Capitulo 2
Elizabeth
Llevo asistiendo al colegio 1 semana, no me he vuelto a topar al idiota egocéntrico desde lo que paso en la cafetería, después de todo es un lugar tan grande que te podrías perder, ademas de que desde ese día he decido llegar a mi capacitación y luego dirigirme directamente al mi clase, me evito salir del salón.
Tengo 4 compañeros con los que hablo, no me caían tan bien pero, son muy buenos y a penas no tienen nada que hacer jalan sus asientos y me rodean sacando conversación, he hablado con ellos pero les termino cortando la platica y no entiendo como le hacen para hablar de más temas. A mí tía no la he visto desde que me dejo sola en esta escuela, al regresar a casa solo estaban los del servicio, Nana y Trevor aún no han llegado, normalmente veo a mi tía cada 2 o 3 años, no le intereso en lo absoluto y ella tampoco a mí.
- ¿Eli, me acompañas al baño? - me dice Layla con cara de suplica
- No.- le respondo
- Anda Eli vamos, siempre llegas y no sales de esta salón - hace un puchero con el que claramente no me va convencer.
-No tengo ganas- me sincero
- Eli, porfavor es que me siento mal, me bajo Graciela
- ¿Como? ¿Graciela? ¿Quién es graciela?
- Eli ¿que le puede bajar a una mujer cada mes? - me dice con cara de obviedad
- Oooh - sonrío - ¿Pero por que graciela? - le digo riendo
- Por que sangre es igual a graciela
- Claro que no!
-Si! - exclama - sanGRE y GRAciela entiendes, suenan igual.
- No debería ser Andrés!
- No, no riman en absoluto.
Comienzo a reír demasiado con su aclaración que termina convenciendo de acompañarla, pero eso no fue todo cuando vi que Chris, Nick y Matt venían detras de nosotras gritando mi nombre.
-Hey! Eliiiiii - Gritaban los tres
- Hey, hey no griten.- los tranquilizo - ¿Que sucede?
- Vamos comprar - me dice Nick - es la primera vez que te vemos salir del salón
- Es un milagro! - exclama Matt
Comenzamos a reír todos dirigiendo a los baños
- Te gustaría a acompañarnos a vender- Me pregunta Chris
-¿Depende de que venden?
- Nada malo Eli
- Venden dulces - Responde Layla
- Pero y la cafetería - les digo
- Es muy caro y mayormente prefieren comprarme a mí que ellos- aclara Chris
- Por eso las dos maletas- recuerdo que me he preguntado el por que Chris lleva dos maletas siempre- ¿No te dicen nada?
- Bueno pues que te digo - se queda pensando Matt
- Es ilegal- dice Layla- vender dulces es como si estuviera vendiendo droga, si nos encuentran nos expulsan.
- OMG!- exclamo - Yo jalo
- ¿Enserio? - Responden los cuatro
- Si, claro- es una buena idea, si me encuentran vendiendo dulces y me expulsan ya no regresaría a clases y tendría demasiado tiempo para hacer todo que deje por estar en el colegio.
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Arrastrándome de vuelta a ti
RomanceEsta historia no es dulce, las chicas no son inocentes y los chicos tampoco son como el principe azul que soñamos. Deja que Elizabeth y Oliver te cuenten su historia de amor o odio.