Los enCHANmucados

capítulo 3

— Bang Chan te dije que era buena idea el crear un cuerpo físico para pasear en el pueblo — hablo un demonio pecoso de ojos azules brillantes en la rama de un gran árbol sentado

— Si ya sé y yo te dije que no te fueras por ahí sin mi supervisión, casi se me sale el corazón del susto — regaño el otro demonio de ojos rojos brillantes parado a lado de el

— Ya perdoname por favor —

— Ya pues, pero por favor no te alejes tanto, creí que te podría pasar algo malo — el demonio de cabello negro se agachó a su altura

— Otra vez — dijo con una mirada triste

Ya había pasado antes que Félix se salía de los límites que la maldición les permitía y casi perdía su esencia, aunque estaban bastantes concientes de eso desde que murieron

— Seungmin y Changbin son buenas personas, no como estos — exclamó lanzando un pedazo de rama al suelo

— No los conocemos bien pero estoy de acuerdo contigo en eso —

Bang Chan fue el primero en bajar del árbol seguido de Félix, luego fueron a pasear en el pueblo. A "espantar" como dicen que hacen

— Mañana dejan la ofrenda — aviso Chan al pasar por ese lugar

— Me da risa como piensan que eso puede detenernos si nos enojamos —

Y es verdad, nunca se habían enojado tanto como cuando unos meses después de morir los habitantes del pueblo querían hacerle daño a sus antiguos novios

Solo se detuvieron porque casi los lastimaban, en ese momento los aldeanos les habían llevado una ofrenda y fue que pensaron que con eso se detenían

Que ilusos son los humanos realmente

— Hace mucho no los vemos — la nostalgia los invadía cada vez que recordaban a sus antiguos amores

Porque los demonios solo se pueden enamorar de una persona, su corazón nunca cambia porque viven durante mucho tiempo, en cambio los humanos viven poco y eso hace que cuando mueran y nazcan de nuevo sus corazones también lo hagan

Porque así solamente puede amar un ser inmortal o sobrenatural, de una manera tan única que le daria miedo a una persona ordinaria que no lo comprende

— Me recuerdan mucho a ellos — se notaba a leguas

— Regresemos ya es muy tarde y mañana vamos con Seungmin y Changbin a andar por ahí, recuerda que ahora somos personas de este pueblo —

Aquellos demonios tomaron rumbo a su hogar o lo que ellos llaman así para poder descansar

Era una casa bastante bonita y no era tan grande ni tan pequeña, lo importante es que era acogedora para ambos

Tenían también un hermoso jardín lleno de flores y árboles frutales que le daban un toque más "vivo" a su vivienda y en la parte trasera tenían unas especies de lapidas hechas con hermosas plantas. En estás los nombres grabados en una vieja tabla de madera de sus parejas pasadas

Kim Seungmin y Seo Changbin

Las hicieron cuando se enteraron de la muerte de ambos como una manera de honrarlos

— Realmente son hermosas las flores que nacen de estás plantas — exclamó Félix sentándose cerca de la que tenía el nombre de su enamorado

— Son como lo eran ellos — Chan estaba de acuerdo

— ¿Tu crees que nos recuerden?, después de todo son las reencarnaciones de ellos — Félix no quería ilusionarse pero aún tenía esa esperanza

—  El tiempo lo decidirá, ahora a dormir — demandó — todavía no dominamos la técnica del "cuerpo humano", nos gasta mucha energía aún —

— Bueno —

A la mañana siguiente salieron de su casa dirigiendose a una pequeña bodega que tenían

En esta tenían varias cosas y de entre ellas, un libro de hechizos contrastantes de magia negra

— Intentemos de nuevo —

Desde hace tiempo que quieren quitarse la maldición, vivir por mucho tiempo es algo que a muchos le agradaría pero no podrían soportar hacerlo demasiado

No les molesta ser demonios pero también les gustaría conocer más alla del pueblo, conocían cada rincón de ese lugar y querian ver cosas más extravagantes

En una lengua muerta que hablaban a la perfección estaba escrito aquel libro

Chan pronunció unas palabras mientras extendía uno se sus brazos en dirección a donde estaba Félix, unos pasos alejado de él, un aro de luz brillante salió de esta. Todo parecía ir bien hasta que escucharon ruidos extraños

Lo que provocó que se confundiera de palabras y de este aro empezarán a salir rayos

— ¡Cuidado Félix! — antes de que el hechizo pudiera hacerle daño a Lix Chan movió su brazo a otro lugar, al hacer eso un rayo de color rojo carmesí chocó contra una vieja vasija

Esta explotó dejando solo polvo en su lugar

— Ay dios — Lix estaba demasiado asustado por lo que le pudo pasar

— ¿Estás bien? — Bang Chan corrió hacia el para calmarlo del susto

— Creo — dijo abrazando a su amigo

— Dejemos esto por ahora, vamos a ver qué hacía ese ruido — sugirió y el pecoso asintió

El terreno que poseían era bastante grande así que buscando que los interrumpió se les podría bajar un poco el susto, esperaban que si

— ¿Quién eres cosa ruidosa?— con un hilo de voz preguntó asustado Félix

— ¿Voy contigo?—

— Si chanie —

Rápido llegó con el, donde Félix estaba se encontraba lo que causaba el ruido que alteraba al niño

Tomaron su forma humana y con un palo que traía Lix revisaron entre los arbustos encontrando a un pobre chico amarrado y con la boca tapada por un trapo

—¿Que?— el pelinegro lo bajo de ahí, aquel chico se veía muy asustado casi como lixie

— ¿Quién eres?— el rubio le quitó la mordaza de la boca para que hablara

— Me llamo... Jisung —

— ¿Por qué estabas en el árbol?— cuestionó el mayor de todos

— Unos tipos que me odian me hicieron eso, creían que si hacían eso los demonios tomarían mi alma y dejaría de serles un estorbo — le tristeza le llegaba al hablar de eso

— ¿No estás herido? —

— No —

— Que bueno, ven con nosotros por mientras que puedas comer un poco y luego te llevamos del otro lado, aquí es peligroso — le ofreció Félix

—¿Ustedes que hacen aquí?— Jisung ni se acordaba de dónde estaba

— ¿No te lo tomarás mal?— el rubio le iba a decir pero no sabía cómo

— Nosotros somos los demonios — Bang trato de que sonara bien pero lo único que provocó fue que Sung de desmayara del susto

— Dios —