another universe | miguel o'hara x peter b. parker

6.

           Han pasado los días, Peter siempre ha dejado empanadas junto a su hija. Miguel esta apreciando más esos detalles. Le parecían demasiado lindos, cada las notas las mantenía guardadas, ojalá viviera estos momentos por siempre.

Miguel se encuentra ahora mismo en su cuarteto, exactamente en donde se encontraban sus monitores.

⸻ Peter, Peter, Peter... ⸻ ha susurrado múltiples veces Miguel, mirando hacia el suelo, su cabeza sólo pensaba en aquel estadounidense, no podía sacárselo de su mente, parecía imposible.

⸻ ¿Qué te pasa, Miguel? No dejas de mencionarlo... Eres extraño. ⸻ una voz femenina se ha escuchado de manera repentina, se trataba de Lyla, la asistente. Apareció con una mirada confusa, quería saber de que se trataba aunque ya lo tiene claro.

⸻ Lyla. ¿Cuántas veces te he dicho que no te aparezcas de la nada? Sueles espantarme la mayoría de veces. ⸻ dijo el castaño mientras hacia un leve quejido al escuchar aquella voz de mujer.

⸻ ¿Te gusta Peter, no es así? Todo esta demasiado claro. ⸻ dijo la chica levantando una ceja cruzando sus brazos, manteniendo su mirada burlona en aquel hombre. Se divertía mucho molestarlo.

⸻ Claro, pero como ayudante o más bien como amigo. Eso es lo que es, un amigo. ⸻ respondió el hombre mientras miraba a Lyla algo enojado.

Lyla no se tragó aquellas palabras de Miguel, ella se había dado cuenta de que algo pasaba con Peter y no se trataba de un simple ayudante o un amigo como lo decía ese mexicano. Todo lo tenía claro.

⸻ Eres el único que no te das cuenta, Miguel. Espero y pronto lo hagas de verdad. ⸻

La chica ha soltado unas cuantas risas para luego desaparecer nuevamente. Miguel empezó a sobre pensar los detalles de su relación con Peter Benjamin Parker, desde que Peter se encuentra presente en su vida se puede decir que han cambiado muchas cosas. Ahora tiene a alguien que ha intentado mil veces que sonría, hace sus chistes sarcásticos o aquellos detalles con la empanada y claro que a Miguel no le molestaba, al contrario, le encantaban, aunque no lo demostrara.

Miguel era alguien difícil y el mismo incluso lo sabía, ha habido muchas veces que ha intentado cambiar eso pero parecía imposible, al final seguía sintiendo aquel vacío desde hace tiempo y eso le volvía de esa manera, la idea de pensar que nunca podrá llenar aquello le quitaba las ganas de todo. Él era un Spiderman, pero había muchas ocasiones en las que odiaba serlo, no disfrutaba de su trabajo, pero ya estaba aquí, sabiendo que el había sacrificado bastante para destrozar todo lo que ha avanzado hasta ahora, era fastidioso a veces incluso ser Spiderman. No podía explicar el gran enojo y fastidio que le causaba ser Spiderman algunos días, simplemente sacrificó mucho y se arrepentía. Miguel daría mucho por volver al pasado y cambiar las cosas, pero claro, no existe la maquina del tiempo, no podía pensar en algo que es imposible, prefería mantener su cabeza en otras cosas. 

Había muchas veces en las que Miguel terminaba bastante deprimido gracias a su trabajo, pero es algo que no demuestra a otros, nunca se ha debilitado emocionalmente en frente de los demás y no pensaba hacerlo, siempre se ha mantenido firme. Al final, era el jefe, no podían verlo así.

Aunque había veces en las que adoraba su trabajo, pero eran mínimas. Peter y Mayday eran de las razones por las que Miguel le gustaba estar ahí, pues ellos eran demasiado carismáticos, o bueno... Peter ha sido demasiado bueno con él y Mayday de seguro será igual que Parker... le sorprende la gran paciencia que le han tenido con sus actitudes demasiado mierdas. Aquellas dos personas habían hecho demasiado con su presencia, Miguel podía decir que ellos le otorgaron un poco de brillo a su vida, o probablemente mucho. Hacia tiempo que nunca antes alguien se molestaba en darle pequeños detalles o incluso el ensañarle el "¿Cómo ser un Spiderman con gran sentido del humor?" Nunca le molesto que Peter hiciera aquellas bromas, nunca le molestaría algo de Peter ni siquiera de aquella niña pelirroja. Los quería mucho y de eso estaba seguro.