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Al día siguiente Xiao fue despertado por el sonido de su celular, era Ayanga.

Sus ánimos estaban por el suelo, no quería hablar con nadie y mucho menos ver a alguien.

Quería dormir para así olvidarse de sus problemas. Pero no podría dormir para siempre.

En el transcurso que pasaban los días, no sabia noticias de Wang, este desde aquel día no se había aparecido en la cafetería.

Es por aquello que preocupado decidió preguntar a uno de sus amigos, Zhuo Cheng. El cual le dijo que Wang se había ido a Londres, ¿La razón? No la sabía, simplemente había decidido irse y ya.

Quizá es lo mejor, pensó Xiao.

Con aquella noticia, ahora sí podría dejar el pasado atrás y comenzar algo nuevo junto a Ayanga.

Pero aquella relación parecía más de amigos que de novios al transcurrir el tiempo.

Así llegando al primero de diciembre y con ello la primera nevada en Beijing.

Xiao tenía planeado ir junto a Ayanga, pero este debido al trabajo no pudo acompañarlo; es por eso que decidió ir solo.

No se perdería aquella hermosa vista desde la muralla china.

Estuvo allí durante tres horas exactamente, que a medida que el clima baja la gente iba yéndose.

Es así como se quedaron cinco personas aún admirando la vista.

Una pareja de ancianos, un estudiante, un hombre y él.

Park se sentó en una de las banquetas para cerrar los ojos y sentir aquella brisa fría recorrer su rostro. Pero sus oídos se concentraron en escuchar una voz melodiosa.

Era aquel hombre vestido de negro... El que cantaba viendo las luces de la ciudad.

Era...


Nota rápida: en el capítulo original la canción la cantaba Jungkook, pero como es una adaptación tuve que cambiar esto, imagínense a Yibo cantando la canción.

Ahora si continúen con la lectura....

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Yibo, Wang Yibo se encontraba frente suyo cantando con aquella voz... Que extrañaba tanto.

El antes mencionado después de terminar de cantar se quedó en silencio para cerrar los ojos.

— Sigues cantando bien. — Dijo Xiao poniéndose al lado suyo.

— Sí..— Susurró Wang al verlo detenidamente para luego ver hacía el frente.

— ¿Te incómode? Perdón no fue mi intención. — Se disculpo.

— No, nada de eso. — Dijo sin separar la vista.

— Ya debo irme, adiós. — Le dio una leve sonrisa para ir bajando las gradas de aquel lugar.

Si se va, ya no habrá oportunidad Zhan, dijo su subconsciente.

¿Dejarlo ir... O hacer ejercicio al bajar las gradas junto a él?

— Debo hacer ejercicio. — Dijo feliz para ir detrás de Wang bajando las gradas brincando.

Wang se mantenía serio bajando las gradas, mientras que Zhan no podía dejar de estar feliz.

Ex - Novio Donde viven las historias. Descúbrelo ahora