Kazino de BIBI sonaba en la sala número uno.
Las luces led magentas iluminaban dicho lugar de una manera espectacular.
Estaban grabando, era día de grabación, las estudiantes se dividieron en cuatro grupos, teniendo total libertad de escoger la canción que querían junto a la coreografía.
Todas eran mayores a dieciocho años, bueno, todas menos Micaela, quien tenía diecisiete pero nadie lo sabía.
En sí Micaela era muy introvertida en lo social, se hablaba con solo tres chicas de allí, de su clase de Hip Hop, quien sabían su edad pero prometieron no decir nada, Mara, Mili, Agus y Melina, todas de diecinueve.
Quienes se encontraban gritando y apoyando a las chicas que bailaban BIBI.
Todo estaba tan bien, hasta que Micaela sintió una mirada encima suya, la buscó cuidadosamente, y lo vio, su profesor la estaba mirando, rápidamente la volvió a sus compañeras que estaban siendo grabadas, comenzó a apoyarlas.
Un escalofrío la golpeó.
Las chicas acabaron y les tocaba a ellas.
Micaela estaba nerviosa, sus manos sudaban, sus amigas habían estado de acuerdo en ponerla a ella como centro.
La cámara la enfocaría la mayor parte de la canción.
Debía jugar con ella y tratar de verse confiada.
Mara fue hasta el parlante y le indico a una de sus compañeras que le diera play por ella, la cual acepto.
Se acomodaron, Mica en el centro, Mara y Mili detrás de ella, y en el fondo Agus y Melina.
En frente de ellas estaban sus demás compañeros, sentados en el piso esperando para empezar a apoyarlas, detrás el espejo donde podía verse.
El chico de la cámara estaba en frente también, pero Mica lo ignoraba, lo que no pudo ignorar es como su profesor se apoyaba en el espejo, en frente de ella, volviendo a mirarla.
Se tensó.
Princess Diana de Ice Spice comenzó a sonar.
Las luces led se pusieron rosadas.
La coreografía empezó, al principio era suelto, tranqui, haciendo la intro.
Like, grrah, keep it a stack
Mica comenzó, sus pasos eran firmes, sus brazos se movían que no podrías describir solo apreciar.
Tomo su la cola de su pelo, hacía un playback totalmente adictivo, ese gloss se llevaba toda la atención del camarógrafo, jugaba con él, lo llevaba por dónde fuera.
Al igual que esas manos con ese diseño de uñas delicado pero hacían una bajada totalmente sexy a su abdomen, y subían para acompañar a ese perfecto playback. Mica giró, dejado ver su perfil, sus pestañas perfectas.
Todos en la sala gritaban, cruzaba miradas cortas con su profesor.
Nada importaba, era su momento, si estaba mal que se lo dijera después.
El camarógrafo por fin se fue, enfocó a sus amigas, sin embargo ella siguió con la misma fuerza y sensualidad del principio, sé dejaba llevar por lo que más amaba.
Bailar.
Sin querer, o queriendo, le sonrió a su profesor para después volver a volterarse.
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Ritmo y decepción
Подростковая литератураMicaela es una chica de 17 años, que sin querer queriendo se enamoró de su profesor de Hip Hop, Patryck, de 22 años. Quien diría que la vida le daría una oportunidad con él, pero a cambio sería confusa y, por la edad, complicada. Historia completame...