On Fire- Teen Wolf

Capítulo 12

Beacon Hills Preserve
El presente

Mientras Scott abrazaba a Allison contra el frío, suspiró. no quería seguir adelante, pero cada minuto que pasaban besándose, no estaban buscando sus llaves.

"Allison, deberíamos mirar un poco más", dijo, y ella lo besó de nuevo.
"Lo sé. ¡Esto es simplemente... tan agradable!"

Ambos se pusieron de pie. Solo habían recorrido dos tercios del camino original que habían tomado al principio, caminando junto a una pendiente empinada que se precipitaba hacia la oscuridad. Todavía había esperanza de que pudieran encontrar sus llaves.
"No te preocupes, los encontraremos", dijo, y le apretó la mano. Ella le sonrió juguetonamente.

Entonces sonó su teléfono. Sus cejas se dispararon y metió la mano en el bolsillo de su pesado abrigo. Pero cuando retiró la mano, se tambaleó hacia atrás y soltó el teléfono. "Vaya", dijo ella.

"Lo conseguiré", dijo, pero ella ya estaba girando alrededor. para recuperarlo.

Su impulso la llevó hacia adelante y, para sorpresa de Scott, comenzó a deslizarse por la pendiente. Sus pies salieron disparados de debajo de ella mientras aceleraba.
"¡Allison!" gritó, extendiendo la mano para detenerla.

Él agarró su mano, pero su peso lo hizo perder el equilibrio y se estrelló contra el suelo. Luego, la pendiente descendió en un ángulo más pronunciado, prácticamente perpendicular, y comenzaron a caer casi de cabeza en la oscuridad.
Scott trató de agarrarse a las ramas mientras caían en picado, luchando por aferrarse a Allison, pero sus dedos se deslizaron fuera de su alcance y la escuchó gritar. Las rocas le acribillaron la cara y el cuerpo, y su hombro golpeó con fuerza contra una roca. Trató de agarrarlo pero sin suerte.

"¡Allison!" el grito.
No hubo respuesta mientras las rocas rodaban a su alrededor y él seguía deslizándose hacia abajo.

Sintió que comenzaba a devorar y se dio cuenta de que si se permitía hacerlo, al menos podría ver dónde estaba cayendo.
No, para, se ordenó a sí mismo.
"¡Allison!" llamó de nuevo.

Nada.
Si lo veía girar, muchas cosas saldrían mal. Pero tenía que arriesgarse. Trató de limitarlo solo a la vista, y el infrarrojo escarlata bañó el mundo que se desplomaba a su alrededor. Seguía sin ver a Allison por ninguna parte.
Que esté bien, que esté bien, suplicó mientras caía. Siguió tratando de agarrarse a algo, cualquier cosa. Le estaban cortando la piel de las manos; todo picaba.

Luego aterrizó con fuerza en la tierra esponjosa y se quedó jadeando.
El miedo se elevó y lo rodeó como olas. Se obligó a esconder al lobo y se tumbó en el suelo, lastimado por todas partes.

"¿Scott?" Allison dijo con voz ronca. "¡Scott!"
"Estoy aquí", dijo, estirando los brazos, tratando de encontrarla sin su visión mejorada. Sus manos se encontraron, y tiró de Allison en su abrazo muy humano.

"¿Estás bien?" ella preguntó. Ella cubrió su rostro con besos rápidos. "¿Estás bien?"
"¿Estoy bien, y tú?" Tenía poderes curativos de hombre lobo. ella no lo hizo Él le tocó la cara. Tenía un rasguño en la mejilla y hojas en el pelo, pero parecía relativamente ilesa.

"Estoy bien." Recogió algunas de las hojas de su cabello.
"Tengo algunos rasguños en mis piernas pero no es nada importante"

"Me alegro", dijo, y la besó. "Hola, Allison", le susurró al oído. "Me estoy enamorando de ti. De cabeza".

Ella se rió. "Agradable", dijo ella. Luego le quitó una hoja del brazo, como si fueran dos animales acicalándose el uno al otro. "¿Crees que estamos siendo castigados por escabullirnos cuando estamos castigados?"