𝟎𝟕| 𝙽𝚘𝚌𝚑𝚎 𝚍𝚎 𝙻𝚎𝚌𝚝𝚞𝚛𝚊

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Nuevamente Bill sonrió, no tardaron en llegar a casa donde enseguida encontraron a los padres viendo  la televisión con una taza de café en las manos y algunas galletas que la propia madre había hecho por medio de alguna revista

—¡Oh Bill!, Es bueno verte de nuevo por aquí—Soltó madre mientras le sonreía desde la mesa
—Buenas noches lamento las molestias—
—Si, yo lo lamento mas—Susurro padre mientras que madre le daba un codazo para que se callará
—No le hagas caso Bill, adelante. El suele ser....digamos que.... un poco celoso, es eso....ya sabes, todos los padres son así cuando sus hijas traen chicos a la casa—

Padre elevó la ceja al escuchar las palabras de su esposa mientras que Bill solo asentía con la cabeza y con una sonrisa que apenas podía notarse

—De nuevo estaremos haciendo el trabajo, tenemos poco tiempo y necesitamos avanzar—
—De acuerdo, así limpiare la habitación de invitados, así podrás dormír más cómodo. Seguro que el sofá cama fue incómodo no ¿Bill?—Preguntó madre mientras se llevaba una galleta a los labios

Kristen forzó la garganta mientras que con los ojos recorría cada rincón del pasillo que tenía aún lado, solo para no sentirse nerviosa  y que madre no lo notará

—Eh....si...muy incómodo....pero no bastante, dormi bien—Respondió el gemelo
—Bueno madre, estaremos trabajando—Kristen tomó al peli negro de las manos para tirar de el hasta la puerta de la habitación

—Odio leer ¿Lo sabías?—Habló el gemelo en cuanto entraron a la habitación, se dejó caer por el sofá al mismo tiempo que dejó soltar un suspiro largo
—No, no lo sabía—
—Pues ya lo sabes, pero me gusta leer para ti—
—¿Porque?—Pregunto apunto de ponerse roja cómo un jitomate
—Bueno ayer no dejabas de mirarme mientras lo hacía, me gusta que me mires—

Kristen sintió las mejillas rojas, desvío la mirada al suelo un poco avergonzada, mientras que el peli negro dibujo una pequeña sonrisa al notarlo

—Cuando llegué Hamburgo las personas me miraban y todavía lo hacen, al principio me hacía sentir incómodo, inseguro tal vez—Se levantó del sofá y caminó a pasos lentos hacia Kristen quien estaba a un lado de la puerta—Pero cuando tú lo haces...me pones nervioso—

—N...ne...¿Nervioso?—Tartamudeo al ver que Bill se acercaba demasiado a ella, dió pequeños pasos hacia atrás hasta chocar contra la madera de la puerta
—Y lo que más me cuesta entender es porque cuando me acerco de esta manera siento que el corazón se me va a estallar ¿Porque Kristen?—

Bill puso una mano sobre la madera de la puerta, un poco arriba de la cabeza de Kristen mientras que con la otra mano tenía sujetada la cerradura de la puerta. Kristen podía sentir la respiración de Bill chocar contra su rostro. Su corazón empezó a hacer latidos tan fuertes mientras que sentía el estómago un revoltijo de mariposas

—B...Bill....yo—
—Kristen voy a ser directo. Desde que te vi en esa banca provocaste algo en mí no sabía que era hasta que te volví a encontrar—
—¿Y que es?—
—Ya te lo dije, me gustas Kristen y no me importa si yo no te gusto har....—
—Bill me gustas también—Soltó entre dientes interrumpiendo las palabras del gemelo

El gemelo sonrió al escuchar la confesión, lo sabía, ya lo sabía solamente quería que Kristen lo dijera por su propia cuenta, Bill pasó su mano derecha por el rostro de la cobriza acariciándola con suavidad y delicadeza, mientras le dejaba un beso por la frente

𝗙𝗼𝗹𝗹𝗼𝘄 𝗬𝗼𝘂; Bill KaulitzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora