Prólogo

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¿La Libertad y la Paz podrán ir de la mano?

Libertad, era por lo que ella luchaba.

Paz, era por lo que él luchaba.

Los dos luchando por un solo camino, la libertad, no se sabe quién ganaría, pero pasaría todos los obstáculos y dificultades juntos.

Violet era una niña de 9 años que vivía con su familia, pero era torturada y entrenaba sin descanso todos los días, la razón, la razón era que ella heredaría el titán martillo de guerra, por ello su cuerpo debía estar entrenado tanto físicamente como mentalmente para tal cargo.

Violet corría sin importarle nada, solo queriendo escapar del infierno y ser libre, no le importaba en ese momento si era el fin del mundo o el castigo que le daría sus padres después, solo, su único deseo era por fin ser libre y vivir sin preocupaciones o pensar en el mañana.

Pero por desgracia de la pequeña soñadora, su padre la encontró y la llevó arrastrando, devuelta al infierno, llamado por ella, ya que en ese lugar la cortaban a diario sus alas, las alas de la libertad

Devuelta a su hogar, Violet regresaba siendo arrastrada por su padre, mirando a espaldas suyas las murallas, preguntándose en qué se basaba y que significaba en sí su libertad, si al fin de cuentas también estaba encerrada por murallas limitándole ver el exterior, siendo aves en corral, aves presas

Al llegar a su hogar, o debo decir, al llegar al infierno, Violet encontraba a un hombre de unos 30 años aproximadamente conversando con su madre

- Violet hija en donde has estado. – Violet estaba un poco sucia su ropa, su madre trataba de lucir como una madre amorosa, pero dentro de ella sentía que en el momento que se vaya la visita estaría siendo nuevamente sintiendo el dolor de su piel, sangre, sudor y lágrimas.

- Y bueno señora Evergarden, eso sería todo. – Dijo aquel hombre de cabello largo y color claro, sus ojos eran de color verdes, era alto, traía puesto un traje azul que lo hacía ver elegante y un poco atractivo.

Mientras aquel hombre se acercaba a la pequeña Evergarden, de 9 años, estatura un poco baja que lo demás de su edad, pero era fuerte y resistente por los entrenamientos duros que recibía por parte de su padre, Violet poseía unos ojos dignos de admirar, eran de color azules y junto con un largo cabello dorado que mayormente lo tenía recogido en dos bollos atados en dos listones, pero en ese momento lo tenía suelto. Violet Evergarden era admirada y venerada por su gran belleza desde pequeña. – Su madre le decía que aquel hombre era con el quién se iba a casar en el futuro, ella al escuchar eso no sabía cómo reaccionar, era una niña que no mostraba mucho sus sentimientos ni el cómo se sentía, ya que no estaba acostumbrada a hacerlo por ser criada en un ambiente un poco hostil

– Pequeña Violet si no me equivoco. - decía aquel hombre de nombre Willy Tybur, ya encontrándose cerca de la pequeña

- Si ese es mi nombre – respondió la pequeña ya antes nombrada, respondió tímida y mirando al suelo, mientras que el joven Tybur le tocaba con la palma de su mano la adorable y pequeña cabeza de Violet, en señal de confianza

- Y dime pequeña, ¿cuántos años tienes? – no nueve años – respondía la pequeña tartamudeando, ya que no estaba acostumbrada a hablar directamente con las personas

Después de aquella conversación que había tenido con la quién iba a ser su prometida y esposa. Tybur, se despedía de la familia haciendo una reverencia en señal de respeto y para luego ponerse su sombrero demostrando que ya se iba a ir.

Luego, cuando los padres se aseguraron que estaban solos con su hija, su madre le gritó y la llevo a golpes hacia el sótano de la casa, para ya luego castigarle de la peor manera a la pequeña niña, el lugar en donde Violet deseaba cada vez morir y por fin descansar en paz

Mientras tanto, en otro lugar, un hombre de cabello azabache, rodeando los 20 años, se encontraba consternado, ya que segundos antes había presenciado como dos de sus mejores amigos, Isabel y Farlan, amigos que confiaba plenamente en ellos y con los que había luchado para salir de su propio infierno, la ciudad subterránea. Aquel hombre, que era llamado Levi Ackerman, se encontraba consternado por la pérdida ante sus propios ojos de las dos personas en las que más confiaba.


Dos personas que anhelaban con todas sus fueras ser por fin libres, ellos sabían más que nadie la dura realidad de la vida que es y el verdadero significado de sentirse solos, se necesitaba el uno del otro para poder superar sus traumas y miedos del pasado. Lo que no sabían, era que esa historia, les iba a dejar con un gran vacío en sus corazones y en sus almas.

Una gran historia de amor, protagonizadas por dos personas, Violet Evergarden y Levi Ackerman. Dos personas con una meta en común, alcanzar la libertad.



Holi, espero que les guste esta historia.

Es el primer libro que escribo así que soy nueva en esto. 

Siento que el personaje de Levi contrastan muy bien con el personaje de Violet, así que decidí escribir este libro basándome en sus sentimientos y emociones de cada uno. 

Aún no tengo planeado el final, pero espero mejorar a través del tiempo. 

Gracias, muchísimas gracias por leer este fanfic, espero les guste

- Cookie


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