The Insomnia Storie

Capítulo 1: EL COMIENZO

Fue algo sobrenatural. Sí creo que fue algo así. Esa sombra en el jardín de mi casa era escalofriante... esa noche no podía dormir, me quedé viendo películas hasta que me percaté de esa extraña figura que parecía acecharme desde afuera de mi ventana.  Caminé hacia el patio de mi casa mientras veía si a mi alrededor había algo para defenderme por si llegaba a ser necesario.

Antes de salir afuera decidí asomarme por la ventana para poder examinar mejor y ver a quién pertenecía esa figura. Pero no pude ver nada fue como si se hubiera esfumado. Y justo cuando comencé a creer que eso ya se había ido, una criatura monstruosa salió de la nada, sentí cómo si mi corazón se fuese a salir de mi pecho por el susto.

Sus ojos eran grandes y de un color dorado brillante, su piel gris y escamosa y su boca estaba llena de dientes que parecían ser afilados, esa cosa estaba del otro lado de la ventana y aun así pude sentir el olor a putrefacción que emanaba. Antes de que pudiera siquiera darme cuenta me encontraba corriendo hacia mi habitación. Ni siquiera pude pensar en que haría a continuación cuando escuché el ruido de cristales rompiéndose, parecía provenir de la habitación de mis padres.

El monstruo ya había logrado entrar. No supe que hacer, vivía prácticamente en el medio de la nada y por más que gritase nadie iba a escucharme, no tenía señal y mis padres no volverían a casa hasta dentro de dos días. Mi primer instinto fue esconderme en mi armario y rogar para que esa criatura no me encontrase, pero para mi mala suerte no tardó mucho en llegar a mi cuarto. Escuché su respiración tras la puerta y como sus pasos se iban acercando cada vez más. Nosé como pero él logró abrir la puerta, se encontraba erguido en dos patas como si estuviera por atacarme.

En ese momento sentí más miedo que nunca, lágrimas corrían por mi rostro ¿Todo iba a acabar así? ¿Este iba a ser mi final? Traté de retroceder lentamente pero me tropecé con unos zapatos, y fue entonces cuando sentí como las garras de aquel monstruo atravesaron mi cuello cortando la yugular, la sangre salpicó por todos lados, y caí al suelo sintiendo un profundo dolor, poco a poco mis ojos se iban cerrando.

Tenía mucho frío, pero ya no sentía nada, mis extremidades se iban entumecimiento mientras el charco de sangre que se había formado a mi alrededor no hacía más que crecer. Así fue como en una noche de insomnia me convertí en una victima de esa criatura, pero la historia no termina acá...