sensei

Capítulo 7

Definitivamente había conseguido mi objetivo de llamar la atención, aunque no en el mal sentido claro, llevaba puesto unos vaqueros ajustados que me marcaban bien el trasero y una camiseta ajustada arriba de color beige, no era el tipo de ropa que usaba habitualmente en la escuela, no quería llevarme miradas indeseadas por parte de algunos idiotas que rondan por aquí, pero el tener a Marcos babeando por mi culo era uno de los primeros pasos. Misión uno.

—Wow—exclamó Erik — ¿De dónde has salido tú?— añadió nada más cruzar por la puerta de la clase —Te recuerdo que hoy es Lunes, no sábado— sonreí.

—Gracias por el halago Erik, solo quería, no sé, cambiar un poco.

—Pues estoy deseando ver entonces qué te pones el sábado— me encanta Erik, siempre fue como el hermano que nunca tuve. —Quería verte, estaba preocupado por ti.

—¿Por qué?

—¿Por qué? Por lo que pasó el sábado por su puesto.

—¿El sábado?

—Por lo que veo ibas muy borracho, ¿No recuerdas qué pasó? ¿Dónde fuiste?— No recordaba bien qué había pasado el sábado pero recordaba perfectamente dónde había amanecido y eso por su puesto no se lo iba a decir. Puede que fuera mi mejor amigo, pero este secreto debía guardarlo un poco más de tiempo y Erik no era precisamente "una caja fuerte de información".

—A... a mi casa— sabía perfectamente que ninguno de ellos se arriesgaría a ir a mi casa y poder enfadar a mi padre, no le gustaban las visitas y lo sabían bien.

—Podrías haber llamado, estaba preocupado.

—Bueno Erik, es que no recuerdo muy bien que pasó, me fui y recuerdo amanecer en mi casa, eso es todo.

—Bueno, me alegro que estés bien— me sonrió.

La campana sonó, era el turno de Brian para dar clase, me acerqué al pupitre de Marcos y me apoyé en la mesa intentando resaltar mi figura y ponerme justo en la mirada del profesor. Esa era la misión número dos.

—Hola Marc ¿Qué tal?

—Qué bien que me hablas, estaba preocupado de si estabas enfadado por lo del sábado— Otro igual con le sábado ¿Qué diantres había pasado que no podía recordar?

—Bueno, no te preocupes, no recuerdo nada del sábado así que igual prefiero no saber por qué todos os preocupasteis por mí— me sonrió.

—Hoy has venido muy guapo ¿No? ¿Acaso querías sorprenderme?

—No te hagas ilusiones— Vi por el rabillo del ojo como Brian entraba y se quedaba mirando en mi dirección. Sonreí para mis adentros.

—Todo el mundo a su asiento por favor, la clase va a empezar.

Di un pequeño abrazo a Marcos a sabiendas que aún estaba mirando y me dirigí hacia la mesa con el paso más sensual que imaginé, me senté y volví mi vista hacia la calle, sé que eso le molestaba así que iba a hacerlo más a menudo, aunque me estuviese perdiendo unas vistas preciosas, todo fuese por llamar su atención.

...

...

Una semana, ya había pasado una semana y se me estaban agotando las ideas de cómo llamar su atención.Aún no me había dicho nada e incluso recogía sus cosas cuando acababa su clase antes que yo; había probado de todo, ponerle celoso con Marcos, ropa indecente, miradas, gestos e incluso le había puesto mi cara sexy, también había pasado por su lado insinuándome, me había acercado en mitad de la clase a su escritorio a "preguntar dudas" rozándole disimuladamente antes de irme, de todo, ya no se me ocurrían más ideas y me estaba desesperando, en momentos así, conspiraría con los chicos para que me ayudasen pero teniendo en cuenta que ninguno sabe lo que ha pasado entre Brian y yo y que uno de ellos además es mi ex que me puso los cuernos, se me quitan las ganas.