Desde siempre ha existido un lugar mágico en el cual nada es bello, en el que todo es gris y sin color, un lugar en el que nada brilla, todo es horror, por que si algo es cierto es que sí hay magia pero no todo lo mágico es hermoso. Este lugar es el cementerio de los sueños, casi nadie sabe de él. Creo que las personas están mejore sin conocerlo, pero si tienes el coraje de querer aprender más de él, te lo contaré con gusto, pero debes prometer que nadie se entererara de lo que te contaré.
Desde el inicio de los tiempos existieron sueños, todo mundo los tenía, pero despues de soñarlos se perdían en el aire, nadie los recordaba y por lo tanto preferian irse al cementerio de los sueños, un lugar abierto ante todo mundo; un lugar donde aquellos sueños que habían cumplido su labor podían ir a descansar eternamente.
No se pierde ocasión en que las personas cuentan sueños que han tenido. Cuando esto pasa los sueños se van a la memoria de la persona a la cual le han hablado de ellos y esa noche esa persona sueña con ellos, esto se repite cada vez que alguien comparte su sueño.
Los sueños se transmiten de persona en persona, por ello el cementerio de sueños casi siempre estaba vacío.
Con el paso del tiempo las personas dejaron de compartir sus hazañas nocturnas con aquellas personas en las que confiaban, por ello los sueños morían después de la primera vez de ser soñados, eso provocó que el cementerio de los sueños se volviera más grande, gris y amargo. Hubo un sueño que molesto con los humanos decidió hacer algo para cambiarlo todo. Este sueño decidió volver a la mente de un humano y transformarse en algo que jamas olvidarían, de este modo nació la primera pesadilla.
Cuando aquel humano desperto, se aterró de lo que había soñado e imagino que si se lo contaba a cualquier persona se libraría de aquella horrible pesadilla. Obviamente así sucedió, un humano se libró de su pesadilla pero otro se quedo con ella.
Muchos sueños mas se unieron a éste, convirtiendose en pesadillas, solo para no ser olvidados.
Esto sigue ocurriendo todavia, me temo; sin embargo, aún hay personas que cuentan aquellos lindos sueños que tuvieron su noche pasada y después de ello su día sigue feliz.
El cementerio de los sueños sigue creciendo, pero casi ninguna pesadilla llega a él pues, por mas triste que sea, las personas prefieren contar lo negativo antes de recordar lo positivo
Autora: Jessica Orea
