Capítulo 1

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Young Alpha

Louis alzó una ceja tan pronto su mejor amigo apareció en la puerta principal de su hogar y entró con una sonrisa grande y su nueva mochila colgada al hombro.

El alfa rápidamente notó que un casi imperceptible toque dulce acompañaba la presencia de Harry, y que el joven parecía estar de muy buen humor esa mañana, a pesar de ser inicio de clases en un nuevo año, ya que básicamente parecía irradiar pequeños matices de alegría alrededor suyo.

Julie pareció no prestarle suficiente atención al hecho de que Harry había llegado con un suave y nuevo toque dulce impregnándole, pues se acercó a saludarle enseguida como lo hacía a menudo y procedió a invitarle a desayunar antes de ir a la escuela, pues todavía daba tiempo debido a que ella les llevaría en el auto.

Harry se negó amablemente a desayunar en casa de los Tomlinson y dirigió un tierno saludo sacudiendo su delgada mano desde su lugar en la sala de estar en dirección a Louis, quien se encontraba sentado en el comedor tomando su propio desayuno.

La sonrisa de Harry y sus bonitos ojos brillantes no fueron suficientes para que el joven alfa dejara de lado los toques frescos y naturales que invadieron rápidamente por completo su hogar. Pudo distinguirlo enseguida debido a que por ser un alfa, sus sentidos eran mucho más agudos que el de las demás personas.

Algo se removió dentro del pecho de Louis. Se sentía como su alfa complacido y casi aliviado, pues incluso una sonrisa se dibujo en sus delgados labios.

Finalmente, Harry presentaría como omega y Louis estaba seguro de que el chico ni siquiera lo había notado aún.

Louis recordaba haber tenido que lidear con un rizado triste un par de meses atrás, Harry incluso había llorado, con mocos y todo. Louis le compadecía y entendía, también como buen amigo que era le había apoyado y consolado.

La razón de las lágrimas de Harry había sido el haber cumplido los dieciocho años y aún no haber presentado casta, ya que la mayoría de sus amigos, e incluso Louis, habían presentado cuando tenían entre catorce o dieciséis años.

Louis recordaba asegurarle a Harry que seguramente sucedería pronto, que no había ninguna prisa y tampoco ningún problema, al fin y al cabo, el cuerpo de todos funcionaba distinto. Le había sermoneado por llorar en su cumpleaños y luego se las ingenió para lograr distraerle invitándole a partir el pastel para luego empujar su rostro sobre él. Las risas volvieron y sin mucho más dejaron de lado ese tema.

El alfa siempre había sentido en el fondo que seguramente Harry sería un omega, pues tenía en su mayoría las características más comunes. Era delgado, con carácter suave y de facciones finas. Como una flor que no puede opacar ninguna otra.

Y demonios, Louis lo amaba tan malditamente tanto.

Incluso si hubiese presentado beta, que era lo que todo el mundo creía que Harry era, Louis se hubiese quedado ahí. Aunque hubiese presentado incluso un alfa, a la mierda lo que pudiera decir la sociedad, Louis se hubiese quedado ahí.

No era secreto para nadie que estaba pérdidamente enamorado del chico, incluso alguno que otro ya les veía como una pareja formal. Aunque no lo eran, aún, el mismo Louis le recordaba a Harry una y otra vez, cada que tenía la oportunidad mientras le besaba cariñosamente las mejillas y acariciaba sus cabellos, cuánto le adoraba y lo mucho que le quería. El rizado solo se reía suavemente en respuesta y aceptaba de buena gana los mimos del joven alfa sin atreverse a nada más.

El tema sobre lo que había entre ellos era algo complejo, en realidad. Se querían, muchísimo, pero Harry tenía inseguridades. La más grande era que no había presentado su casta aún, y se sentía extraño porque cualquier día podría presentar cualquiera, y si presentaba alfa, u beta, quizás decepcionaría a Louis y no le gustaría más, y Harry no quería sufrir de un rechazo que en absoluto podría superar.

Young Alpha | Larry StylinsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora