Mi bello durmiente ✧ KookTae

𖥻 ִֶָ ۫ ּ Capítulo 17 ִֶָ

Libro: Coraline de Neil Gaiman.

"No quiero tener todo lo que deseo. Nadie lo quiere, no de verdad. ¿Dónde estaría la gracias si tuviese todo lo que quiero?"

—¡Vamos Taehyung, no te detengas! ¡Sigue corriendo! —dijo Jin trotando en su lugar.

Taehyung se encontraba agarrando sus rodillas mientras respiraba irregularmente.

Jin había invitado a Taehyung a correr, bueno eso no era del todo cierto, Taehyung estaba ilusionado porque Jin le había dicho que le compraría un pastelillo y comería algunas golosinas, pero supo que Jin lo había engañado en cuanto vio que tenía puesto un short y una camisa blanca, pero Taehyung no se imagino que lo sacaría de su cómodo apartamento para salir a correr.

—¿Cuánto... tiempo... llevamos... corriendo? —pregunto cansado.

Jin sin dejar de trotar en su lugar miro el reloj que tenía puesto en su muñeca izquierda.

—Llevamos quince minutos corriendo.

—¡¿Qué?! —suspiro cansado—. Pensé que llevábamos más de media hora corriendo, esto es... muy agotador.

—Vamos, deja la flojera de lado y sígueme, que los kilómetros no se completarán solos.

Jin ya tenía la costumbre de salir a correr en las mañanas, sobre todo le gustaba correr por los parques, pero a Taehyung no le gustaba, no es que no le gustase hacer ejercicio, pero la verdad era que no se sentía de un buen humor para salir a correr.

—Prefiero quedarme aquí —Taehyung se incorporó—. Te parece si, ¿me dejas aquí y cuando acabes nos regresamos?

—Nada de eso, vendrás conmigo, y no se diga más, vamos Taehyung mueve esas piernas y sígueme.

Taehyung suspiro agotado, no quería seguir corriendo, él quería irse al hospital, tenía que leer el nuevo libro, además le había prometido ir temprano.

—Eso no es una gran motivación —dijo Taehyung.

—Esta bien, ¿quieres motivación? Te daré motivación —Jin dejó de trotar—. Si terminas tres kilómetros corriendo conmigo, dejaré que vayas con Jungkook y no volveré a engañarte para que salgamos a correr, ¿trato?

—Está bien, me parece buen plan. ¿Tres kilómetros? —Jin asintió—. No es mucho, si lo lograré, ¡Vamos!

Jin sonrió ante esa respuesta, sabía que Taehyung no se rendiría tan fácilmente, y menos si se trataba de algo con Jungkook.

[...]

Un adolorido Taehyung entraba a la habitación 127, le dolían horriblemente las piernas, ¿Por qué? Bueno, Jin lo había hecho correr un poco más de los tres kilómetros que había dicho.

—Jungkook, seguramente te estas burlando de mí por cómo me veo —Taehyung se sentía rígido, pero la verdad era que no se notaba mucho, claro que cuando se sentaba cambiaba la cosa, pues no podía porque al doblar las rodillas sentía dolor en sus piernas.

Taehyung a pasos algo lentos se aproximó en donde se encontraba Jungkook acostado.

—¿Sabes? Jin si que es todo deportes, creía que me mataría allí mismo de tanto correr. Pero bueno sigo vivo para contarlo, seguro estarás pensando que estoy siendo un exagerado, ¡pero es que Jin ni siquiera me dejó prepararme con la ropa adecuada!

El castaño acarició la portada del nuevo libro en sus manos, la portada tenía a una niña que llevaba una vela encendida mientras la sostenía con ambas manos y al parecer caminaba por un lugar oscuro.

—Sigo contando las semanas, ya quiero que despiertes, se que sueno como un desesperado, pero creo que la verdad es como estoy, quiero que abras los ojos y me digas las locuras que seguro estás soñando en estos momentos, quiero que me digas si acaso estás escuchándome leer, el doctor dice que es posible que lo estés haciendo.

Taehyung abrió el libro y observó la nota escrita que Jungkook le había dejado en la primera página en blanco.

"¿Cuál es tu mundo perfecto, Taehyung? El mío es uno en donde pueda dedicar mi tiempo a las personas que quiero, y creo que tú tomarías todo mi tiempo, considérate afortunado."

Por supuesto que Taehyung se consideraba afortunado si ese mundo existiese.