El guitarrista de una conocida Banda, se enamora de la mejor amiga de su hermano gemelo, a pesar de no tener nada en común se logran enamorar y empiezan a desearse el uno al otro
Estuve demasiado tiempo afuera,cuando me percaté de que ya era tarde, decidí regresar a casa.
Al llegar a la entrada de mi casa me percaté que se me avían olvidado las llaves dentro, mierda.
Me dirigí a casa de Bill y tom, era tarde y no me quedaría afuera de mi casa.
Después de unos minutos llegue, la casa de los chicos no estaba tan lejos de la mía.
Le mande mensaje a Bill para que saliera a abrirme.
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Bill te juro que te estoy empezando a odiar.
Me acerqué a la puerta y toqué, no pasó mucho tiempo después de que tom saliera con su torso completamente desnudo, dejando ver su marcado y trabajado abdomen.
-hola linda, yo se que vendrías a buscarme- una sonrisa se dibujó en su rostro.
-jodete tom, no vine por ti, estoy aquí por Bill- pase a su lado empujándolo un poco y entrando a la casa.
-adonde carajo vas lil?-
-voy a la habitación de Bill, que no es obvio?- Rodé los ojos subiendo las escaleras de la casa.
Sentí como una mano me detenía, impidiendo que subiera, era tom.
-nena, mejor quédate un rato conmigo y terminamos lo que empezamos- me tomó de la cintura y empezó a besar mi cuello.
-tom no me toques-me aleje bruscamente de él y subí corriendo las escaleras, hasta llegar al cuarto de Bill.
Entré a la habitación y cerré la puerta detrás de mi, quite mi sudadera dejando ver la camiseta de tirantes, la cual resaltaba los piercing de mis pezones.
Entre al baño y me limpié la cara.
Escuche como la puesta se abría, salí del baño secándome la cara con una toalla.
-carajo Bill, sentí que nunca ibas a llega...- quite la toalla de mi cara y vi a un lindo chico de ojos grises, pelo desordenado y un aro en la nariz.
Escuche como una pequeña risa salía de sus lindos labios.
