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— hyung... tienes que ver hacia arriba.

el alfa subió la mirada de inmediato, observando un tanto avergonzado al menor al ser atrapado vigilando sus pasos. decir que estaba nervioso era para menos, estaba en el centro de la pista y no quería equivocarse.

afianzó entonces su agarre en la espalda baja del omega. — lo siento...¿lo estoy haciendo bien?

jungkook rió, asintiendo enternecido por su guardia.

— lo haces bien. — afirmó. — gracias por hacer esto por mí. sirvieron las clases de baile con mi papá, ¿no es así?

kim abrió grande los ojos, sorprendido. ¿acaso él...?

— jungkook, tú-

— no tienes que explicarme. — lo interrumpió al ver al hombre tan turbado de repente, como si fuese un niño al que descubrieron haciendo una travesura. — no es algo que me concierna. además, ¿quién podría cuidar mejor de él que nuestro jefe de seguridad?

oh, diosa luna.

namjoon definitivamente había subestimado a jungkook, habían sido atrapados desde quien sabe cuándo por el omega.

— ¿desde hace cuánto lo sabes? — dos pasos atrás y dirigió al joven príncipe en una media vuelta.

jungkook giró, su brazo regresando a apoyarse en el hombro ajeno.

— lo sospeché desde hace unos meses. — confesó bajito. — tranquilo, tienes mi bendición.

y con aquella broma juguetona y un guiño complice el omega reverenció en sus puntas en despedida, siento tomado por el primer soltero valiente en tomar su mano para continuar el baile.

el alfa se retiró de igual forma y, alisando su saco en el camino, fue directo a la persona que quería ver.

jungkook sonrió entonces, entre giros y vueltas en manos del segundo alfa en bailar con él, al ver a la luna del reino al lado de la única persona a la que le confiaría la vida de su padre.

— no sabía que eras tan buen bailarín, kim. — parado en un extremo del salón, el omega elogió a su guardian en cuanto lo vió acercarse.

namjoon delineó una sutil sonrisa.
— me halaga, mi luna. tuve un buen maestro.

[...]

¿acaso su padre había invitado a todos los solteros del reino o por qué este baile le parecía tan eterno?

en algún punto del baile perdió de vista a la luna y a namjoon en el salón pero, aunque tenía mucha curiosidad por su reciente confirmación, no podía concentrarse en eso ahora cuando lo único que quería era sentarse a descansar.

pues mientras los demás invitados se unían jubilosos en medio de la pista al son de la música, él estaba harto de conocer a más personas que poco o nada podrían interesarle.

incluso jimin está bailando feliz con un alfa de marcados hoyuelos.

¿sería muy irrespetuoso de su parte rechazar al próximo que lo invitara a bailar?

suspiró en cuanto sintió unos dedos tocarle en el hombro para llamar su atención, ya sabía lo que seguía.

no se tomó la molestia de verificar quien era y simplemente hizo la reverencia habitual. para cuándo se enderezó de ella pudo notar plenamente quien sería su próximo acompañante.

el alfa respondió al saludo de forma cortés, extendiendo su mano en invitación.

— majestad, ¿me permitiría bailar a su lado?

 ⬫ ׂ ׅ trouvaille; kth + jjk Donde viven las historias. Descúbrelo ahora