■ A N I M A L ■ Afterdeath Oneshot

■ Cigarrillos.■

Las frías, alocadas e insensibles noches en una ciudad con la fama de ser la cuna de las estrellas, las fiestas junto con el licor, las drogas y las malas decisiones, atrayentes de gente joven que busca distraerse y romper un poco las reglas. Tal era el caso de Reaper, todo un casanova por su zona.

Siempre frecuentaba los mismos clubes a las horas que de le daba la gana, con sus cigarrillos, sus usuales chaquetas de cuero con una distintiva capucha que lo cubrían siempre, venía en su motocicleta negra determinado a hacer alguna locura por las noches. Besarse con alguna chica desconocida con la cual no habría absolutamente nada después, era alguien que llenaba de falsas esperanzas a todo con el que tenía contacto, si es que buscaba algo platónico, o incluso algo rápido.

Más sin embargo parecía haber sido víctima de su propio juego cuando encontró a otro esqueleto que no se dejó caer por sus encantos baratos de película, se llamaba Geno, pero su nombre era un misterio para Reaper. Lo cual era extraño para el encapuchado, parecía alguien desesperado por amor de alguien más para reemplazar el propio que ya había muerto en la coraza seca de su alma fragmentada.

---¿Para qué sigues viniendo a verme? Según tengo entendido tú eras el que buscaba pescarme de alguna forma tonta.--- El menor tenía un cigarrillo en su mano y miraba por el balcón del cuarto de club en el que estaban juntos, días y todavía no se habían ni siquiera besado.

--- Lo voy a conseguir, es claro que necesitas compañía, algo de amor temporal por lo menos, no soy una niñera.--- Dice Reaper fumando su propio cigarrillo de igual forma.

--- Eres algo chistoso, amigo. Acordamos el primer día que nos vimos que sólo íbamos a vernos casualmente una vez, no íbamos a decir nuestros nombres o algo para identificarnos, pero de repente me hablas de compañía...¿eso no es ser una niñera?--- El de parche sonríe burlón al más alto, a lo que este sólo responde con una expresión amarga y expulsa el humo de su cigarrillo de mala gana.

--- Le quitas lo divertido, me gustan los difíciles así como tú. No te sientas especial, sólo espera...--- De vuelta a su nube intocable donde es el más hermoso y codiciado de la nación, Geno no puede evitar reírse e ir adentro dejándolo plantado.

El mayor apaga rápidamente su cigarrillo y lo sigue con sus expresiones corporales de siempre, vago pero encantador, mientras el de parche busca algo nuevo para ponerse antes de que las personas del lugar piensen que se van a quedar por más tiempo para tener algo más íntimo todavía.

Lo cierto es que al menor le atraía físicamente el encapuchado de alguna forma como es usual, más sin embargo también era alguien orgulloso y ciertamente egoísta, justo como él, y lo quería obligar a obsesionarse con su persona fingiendo desinterés, estaba de humor para jugar un rato antes de que pudieran besarse, toquetearse e ir más lejos incluso.

--- Sigo sin entender cómo es que te dejan guardar tu ropa aquí por tanto tiempo.---

--- Eso, mi sombrío compañero, es porque..."le caigo bien" a los dueños del lugar.--- Usa sus manos para hacer las comillas, risueño como siempre, generarle un sentimiento parecido a los celos al encapuchado se le hacía divertido de cierta forma.

--- Imposible...ellos- ¿qué les ves a ellos que a mí no?---

--- Hey, hey...ya sé que estás muuuuy desesperado por que te de algo de atención y todo eso, pero...--- Geno saca el cigarrillo de su boca y lo pone en la del mayor, soltando el humo en su rostro.--- Dijiste que te gustaban los retos, ¿o no, niño bonito? Sigue jugando o ríndete si quieres, tienes más clientes que llenar.---

Reaper encuentra su rostro tibio con el ceño fruncido, y con el cigarrillo en su boca todavía, se quedó como tonto, inmóvil. El menor nota esto y su rostro toma una pequeña sonrisa de victoria a escondidas del encapuchado, y como premio para sí mismo, se daría una corta ducha en el cuarto, sólo le gusta molestarlo.