DON'T EVER SAY LOVE ME • [YOONNAM]

ME

No sabe que hora es pero los rayos de sol ya se cuelan por la ventana. Algo fastidiado se mueve, quiere dormir un rato más. Intenta darse la vuelta más le es imposible algo lo tiene apresado. O más bien alguien.

-Yoon...- susurra mientras lo palmea intentando despertarlo pero solo obtiene gruñidos de parte del alfa- Yoongi, quiero moverme, la luz me da en los ojos, o cierra la ventana por mi, por favor...

Parece que sus intentos son en vano, lo único que logra es que el alfa lo apreté más a su cuerpo y es que la luz le da justo a los ojos, estira su brazo hacia la mesita de noche y logra tomar su celular lo desbloquea para ver la hora y ya son la los siete es fin de semana así que ninguno debe ir a trabajar y pueden dormir un poco más.

Intenta darse la vuelta para quedar cara a cara con el alfa pero nada y ya está perdiendo la paciencia. Estos días al parecer está más sensible y bueno su humor está muy cambiante.

Quiere golpear al pequeño alfa, gritarle que es un tonto y morderle la mano pero recuerda que hace unos años le operaron el hombro y pues no puede hacerlo, él solo quería dormir un poco más.

Su semana en el trabajo había sido un desastre, los eventos que se llevarían acabo en el museo se habían cancelado por el clima y pues todo lo que se había realizado había sido al aire libre así que quedó arruinado. Y claro, él debía hacerse cargo del desastre.

Ahora estaba viviendo con el alfa en su departamento, la relación se había vuelto bastante seria en muy poco tiempo, Yoongi lo cortejo y él acepto gustoso el cortejo, hicieron una cena con sus familias, Yoongi pidió su mano y le pidió matrimonio, querían una boda donde solo estuviese su familia y la estaban organizando sus padres omegas así que ellos no se preocupaban por nada o al menos eso decían sus padres cuando en realidad debían hacer mucho.

Los días ajetreados con la mudanza de Yoongi, arreglando temas de la boda, viendo cada uno por su empleo habían mermado la energía de Namjoon claro que cuando se trataba de estar con Yoongi, la pasión los desbordaba a ambos y la energía parecía llegar solo en esos momentos.

Es por eso y más que en ese momento amando tanto a Yoongi pero amando también descansar como merecía y sin poder liberarse de los brazos de su alfa, se puso a llorar frustrado y cansado.

Paso varios minutos llorando hasta que el alfa lo solo porque se dio cuenta de lo que pasaba.

-Que paso cariño... ¿Por qué estás llorando?- dijo con aquella voz ronca y adormilada que amaba y él aún enojado se levantó a cerrar las cortinas y se metió al baño cerrando la puerta muy brusco.

Hizo sus necesidades y lavo sus dientes y rostro, se veía mal pero no podía dejar de llorar.

-Abre la puerta, Joon, dime qué pasa...- pedía el alfa pero el hizo caso omiso, bajo la tapa del retrete y se sentó en ella a seguir llorando, era tan tonto y engreído y estaba siendo infantil, no era un Omega llorón y ahora no podía detenerse.

En cierto momento escucho como el alfa se iba así que trato de calmarse a si mismo pero no pudo.

Hasta que claro, la puerta fue abierta por el alfa.

-Oyee, tuve que ir a buscar la llave- dijo agachándose para verlo a los ojos- ¿Qué paso?

-Tu...

-¿Yo?

-Tu no me dejabas, estaba cansado, quería dormir, la luz me daba en los ojos, estoy cansado, solo quiero dormir un poco más...- se quejo el Omega preso del cansancio semanal.

-Lo siento, es que hueles tan bien que ahora que eres mi Omega mi lobo no quiere separarse del tuyo... Yo no quiero separarme de ti, nunca más, quiero estar solo contigo, Joon, me he vuelto un egoísta adicto a ti, perdona a tu alfa, tierno Omega.