta lucha?, La guardó en su bolsa y se volvió a dirigir al hombre.

- ¿Oye estás consciente?¿Me escuchas? - el hombre con un extraño peinado simplemente lo miraba y se quejaba del dolor - hombre lo siento esto Te va a doler un poco mucho - Ace calentó su mano en fuego y la puso sobre la herida, el pecoso pudo ver cómo se detenía el sangrado, pero esa marca iba a doler por un buen tiempo.

- Uggghh - el hombre se quejó tratando de quitarse a  Ace de  encima, cuando por fin el pecoso acabó con su sangrado se calmó.

- lo siento, no tenía mucho más a la mano - Ace tomó al hombre desmayado en su espalda, ¿Tendría algún lugar al que ir?, Por el momento lo llevaría la posada donde se estaba quedando, no podía dejar morir a este hombre, simplemente se sentía mal hacerlo.

Llegó a su posada y dejó al hombre reposando en la litera de abajo, él simplemente dormiría en la cama de arriba, cansado se sentó en su escritorio, iba a terminar un mapa que tenía pendiente, así vigilaría que al hombre no le diera fiebre, no le interesaba mucho dormir con la noche porque es una colección no le permitía tener un buen horario de sueño.

- ¡Supongo que eres un hombre con suerte!  - Ace se sentó en su escritorio y comenzó a dibujar, así algunos cálculos, el hombre tuvo fiebre por la noche pero Ace se la fue bajando lentamente con un trapo de agua fría.

Ace usualmente no haría esto por cualquiera, pero era como si tuvieran alguna especie de conexión, su marca de hogar ardía, lo hacía sentir como un pez fuera del agua, de cualquier manera...¡Solo tenía que ayudar a ese tipo y después lo dejaría irse en paz!