Querido D:
Realmente no se como explicar que me lastima tú existencia, pensar en lo que fuimos y todo lo que pudimos llegar a ser es un golpe muy duro que tomar, pero también es algo que tengo que afrontar.
Te conocí en agosto y al inicio no quería saber de ti eras una presencia muy real pero al mismo tiempo lejana a mi.
La primera clase en la que te note tu estabas sentado tres asientos delante de mi, yo estaba siendo mi ser tonto que trata de simplificar hasta lo más sencillo para no olvidarlo y con un simple "u de unión que significa o" nuestra historia comenzó.
Ver tu cabello chino y tu sonrisa al voltear a verme mientras reías por la gran estupidez que había salido de mis labios fue la mejor manera en la que pude haberte conocido, tal vez no fue la más romántica ni la más elaborada pero viendo que te hacía reír que fuera yo hizo que sintiera algo ahí.
Durante las siguientes semanas me atormentaste riendo cada vez que pasabas por mi camino, sin decir ni siquiera una palabra, solo éramos nosotros frente a frente con aquella risa que venía acompañada de una sonrisa a la que me quería acostumbrar.
Tiempo después noté que estabas en otra de mis clases y decidí reírme yo de ti, eso solo nos acerco más hasta que saliendo de una presentación con una amiga te vi y en el momento que me viste volviste a reírte de mi, llevaba semanas sin decir una sola palabra al respecto y por alguna razón decidí acercarme con la intención de confrontarte.
Para mi sorpresa te lo tomaste bien y empezamos a hablar, ni siquiera intercambiamos números o por lo menos Instagram, pero cada vez que nos veíamos nos gustaba hablar y así poco a poco te volviste parte de mi día a día.
Un día estabas fuera de mi salón esperando a que saliera y después eso se convirtió en siempre tenerte fuera de mi salón esperando a estar conmigo y que pudiéramos de nuevo hablar. Solíamos salir a comer y tú siempre insistías en pagar, al inicio me daba pena porque eras mi amigo y no quería abusar pero incluso cuando forcejeaba contigo para pagar no me dejabas hacerlo jamás.
Para mi es difícil poder definir cuando inicio nuestra relación porque realmente no lo sé, lo nuestro no fue planeado en lo absoluto o por lo menos es algo que yo simplemente no vi venir pero cuando se ocurrió fue algo tan genuino que sé que jamás volveré a pasar.
Tengo que ser honesta y admitir que lo lamento muchísimo por todo el mal que te hice, realmente estaba confundida y no sabía que si lo nuestro era de verdad o simplemente te ibas a alejar... aunque tengo que admitir que yo hice que te alejaras porque tenía miedo a volver a amar y para cuando me di cuenta y lo quise arreglar ya no había manera de restaurar el daño que mis miedos habían generado.
Recuerdo mirarte a los ojos después de semanas en las que ya no estuvieras afuera de mi salón esperando a que saliera y ya no trajeras mi chocolate favorito porque sabias que en la clase me iba bastante mal y decirte que yo si sentía amor por ti y quería un poco más, recuerdo cada segundo de esa conversación en la que te planteé lo que quería y como anhelaba nuestra relación, todo esto aún cuando sabía que me ibas a rechazar pero dentro de mi aún había una parte que soñaba con tenerte para siempre y poder crecer de los errores que tuvimos al inicio pero no fue así... tu voz fue seca y dura, parecía que querías escapar mientras decías "no puedo tener estos sentimientos, tengo miedo a depender en alguien, podemos tener algo pero no amor" yo se lo que pueden estar pensando ahora y decir que si realmente no quería una relación conmigo porque me llevo al extremo de enamorarme cada día más y tratarme como si ya fuéramos una pareja, pero yo realmente sé que todo lo que hizo no fue con la intención de dañarme o no querer más; no sabría cómo explicarlo la verdad pero creo que todos conocemos ese miedo a dar tu alma entera a alguien sin saber que le hará.
Después de ese día cada vez te veía menos y con el paso del tiempo también lloraba y te pensaba menos pero realmente nunca te pude olvidar, no sabes cuanto moleste a mis "amigos" hablando de ti y deshaciéndome completamente por no tenerte, realmente no puedo describir como sufrí por perderte, pero creo que sufrí más después cuando precia que ibas a volver a mi.
Era de noche cuando me volviste a escribir por primera vez y vi la luz al final del camino, pensé que íbamos a volver a estar bien y por un tiempo así fue, volvimos a nuestra rutina yendo a tu depa después de las clases y hablando o besándonos y ya, realmente creí que lo nuestro había vuelto a ser real pero no fue así, después de un tiempo desapareciste otra vez y luego de nuevo decidiste volver.
Me escribiste diciendo que nos viéramos y yo acepté ir a tu depa, pero era de noche y estaba sola, no es que mis "amigos" no estuvieran ahí sino que yo sabía lo hartos que estaban de escuchar de ti que no me atreví a decirles que te vería otra vez y que yo seguía dispuesta a seguir luchando un poco más así que salí sola y al llegar a la calle donde tú vivías me acosaron y tú ni siquiera estuviste ahí, incluso peor cuando te lo conté solo reíste y lo trataste como si no fuera nada más que un mal momento y que no volvería a pasar, si te soy honesta después de esa noche ya no he vuelto a caminar por tu calle y perdí el amor que le tenia a caminar.
Nunca te voy a culpar por las cosas que pase y tampoco voy a hacerte sentir mal por lo que sentí y nunca te dije, pero creo que ya es momento de que dejes de llamarme a las 3 de la mañana diciéndome que no salgo de tu cabeza y quieres estar conmigo. Tu sabes que ya existe alguien más y también sabes que te amo de una manera que ni siquiera puedo explicar aunque incluso cuando me duele amo escuchar tu voz en la madrugada y pensar en todo lo que fuimos y podríamos ser algún día si el mundo decide que lo nuestro si tenia que ser
Pd:
Para mi serás hoy y siempre mi buen amor

ESTÁS LEYENDO
Querido diario
Novela JuvenilA veces simplemente quisiera que mi vida fuera menos complicada, quisiera no tener que elegir con quien estar y no sentir esta ansiedad. A veces solo quisiera no ser yo