No soy de tu misma sangre, pero aún así eres mi hermana

¡¿Por qué te veo como mi hermana Luisa?!

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"Ahora me arrepiento, de nunca haber tenido el valor de decirte lo que vivía en ese momento en casa y en el colegio; ¡¿Por qué no pude ver que siempre estuviste a mi lado, para escucharme y ayudarme desde que naciste?!" Se preguntó Sofía en sus pensamientos, terminando de recordar, y empezando a volver al presente, con un sentimiento de gran arrepentimiento.

- ¡Mija! ¡Mija! – Llamó Luisa a Sofía, con un tono de alegría y una bella sonrisa en el rostro, invitándola a ver una película en su cuarto sacándola de sus pensamientos.

- Ya voy - Dijo Sofía finalmente saliendo de sus pensamientos y recuerdos de hace 7 años.

"Ya no importa lo que ocurrió en el pasado; a medida que hemos crecido te volviste alguien muy importante para mí en mi vida. Aún recuerdo cómo nos divertíamos haciendo presentaciones de bailes cuando estábamos en la primaria, cuando fue nuestra primera comunión al hacer un dueto de canto y baile, cuando hemos viajado a Villeta, Manta y Tibaná, cuando me defendiste de mi amigo que resultó ser falso y, sobre todo, cuando creamos nuestro canal de YouTube y nos divertimos grabando vídeos juntas.

Hemos vivido tantas cosas juntas; atravesado problemas personales y familiares juntas y, sobre todo, superado retos juntas de nuestros sueños, te adoro con todo mi corazón, no sé cómo expresar realmente esta emoción y sentimiento que me produces, con solo sentir tu presencia y estar cerca de ti, no importa lo que se venga en el futuro o si hay distancia, siempre serás mi hermana, ¿pero y tú?, ¿también me ves como una hermana?" Pensaba Sofía para sí misma, nuevamente pérdida en sus pensamientos, mientras se dirigía caminando hacia el cuarto de Luisa.