Nota 7

353 39 0
                                    

Para nada querible P.J.

"Me gustan las chicas que me dan helado...El lado de atrás".

Vamos, ¿tan difícil es darme una explicación? Se que la ultima nota te la llevaste tú.

Puedo acusarte con el director en cualquier momento, será mejor que te detengas.

Minatozaki Sana.

Jihyo río luego de terminar de leer.

"Es tierna hasta cuando está desesperada"

Dobló el papel y lo metió en su bolsillo para luego salir del baño.
La escuela estaba completamente vacía y eso la hacia ver mucho más espaciosa.

De hecho, ella estaba saliendo un rato bastante tarde de la institución.
Cuando ella estaba saliendo, al horario que debía, cruzó por el casillero de una pequeña personita que casualmente tenia una nota. Pero, teniendo en cuenta que la ultima vez había alguien custodiando el objeto, Jihyo revisó casi toda la escuela ya vacía antes de tomar la nota y esconderse en el baño para máxima precaución, no iba a dejar que su travesura terminará tan rápido.

Al salir de la construcción y sentir el sol chocando contra su rostro sonrió disfrutando del clima.
El invierno mezclado con un cálido sol era algo que la ponía de muy buen humor, y sobre todo la inspiraba para escribir aquellas notas.

Su celular interrumpió su paz interior con la molesta vibracion de una llamada y al mirar de quien se trataba claramente era su amiga Nayeon.

-Qué quieres, idiota? . -contesto.

~Ow, quiero que sepas que yo también te aprecio mucho.

-Interrumpiste mi sensación preferida.

~Oh, ¿Estás en el baño? Lo siento, llamaré en otro momento.

-Claro que no, la sensación de libertad, acabo de salir de la escuela.

~¿Y tú que hacías allí tan tarde? Cuando salí no te vi y pensé que ya te habías largado.

-Es que había otra nota de Sanake, como le dices tú, y me quede a vigilar que no hubiese nadie para tomarla.

~Sigo sin comprender porque haces esto pero que más da, ¿Puedes venir a casa ahora?

-Claro ahor...¿Esa es la enana? Oh dios, esto se pondrá bueno, adiós Nayeon.

~Espera no me cuelgu...

Jihyo sonreía con una idea en su mente luego de ver a unos cuantos metros a su víctima sentada con sus amigas disfrutando de un trozo de pastel detrás de un gran vidrio dentro de una cafetería.

NOTAS INDECENTES | SAHYODonde viven las historias. Descúbrelo ahora