©El encuentro con Juuzou Suzuya (Sin Editar)

Capítulo 4

Suzuya me dio un beso rápido dejándome con ganas. Intenté safarme de su agarre pero fue inútil. De pronto Suzuya se levantó.

—Tengo que ir con Shinohara se preocupará si no vuelvo
—Lo llamo y ya está. Quédate —dije en modo de súplica
—Esta noche iré a tu casa y terminaré lo que empecé —dijo guiñando un ojo

Me sonrojé pero no pude evitar que Suzuya de fuera corriendo.

¿Qué pasará esta noche? Que intriga —pensé

Caminé sin rumbo por las calles hasta que me encontré en un parque. Me quedé sentanda en el banco jugando con mi móvil hasta que se me acabó la batería.

—Maldita sea con lo entretenido que estaba —dije frustrada

Me levanté y fui a una cafetería de la que se hablaba mucho por su delicioso café; Anteiku. Divisé por el ventanal de este a Shinohara y Suzuya en una mesa. Entré sin dudarlo y me paré frente a Shinohara.

—Hola Shinohara
—Hola Kaori, gracias por hablar con él. —dijo señalando a Suzuya.
—Venga te invito a un café
—Gracias
—Oye Shinohara, cambiando de tema, ¿podrias dejarme el resto del día libre?
—Bueno... Si mañana vienes temprano sí
— Bien, así podré hacer lo que quiera esta noche —dijo mirándome

Cuando lo hizo me sonrojé y giré la cabeza para no mirarle a los ojos.

—Os acabáis de conocer y ya vais a hacer el —interrumpi
— ¿Q-qué!
— Iba a ser una sorpresa
—dijo poniendo morritos
—Pero si ni siquiera sabes como hacerlo
— Solo sé que hay que meter —interrumpi de nuevo
— Shhhhhhhh
—Suzuya si no llevas protección Kaori podría quedarse embarazada
— ¿Cómo llegamos a este tema! —dije casi gritando
— Ya, ya paso —dijo acariciándome la cabeza.

Le mire directamente a los ojos y le fulmine con la mirada.

— Eres una cría
— Tsk!

Me levanté y me puse al lado de Shinohara, alejándome de Suzuya todo lo posible.

—Jóvenes quién los entiende

Vino una camarera con el pelo azul de lado y tapándole un ojo. Tomó nota de lo que pidió Shinohara y luego nos lo trajo con una sonrisa. Cada uno tomó su café y comió su sándwich.
Al terminar le agradecí a Shinohara y me dirigí a la salida. Ellos continuaron sentados ya que iban a hablar con alguien de Anteiku. Cuando pasé al lado de Suzuya.

— Esta noche te vas a enterar —dijo cogiendome del brazo

Yo le di una suave colleja y salí del establecimiento. Recorrí las calles que poco a poco se iban oscureciéndo. Ya en casa decidí ducharme para refrescarme un poco. Me seque y vestí. Me fijé que el reloj ya marcaban las 22:56 y como Suzuya no venía fui a mi habitación y me tiré en la cama.

— Hola
— ¿Suzuya?

Al encender la luz lo vi sentado en el suelo mirándome.

— ¿Cómo entraste?
— Por la ventana
— ¿Y desde cuando estas aquí?
— Desde que entraste en la ducha
— Pervertido

Suzuya se levantó y me besó mientras apagaba la luz. Me cargó y me dejo tumbada en la cama. Se puso encima mío. Y comenzó a desabotonar mi blusa, yo le imité y le quite la camisa.

— Pervertida —dijo acercándose a mi rostro — prepárate mañana no vas a poder levantarte de la cama
— Su—Suzuya —dije mirando esos ojos rojos tan bonitos

Después me dejé llevar por él, quedándonos toda la noche haciéndolo.