Capítulo 1

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De: yosoy8a02@empremexa.com

Para: leomessi07@empremexa.com

Motivo: Queja.

Buenos días, querido hijo de perra.

Dice mi madre que los modales lo son todo y considero que hasta este momento he sido una buena persona en todo el tiempo que llevo trabajando en esta empresa. Como sea, mi nombre, tal como lo dice mi correo electrónico es Guillermo Ochoa y llevo en esta empresa poco más de 6 años. Toda una vida si me lo permites decirlo, pero eso son detalles de por medio en el asunto que nos trae hasta aquí.

Mi día siempre comienza a las 4:30 a.m. porque vivo a casi 2 horas de la oficina, entonces el traslado no es lo mejor del mundo. Los primeros años en esta empresa fueron una gran sacudida a mi vida y créeme cuando te digo que no es nada divertido viajar en el trasporte publico de este maravilloso país. A veces uno tiene que viajar parado desde el inicio de su trayecto lo cual no es nada divertido ¿Alguna vez has sentido el olor del metal en tus manos por estar agarrando el fierro que hay en los micros o camiones? Es una sensación sucia que se queda todo el día hasta que llegas a un baño para darte una buena limpieza de manos.

El metro de la ciudad tampoco es que digamos que es lo mejor del mundo, siempre es una constante pelea desde que pasas tu tarjeta por el acceso o ingresas el boleto del metro por los torniquetes. Ves a gente con mala cara desde temprano, algunas peleas e insultos por parte de los usuarios, ves a cada gente en su mundo y por lo usual hay una regla de oro para esos casos y es que, si la otra persona no se mete a propósito contigo, tú tampoco lo harás. Reglas de supervivencia y de respeto que hay en nuestro país.

Pasé demasiado tiempo en estos transportes públicos mientras seguía en este trabajo hasta que por fin tuve para comprarme mi auto soñado. En estos años no es un lujo, ya es una necesidad. He sido muy feliz con mi nene desde entonces, pongo música de Maluma a todo volumen, manejo con mucho cuidado porque claro. El tener carro no es que te quite problemas, al contrario. Te otorga unos nuevos.

¿Alguna vez has manejado en esta ciudad de locos?

¿Se te ha metido algún pendejo que no sabe usar las direccionales?

¿Has manejado alguna vez en medio de trailers que se creen dueños de la carretera?

México es un país que si lo piensas no es para todos, aquí la gente vive al día. Sales de casa, pero no sabes que cosas puedes ver en tu viaje ni como vas a regresar. No me quejo porque es la realidad de todo esto. Si en este punto sigues leyendo te preguntaras ¿Por qué me dijo hijo de perra? ¿Por qué me cuenta todo esto?

Bueno, resulta que mi nene había estado en el taller mecánico por algunos asuntos que ni yo mismo comprendo entonces durante casi un mes mi lugar en el estacionamiento de esta magnífica empresa estuvo vacío. No tengo tema con que mis amigos agarren ese lugar, algunos de ellos me mandaban mensajes desde temprano para apartarlo porque como sabrás. Los lugares son escasos y en verdad que nos peleamos por el lugar muchas personas.

No eres de este país, he tenido la gran... fortuna de conocer a Rodrigo de Paul y a otros amigos tuyos que vienen desde Argentina. Si me lo permites decir, Rodrigo es otro hijo de perra que cree que la gente está muy por debajo de su nivel. En las miles de juntas que tenemos por lo menos tres veces al mes. Siempre que quiero hablar o alguno de mis amigos lo hace, él, de manera totalmente intencional. Comienza a toser para que la gente lo voltee a ver y luego con una sonrisa estúpida simplemente dice "lo siento, no pude evitarlo".

Tengo una teoría y es que en particular le caigo mal. Se que nuestro jefe una vez le comento que el puesto que tiene era para mí ya que era el mejor candidato para eso. Desde entonces se siente amenazado con mis ideas y mis intervenciones siempre que las puedo hacer. Pero no soy un niño que esta haciendo berrinche, ya somos adultos entonces, me da igual lo que haga. Aunque eso no quiere decir que le ponga fácil la cosa, siempre que puedo. Logro sacarlo de sus casillas.

Entonces ahora mismo de seguro dirás que he escrito mucha cosa y la cosa no esta clara. Me gusta siempre decir lo que tengo en mente (o en este caso, escribirlo, lol).

(No me había dado cuenta de que si pones lol se forma una extraña cara. Cuando vuelva a ver a mi sobrino de 14 años le contarte sobre mi descubrimiento).

La cosa es que, mi carro fue entregado el domingo y estaba perfecto. Todo estuvo en orden. Les envíe mensaje a mis amigos para decirles que de nueva cuenta empezaría a usar mi lugar en el estacionamiento y no tuve problemas con ellos. De hecho ¿Por qué habría en primer lugar algo como eso?

Y bueno, hoy lunes. Como cualquier persona que Viena a trabajar desde temprano y hace un largo recorrido con tráfico, con ventadas de madre, con quejas, con el constante piteo de los carros. Llego a mi lugar, con las ganas para salir y estirar mis piernas y me encuentro a tu amiguito, Rodrigo. Estacionando su auto en mi maldito lugar.

La conversación se dio un poco más así.

—Hola, Rodrigo, disculpa es que ese es mi lugar.

—Guillermo, buenos días. Es que Lionel Messi, del área 7, encargados de los proyectos me dijo que lo podía usar. Que estaba desocupado desde hace tiempo.

—No, lo que pasa es que mi auto estaba en el taller mecánico. Entonces ¿Puedes por favor mover tu auto?

—De acuerdo, pero lo hare después de una junta que tenemos los de esa área. Te juro que no me tardo.

Y el puto se largo con una sonrisa en la cara.

¿Comprendes un poco mi enojo?

Bueno en la mañana me desperté para darme cuenta de que se me había acabado la leche y que no podía comer mi cereal como siempre. Después, mientras me rasuraba, me corte, un poco, pero claro. Esa sensación de irritación siempre estará conmigo en todo este día. Un perro bastardo que de seguro saco la licencia de conducir por debajo del agua se me metió en medio de un cruce lo cual casi hace que choquemos. Y el muy infeliz me grito que aprendiera a conducir.

Mientras acomodaba mis cosas a tres calles de la oficina, porqué hasta allá pude agarrar estacionamiento. Me di cuenta de que olvidé algunas cosas en casa y ahora mismo eso me irrita aún más. Tengo una sensación de tener ahora mismo en mi panza como una fogata, lava que pide a gritos salir para quemar todo.

Entonces, hijo de perra. Quiero que le digas a tu amigo ese que mueva su auto y que tú dejes de ver los lugares de otros empleados en el estacionamiento. Estoy bastante enojado y créeme que ahora mismo me da igual si enseñas este mensaje a los superiores. Que felicidad seria para mí que me liquidaran en este punto de mi vida. No soporto a la gente que anda de metiche y que lo peor de todo, que cree que con sus comentarios no afecta la vida de otros. Lo digo muy enserio, ya te tengo en mi lista negra.

Mientras estaba en el ascensor, sudado desde temprano. Te subiste conmigo en el piso 3. Ibas con esa sonrisa de buenos días para todos los que íbamos subiendo. Por unos segundos me miraste y en verdad creí que me dirías algo. Pero no. Y eso solo me molesto aún más. Así que estoy redactando este mensaje con tanto enojo desde mi escritorio, depurando mi veneno para que lo puedas sentir.

Sin más por el momento, me despido.

Un saludo.

De: leomessi07@empremexa.com

Para: yosoy8a02@empremexa.com

Motivo: Disculpa.

Buenos días, Guillermo.

Estoy en medio de la junta que te comento Rodrigo, he leído todo el mensaje. Cuando terminó su explicación me acerque a él para decirle que moviera su auto. Me miro extrañado, pero enseguida salió de la sala de reunionés.

Te estoy escribiendo esto para que bajes y puedas ocupar tu lugar.

Te pido una disculpa.

Sin más por el momento, me despido.

Un saludo.

Amor al servicio del E-mailDonde viven las historias. Descúbrelo ahora