Od-laguna interferira con un libro que dejo de funcionar hace mucho. Mientras a su vez avista el pasado de dos almas perdidas. El y Ella se juntaran en un compañerismo único. ¿Es posible que nazca algo más entre ellos?
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
La habitación estaba en silencio.
Por la ventana ligeros rayos de sol del amanecer brindaba luz en el pequeño cuarto.
Dejando ver una gran cama en el medio, decoraciones extravagante de elegancia con un pequeño escritorio con un jarrón llena de flores.
Las sábanas se retorcieron un poco.
Un gemido bajo rompió el silencio, un niño de cabello negro se retorcía despertando.
Al abrir los ojos observó con cuidado el techo, su mente procesando lo ocurrido mientras dormía.
"No reconozco este techo", un poco bajo en ánimos, hablo.
Se sentó visualizando por completo su entorno.
Llevo a su cara las manos, dandose palmadas en las mejillas.
"Realmente un idiota", no pudo evitar quejarse de su estupidez.
Se obligó a estar en el presente, podía pensar en ello más tarde.
Tenía una misión encontrar a su Ella. Había esperado demasiado tiempo.
'una reencarnación, ¿eh?', pensó molesto. Mientras se revisaba si había quedado una cicatriz en su estómago.
No habiendo encontrado nada, se quedó sentado al borde de la cama meditando y ordenando sus pensamientos.
Tardó unos minutos con exactitud no sabía cuanto realmente. Pero le daba qué fueron menos de 10 minutos como mínimo.
Levantándose, dio unos cuantos estiramientos para finalmente animarse a salir.
Abriendo la puerta, observó un bello pasillo iluminado de piedras mágicas desde un farol. Estaban a todo lo largo del pasillo.
Camino perdido en sus pensamientos, concentrado en que hacer.
¡Debo de aprender la lectura y la escritura!
¡Debo de saber la historia de este mundo, al menos lo suficiente para evitar que quieran matarme!
¡Debo saber que otras cosas como cuando Emilia-tan me dio el falso apodo de Satella!
¿Por qué estaba tan molesta, de hecho incluidas todas esas personas, también?
Planificando con cuidado cada posible pregunta que debería de hacer.
Cada duda que quería obtener respuesta.
Sin embargo, algo era seguro, dos cosas eso era.
Uno no tenía la mente en este momento para pensar en todo lo necesario e importante. Aun demasiado absorto por el conocimiento de su pasado de una vida anterior y las varias misiones a seguir.
Segundo, estaría tomando más la actitud de su madre en la toma de decisiones y la manera en las que los afrontaba.
Por el rabillo del ojo vislumbró el retrato, ¿repetido?.
