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Tan sólo algunos años habían pasado desde su primer encuentro con un a la de mayor tamaño en una pelea clandestina, el dolor lo podía sentir en su piel y huesos, aun podía saborear la sangre en su boca y el posible fracaso en un golpe que recibió. Sonrió de lado al sentir su brazo ser alzado de nuevo.

—¡Nuestro Jk gana! - escuchó, su cuerpo había cambiado. Ese cuerpo flaco que tenía había sido remplazado por aquel tonificado cuerpo, más alto, más grande, tan alfa pura sangre, sus oscuros cabellos revueltos debido al viento solo le hicieron verse más atractivo y atemorizante.

Era un alfa.

Era él alfa.

Chasqueó su lengua, sus sentidos aun estaban alterados por lo que se sentó en el suelo, dejando su espalda recargada en la pared mirando un poco a su amigo, sonriendo de lado.

—¿Cuanto fue, Jack? - Jungkook sonrió mientras pasaba aquella botella de agua a su boca, bebiendo ese líquido junto a la sangre que había en su boca aún soltando un pequeño sonido con su garganta.

—Lo suficiente para pagar una buena cena el día de hoy. —Y le da un pequeño golpe en su hombro — y el pago de la renta.

Jeon Jungkook sonrió de gusto, probaría un poco de carne esta noche, mira esa botella unos momentos mordiendo sus labios despacio cerrando sus ojos soltando un suspiro cansado, sintiendo como tiraban de sus brazos para alzarlo y ríe bajo.

—Andando. - Murmura el alfa, metiendo sus manos en sus bolsillos de su chaqueta gastada.

Pudo sentir aquellas miradas sobre su espalda, era un alfa de sangre pura, fruto de dos alfas, y eso era su único pecado,era su cruz, siempre le parecerian algo horroroso un hijo de alfas, era poco común de ver.  No sería jamás respetado a pesar de ser un líder por naturaleza.

Jungkook sabia que siempre sería juzgado por sus orígenes.

Por sus padres.

Por esa sangre que recorría sus venas.

Alzó su vista escuchando aquel cielo tronar con intensidad, seguida de varias gotas de agua sobre su cabeza, comenzando a sentir su cabello ponerse húmedo.

—¿Es en serio que estas caminando tranquilo?

—¿Por qué no lo haría?

—Pues - Jack le mira con atención fijándose en esa herida—tienes una herida algo... Notoria.

Oh.

—Bah, no importa - respondió con calma mientras caminaba, sintiendo un leve temblor en su cuerpo debido a ese dolor punzón que recibió llevando su mano sobre su abdomen. — Vamos.

El Alfa que estaba a su lado le mira dudoso, no pareciera que estaba bien pero como algunas ocasiones (siempre) le haría caso, por lo que solo asintió para caminar juntos sintiendo aún aquella lluvia mojar su cuerpo.

Jungkook un poco ansioso al sentir ese aroma a carne le hizo que su estómago gruñese.

¿Cuando fue la última vez que comió algo de comida ?

Estaba harto de comer solamente sopas instantáneas que no llenaban lo suficiente su estómago.

No le importaba aquel aspecto en su rostro, de todos modos era un puesto callejero, por lo que solo se recarga en esa pared sucia cruzándose de brazos mirando hacia aún lado con atención a su amigo como pedía su cena.

—Oye -Ese hombre le mira causando que sus ojos azules se retiraron de su amigo. - ¿Eres el famoso hijo de alfas, no?

—¿Y a ti que te importa? - respondió sintiéndose repentinamente tenso, ya que había notado aquella mirada sobre su cuerpo desde ya hacia un largo rato.

Y eso le mantenía un mal presentimiento.

—No lo sé, solo quería saber que se sentirá vivir como un fenómeno.

Y ahí estaba.

Lo mismo de siempre.

A Jungkook ya no le importaba esos comentarios, solo ríe entre dientes de forma seca mirándolo con atención y se alza bien, mostrando esa altura considerable de su parte y ladea su rostro de forma amenazante.  Dibujando esa sonrisa maliciosa en su rostro debido a lo repentino que había sido aquella situación, pero no evitaría que se ganase un golpe en su rostro.

La sangre aún resbalaba de su boca, su rostro tenía rastros de suciedad, tenía su pómulo un poco abierto en un rasguño, sus ojos mostraban aquel azul celeste con sus pupilas totalmente dilatadas.

Alejate o te muestro a un verdadero Alfa pura sangre. —  Entre dientes masculla, sus ojos tintandose de un rojizo intenso.

—Uy -se ríe finalmente, la paciencia del sangre pura parecía acabarse poco a poco, por lo que solo soltó un gruñido, esta vez sus arranques de ira nadie los controlaría.  —¿Y qué pretendes hacer? Todos aquí te conocen, saben que eres un.. una aberración, todos saben que tienes una asquerosa y miserable vida, todos saben que mataron a tus padres por ser... Anormales

Además de que esa situación era... Innecesaria.

Su amigo, Jack recibió esas bolsas de comida en una sonrisa solo ladeando su cuerpo para mirar al pura sangre, su sonrisa se desvaneció lentamente y abrió de más sus ojos y pareció ver en cámara lenta como aquel puño con los nudillo rotos de Jungkooks se estrellaba en el rostro de al parecer un beta.

—Mierda - susurra. —¡Jk! —Soltó un grito hacia el, dejando aquellas bolsas en el puesto, caminando de inmediato a su amigo tomándolo de sus hombros y alejarlo —No vale la pena ¿no vez? Un beta, no vale, no tiene ningún categoría, no tiene animal interno, es inferior.

El beta pasó saliva indignado, su boca dolía, la sangre continuó resbalando de su boca y nariz por aquel golpe de un alfa puro.

Sus ojos se quedaron fijos en los cabellos negros ajenos.

Un pura sangre, un alfa, un alfa tan alfa.

Jungkook continuó presionando su abdomen lentamente, para finalmente caer arrodillado de dolor, la herida continuaba causando molestias y Jack de inmediato ayudó a levantarse.

—Vamos hermano, podrás dormir hoy en una cama sin preocupación de que nos hechen.

Jeon sonríe poquito, teniendo su mano en su abdomen y solo asintió caminando en la misma dirección del alfa que lo acompañaba, sintiendo su pecho cosquillear repentinamente a metros de su hogar.

—¿por qué decidimos vivir aquí?

—Porque es barato y tienes bonita vista, además... No se ve de mala muerte.

Y dió una mirada sobre su hombro notando a un Omega, sus cabellos rosados revolviendose al aire mientras su cuerpo era envuelto en un saco color blanco.

Y sintió un aroma.

Rosas.

Su nariz se agudizó.

Miel.

Y su corazón comenzó a latir con intensidad, haciendo que pasará saliva paralizandose.

Y el tercer aroma llegó.

Fresas.

Pero solo hubo un problema, mínimo.

El Omega bonito que tenía frente (metros) de él, fue tomando por las muñecas agresivamente por un sujeto alto.





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    𝖧𝖮𝖫𝖸     [𝗸𝗼𝗼𝗸𝘁𝗮𝗲]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora