RILEY IS DEAD.

CHAPTER 2

— ya casi.. ya casiii... — Riley tomaba por las piernas a Cindy la cual trataba de tomar todas las fresas posibles y cubrirlas con chocolate, el plato de porcelana se movía por su mano, estaba a punto de caerse. 

— ya no aguanto maaas. — la peligra tomaba por las piernas a su amiga la cual se balanceaba por todos lados, pero lograba mantenerse estable de cierta manera. 

Cindy sonrió. — listo! puedes bajarme rals. — la chica solto un suspiro y con cuidado ayudo a bajar a Cindy. Riley era mucho mas alta que su amiga, por lo cual, había sido lo mas justo hacer esto. — te dije que no nos caeríamos ni romperíamos nada, viste? puedes confiar en mi siempre.— Riley rio y asintió con su cabeza tomando una de las fresas con chocolate manchándose la boca con esta. 

Cindy rio y también tomo una fresa con chocolate, definitivamente eran sus favoritas. El ruido de la musica resonaba por el lugar, había mucha gente, pero en aquel pequeño lugar donde se encontraba la fuente por alguna razón se encontraba totalmente vacío. 

— mmm creo que deberíamos volver con los demás, este lugar da un poco de miedo. — ambas chicas tomaron rumbo hacia las puertas que daban entrada y salida al lugar, al instante en el que entraron, un estruendoso grito se escucho por todo el salón. 

La musica paro, la gente al instante dejo de hacer lo que estaba haciendo, para después fijar su vista en lo que seria el asesinato mas espantoso y horripilante que esas personas hayan visto en toda su vida. La señora Johnson, Amanda Johnson, había muerto. 

Su sangre se escurría por todo el suelo, mientras que el metal de el cuchillo clavado en su pecho aun brillaba y la sangre de su boca salía poco a poco con sus espasmos que no dejaba de tener. La sangre que expulsaba de su cabeza la cual había golpeado tan abruptamente el suelo , de esta manera fracturando su craneo. El lugar de la fiesta se volvió una casa de gritos y gente corriendo por todos lados. Riley se quedo en shock junto con la pelirroja que logro reaccionar mas rápido que su amiga y correr a buscar a su madre. Riley levanto la mirada hacia, la señora Johnson había caído desde el ultimo piso de esa mansión. Su padre: Derek O'Connel, ahí estaba. Con una sonrisa en su rostro y una mirada profunda que no dejaba de ver el cuerpo de su pobre víctima. Su padre había matado a Amanda. 

— AMANDA! — grito tan fuerte el señor Johnson. Ese grito tan desgarrador nunca saldría de la cabeza de la pequeña. 

Su pequeño hijo, Stephen Johnson, corrió hacia su difunta madre dando otro grito tan desgarrador, mucho peor que el de su padre, el cual tampoco saldría de la mente de Riley.

Una mano toco el hombro de Riley asustando por completo la niña. — Hija, tenemos que irnos. 

Clara O'Connel, sabia lo que su esposo había hecho, quería huir, quería gritar, quería llorar. Pero lo único que pudo hacer esa noche del 2015, fue correr por su vida.