Capítulo 8

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Ha trabajado como un loco. Dio la vuelta al mundo sin volver a casa, y ha estado en racha desde que entró en la empresa. Por cierto, ¿qué?

Eun-woo, que abrió mucho los ojos, miró a Jin-hyuk. Estaba conduciendo hacia adelante.

"Quiero dormir hasta tarde".

¿Eh? Eun-woo pensó que lo había oído mal y giró la cabeza y lo miró de nuevo. ¿Por qué me haces esto? ¿Estás diciendo que acabo de decir lo que quería decir? Era difícil seguir el ritmo de Jin-Hyuk.

Ni Eun-woo, ni Jin-hyuk hablaron hasta que llegaron a casa. Eun-woo no lo vio, pero

Jin-hyuk tenía una sutil sonrisa en la cara. Fue una conversación extraña que no llegó a buen puerto, pero fue una conversación que les hizo pensar mucho.

***

"¿Qué has comido?"

En cuanto Eun-woo abrió los ojos, sonrió ante la voz de Ju-won. Tendré la cara hinchada por haber comido mucho de esto y de aquello a altas horas de la noche.

Anoche, de vuelta a casa, los dos comieron la comida que habían comprado mientras veían las noticias en el salón sin cambiarse de ropa. Al ver que Jin-hyuk se comía una hamburguesa, Eun-woo se comió todas las patatas fritas. Lo que eligió fue un zumo de naranja, pero se hizo el simpático con Jin-hyuk y pidió bebidas gaseosas. No se ha hecho mucho. Sólo hemos merendado juntos hasta altas horas de la noche.

"¿Dijiste que en el salón......?"

Eunwoo se incorporó lentamente ante las palabras de Ju-won. Fue Eun-woo quien se escondió a solas, comió comida instantánea y la recogió sola a altas horas de la noche para destruir las pruebas. Pero ayer, dejaba las sobras en el salón. Lo hizo con Jin-Hyuk, así que no tuvo que esconderlo en el viento de la madrugada.

En lugar de responder, Eun-woo se levantó de la cama y se puso delante del espejo. Y me cubrí la cara con las manos.

Vaya, estoy realmente hinchada. Es nieve de carpa.

"Hmm. ¿Qué pasa?"

Eun-woo, que se tomó su tiempo para asearse y salió al salón porque Ju-won le despertó más tarde de lo habitual, miró a su alrededor con la voz que ahora le resultaba familiar. Son casi las nueve. Jin-Hyuk debería haber ido a trabajar.

Y cuando miré a Jin-hyuk que se acercaba, mi cabeza se inclinó hacia atrás. Era Jin-Hyuk vestido con un traje. Su mano, que se detuvo a una distancia de un pequeño movimiento, tocó la barbilla de Eun-woo. El olor de su perfume, lleno de fragancia fresca, permanecía en la punta de la nariz.

En cuanto la mano de Jin-hyuk tocó su barbilla, Eun-woo no pudo moverse. No sabía cómo expresar esta sensación. Mientras sus manos se movían, su cabeza se movía de un lado a otro, hacia arriba y hacia abajo. Los ojos de Jin-hyuk miraban insistentemente la cara de Eun-woo.

Las yemas de los dedos de Jin-hyuk, que miraban la cara de Eun-woo, tocaron esta vez su camiseta, y la expresión de Jin-hyuk, que confirmaba sus ojos y mejillas hinchadas, se oscureció rápidamente.

"No te he dado de comer una hamburguesa".

Apresuradamente, Eun-woo agarró la camiseta y tiró de ella para cubrirse los hombros. La cara estaba hinchada como una reacción alérgica, pero no había manchas rojas en el cuerpo. Sólo entonces la mano de Jin-Hyuk se apartó. Y se volvió hacia Ju-won, no hacia Eun-woo.

"No creo que sea una reacción alérgica. Creo que estoy un poco hinchado porque comí un bocadillo tarde en la noche......"

Ante las palabras de Ju-won, Eunwoo se alejó un par de pasos de Jin-hyuk. No es una reacción alérgica, pero ¿estás así de hinchado?

El divorcio es lo primero que se debe hacer BLDonde viven las historias. Descúbrelo ahora