Audición

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Era una hermosa mañana para la castaña, estaba peinando su cabello, colocando brillo en sus labios y retocando un poco su maquillaje sutil para ir camino a la preparatoria. Mimi solía ser una de las chicas populares de la escuela, por su belleza, su voz y su manera tan fácil de obtener lo que quiere siempre.

Unas de sus fascinaciones era escuchar música pop, lo cual llevaba unos auriculares escuchando su música favorita, caminando por las calles de camino a la preparatoria, la cual veía muchos estudiantes que la miraban con mucha atención por su hermoso brillo, pero no todo sería perfecto y ella lo tenía claro, ya que en la preparatoria estaba él.

Ese chico que a pesar de que eran "Amigos" desde la primaria, siempre sacaba lo peor de ella y arruinaba sus días que podrían ser felices. Yamato Ishida, rubio, alto, con una voz maravillosa y muy popular entre las chicas. Él era todo lo contrario a Mimi, tenía una banda de rock, amaba ese estilo de música, solía ser un chico serio y aquello provocaba atracción por las chicas, ya que se consideraba de cierta forma, el "Chico malo" de la preparatoria.

En aquel pasillo camino a sus salones estaban ambos, ella escuchando música, distraía por la vida y él, tomando su café en mano, andando normal como siempre. Hasta que un chico que estaba corriendo, se cruza en frente de Mimi, provocando que ella lo esquivara y perdiera el equilibrio, empujando sin querer a Yamato, provocando que derramara su café encima.

- ¡Esta niña mimada otra vez! -Bufó Yamato mirando a Mimi seriamente.-

- ¡Ten cuidado con lo que dices, idiota! -Dijo una enojada Mimi.- Bueno al parecer el café provocó algo de color en tu vida, rockero depresivo.

- Espero el dinero de la tintorería. -Dijo Yamato posando su dedo en la frente de Mimi, presionado sobre su piel.-

- Ni en tus sueños, adiós.

Mimi se volteó para caminar a dirección a su salón de clases, pero se vio interrumpida cuando Yamato tomó de su mano e hizo que se volteara.

- Hablo enserio, debes solucionar lo de mi camisa, puedes lavarla y ahorrarte la tintorería.

- Eres un idiota sin cerebro, te dije que no haré nada por el estilo y con permiso, iré a mi clase, se hace tarde.

- Te dejaré la camisa al final de la clase. -Dijo sin más Yamato quién se volteaba y se iba camino a su clase.-

- ¡Lo odio! -Bufó Mimi, para así seguir caminando y tratando de olvidar ese mal rato.-

Mimi no demoró mucho llegar a su salón, acomodándose en su puesto que era a lado de su mejor amigo Koushiro, quién la veía bastante enojada y sabía exactamente la respuesta, ya que todos los días discutía con Yamato.

- ¿Fue Yamato-san de nuevo?

- Desgraciadamente, un tipo me pasó a empujar y Yamato-san se manchó su camisa con el café. -Suspiró para así sacar su cuaderno.-

- Tranquila, hoy en la fiesta podrás descargar esa rabia, recuerda que debes cantar como nunca. -Dijo Koushiro intentando animar a Mimi, quién no demoró mucho en sonreír.-

- ¿Irás a la fiesta? Por favor, necesito que vayas. -Mimi no demoró en fijar su vista en Koushiro para tratar de convencerlo, ya que él no solía frecuentar las fiestas.-

- Sí, no me voy a perder el show que tendrás hoy.

- ¡Muchas gracias, Koushiro-kun! -Dijo una animada Mimi quién abrazaba a Koushiro de la emoción.-

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⏰ Última actualización: Jun 07, 2023 ⏰

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LA OBRA (MIMATO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora