𝐛𝐚𝐣𝐨 𝐥𝐚𝐬 𝐞𝐬𝐭𝐫𝐞𝐥𝐥𝐚𝐬

𝟓

𝘯𝘢𝘳𝘳𝘢 𝘉𝘪𝘢𝘯𝘤𝘢

Empezamos a caminar todos juntos, con bastante miedo pero riendonos.
A los pocos minutos vimos algo a lo lejos, dándonos a entender que tuviésemos cuidado ya que nos iban a asustar.

Yo iba al lado de mis amigas y Hugo estaba bastante cerca, lo cual me tranquilizaba bastante.

El primer susto no fue para tanto, pero conforme íbamos pasando, más miedo daba.

Hubo un momento donde nos rodearon un montón de monitores disfrazados de zombies asustandonos mucho.

Hugo se puso a mi lado mientras todos estaban gritando, y al verme asustada y gritando muy agobiada, se preocupó.
Me estuvo mirando sin saber qué hacer un rato, hasta que al final me abrazó.

Cuándo noté que me estaba abrazando todo mi cuerpo se quedó paralizado, no me lo esperaba, pero era algo que jamás había sentido.

En ese abrazo noté una conexión que jamás había notado con nadie.
Me hizo relajarme y ya no estar asustada, a su lado me sentía tan segura que ya no me daba miedo.

Todos nos miraron y empezaron a reír, dándose cuenta de nuestro abrazo.

Yo no quería que eso acabase jamás, pero tuvo que hacerlo ya que nos habían dicho que teníamos que seguir andando.

𝘕𝘢𝘳𝘳𝘢 𝘏𝘶𝘨𝘰

Noté que estaba muy asustada y agobiada, y me ponía triste verla así por alguna razón, así que lo único que se me ocurrió hacer era abrazarla.

Era algo que llevaba desde que llegamos queriendo hacer, ya que un abrazo suyo debía ser mejor que 30 terapias.
Y no me equivocaba.

Al darle el abrazo pasamos así unos minutos y yo era incapaz de separarme, la necesitaba.

Por alguna razón, la necesitaba.
Yo nunca había necesitado a nadie, ¿por qué ahora sí?
Hugo Díaz nunca había necesitado a nadie para estar bien.

Estuve a su lado hasta que acabó la actividad, no hablamos, pero con nuestras miradas lo decíamos todo.

Nada más acabar, nos fuimos a nuestras habitaciones, yo me fui con mis amigos y ella con las suyas, pero Javier se fue con Bianca y se puso a hablar con ella.

Me sentía celoso, no quería que ella estuviese con más chicos, aunque no entiendo por qué si no somos nada.

𝘕𝘢𝘳𝘳𝘢 𝘉𝘪𝘢𝘯𝘤𝘢

Estaba hablando con mis amigas hasta que vi que Javier quería hablar conmigo.

Me fui con él un poco alejados del resto y me habló sobre Hugo.

𝐉𝐚𝐯𝐢𝐞𝐫: te gusta Hugo, se nota, y el abrazo que os habéis dado lo ha confirmado.
Te voy a decir algo sobre él: es un mujeriego. Ha tenido más novias que cualquier otra cosa y está acostumbrado a tener cada día a una mujer distinta en su habitación, y solo es algo sexual, nada más nunca, y una vez que terminan ya no se hablan nunca más.

Me quedé sorprendida y triste al escuchar esto.
¿Hugo solo me habla porque quiere sexo conmigo y ya?

𝐁𝐢𝐚𝐧𝐜𝐚: ¿Y por qué me dices esto ahora?
𝐉𝐚𝐯𝐢: Cuando te ha dado el abrazo, se ha notado cierta conexión entre vosotros, algo que a Hugo no le pasa nunca.
Quiero decir, nunca lo había visto así, habla mucho de ti y se ve que está enamorado de ti. Él no lo quiere admitir porque piensa que enamorarse solo es de adultos y que él jamás se enamoraría de ninguna chica.
𝐁𝐢𝐚𝐧𝐜𝐚: ¿entonces piensas que le gusto de verdad?
𝐉𝐚𝐯𝐢𝐞𝐫: creo que sí, pero no te podría confirmar nada.
Lo único que te quiero decir es que tengas cuidado con él. Es buen chico, pero tiene el mal hábito de tener cada día a una tia nueva en su cama. Pero tú por eso no te preocupes, creo que le gustas de verdad
𝐁𝐢𝐚𝐧𝐜𝐚: bueno javi, muchas gracias por contarmelo.

Y me fui a mi habitación.

Esa noche apenas dormí pensando en lo que me había dicho Javier, ¿le gustaría de verdad a Hugo o todo es una excusa para liarse y acostarse conmigo?

A la mañana siguiente me desperté con mucho sueño y sin ganas de nada, pero debía cambiarme para ir a desayunar y comenzar el día.

Me puse una sudadera negra junto a unos pantalones de chándal grises, hoy no me apetecía arreglarme, así que decidí ir cómoda.
Tampoco me puse maquillaje, ni siquiera rímel, hacía mucho que salía a la calle completamente al natural.

Fuimos a desayunar, y al acabar fuimos a una clase.

Mientras desayunábamos no vi a Hugo por ninguna parte. Lo busqué como loca pero no lo encontré, aunque lo iba a ver en un rato gracias a las clases, por lo que no me puse triste.

La clase que tocaba ahora era de matemáticas, con un monitor que se llamaba Billy.

Me senté delante de mis amigas y dejé un hueco a mi lado, y Hugo nada más verlo se sentó allí.

Ver que se había puesto a mi lado me puso muy feliz, ya que aunque había más sitios libres se puso conmigo y eso era porque le caía bien al menos.

𝐇𝐮𝐠𝐨: hola

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alóoo presidentessss
cmo estáis??
espero q os guste este cap tanto cmo a mí.
Es un pco corto, pro el siguiente será más largo
Adeuu 🫂