Recuerdo que, desde ese día, quería estar en el museo todo el tiempo, en él me podía despejar de todo lo que me pasaba en el día o en la semana, era una experiencia que disfrutaba mucho, si ahora me digieran que, si pudiera volver al pasado, siempre escogería la fecha en la que entre un 13 de septiembre del 2017. Pues desde ese día, mi vida cambio.
El martes siguiente, entramos ya como guías, aun no teníamos uniforme o algún pin que digiera quienes éramos o que hacíamos ahí, solo una playera o camisa tipo polo de color blanco y unos pantalones de mezclilla, cuando llegue ya solo estábamos los del turno, era raro pues éramos poquitos en la sala, pero lo que me importaba más era que ella estaba ahí.
Los días eran agradables pues podía estar con ella, entre semana era raro que hubiese gente en el museo, pero era mi oportunidad de poder conversar con ella y platicar de cosas de la vida.
Recuerdo que ella hacia tarea y la ayudábamos, cuando yo no sabia algo del tema me gustaba mejor apartarme para no ser un estorbo y no estar embobado junto a ella, me salía de la sala, apreciaba lo bonito que era el lugar, respirar aire fresco y no tener preocupaciones de nada.Un día estando sentado afuera de la sala, recuerdo que ella se sentó a lado mio, se me hizo raro que me acompañara, pero no me queje, era buena compañía a lado mio. Empezamos a platicar de cosas que en mi mente pensaba que era el único que pensaba en ello, era algo fría pero me encantaba la forma en la que me contaba las cosas su frialdad desaparecía y me gustaba estar presente cuando eso sucedía.
A lo largo de los días me iba fijando que casillero era el de ella, le llegue a intercambiar una llave mía por una de ella, en mi mente era buena idea y disimular mis intensiones, vaya que funciono.
Dejaba un pequeño dulce o algún regalito pequeño cada que podía en su casillero, me tenia mucha confianza y yo a ella.
Realmente es un sentimiento que hasta la fecha no he podido describir pues ha sido la única que me ha echo sentir de esa manera.
Llego un día el cual, a mi no me gusto... llego el coordinador buscando a alguien que le ayudara en un taller de ciencia y nadie dijimos nada, pero ella se animo y desde ese día, ya no fue a la sala, de vez en cuando iba pues no había material, pero eran contados esos días.
Cada vez en mi crecía un sentimiento en mi, creo todos lo empezaron a notar, es normal creo yo, no?.
(Es difícil recordar todo a detalle, son flashback que me hacen retroceder en el tiempo y vivirlo de nuevo, pero antes de seguir, ella fue la que dio el primer paso de hablar no solo en el museo si no por el celular, y vaya que hablábamos).
Un día, fue a visitarnos y estábamos con otros guías, todo normal, pero algo en mi sabía que algo no iba bien, pues dos de los guías que estaban ahí contando a chuy, le tiraban la onda a esta niña, pero llegue a escuchar que habían apostado a ver quien besaba primero a esta niña, la verdad quede algo mal, un pequeño vacío se formaba en mi pecho, trataba de entender que pasaba, y porque hacían eso... pero ella les dijo que va pero que jamas iban a poder. Yo solo me quede observándolos, me senté y al momento de voltear a verla, vi como uno de ellos se balanceo sobre ella y le dio un beso en la boca... creo fue la primera vez que en mi, se rompió algo, un agujero negro se formo en mi pecho y desapareció lo que había formado...
Me pare y solo me retire al baño... fue una mala experiencia, no supe que reaccionar, porque hacer eso, porque ahora.Si me salieron lagrimas, pues me impacto eso, mis ilusiones se fueron y mi mundo se torno gris.
Desde ese día, empece a ser mas callado y distante con los demás, llevaba audífonos para despejarme, la musica siempre ha sido mi única ayuda para despejarme de mis malos ratos y viajar a otros mundos en mi mente.
Me volví muy responsable, llegaba temprano y hacia todo al pie de la letra. Solo quería que todo terminara.
Con ella seguía hablando pero a distancia, me gustaba saber que hacia, como le iba y sobre todo, conocerla poco a poco. Había creado un block de notas, que hasta la fecha aun lo guardo, de todo aquello que a ella le gustaba. Desde su color favorito hasta lo que no le gustaba hacer y vaya que ayudo mucho.
Y apesar de lo ante sucedido, poco a poco se me olvidaba, creo el cerebro bloquea los malos ratos para evitar caer donde mismo.
Pasaban los días, y antes de cumplir el primer mes, aún recuerdo que a veces salíamos a comer juntos, la primera vez en vez de los 30 min que teníamos nos quedamos una hora, una hora donde solo estaba con ella, sin ojos viéndonos, solo siendo nosotros dos.
Vaya que disfrutaba eso, me gustaba, y creo lo hacía notar mucho.
Aunque, verla, era aún mejor.
Que habrá sentido ella en esos momentos, solo alguien más que le tiraba los perros pero no se animaba a dar el siguiente paso?, la verdad nunca sabré eso.
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Una última historia
RomanceSolo quiero contar una y mil veces está historia, si llego a morir algún día, deseo vivir de nuevo todo esto