La Protegida del Villano

Fiesta

Ignis entró glamurosamente al salón, rápidamente todos los presentes le hicieron reverencias

 Para él era un día en el que juraría olvidarla, pero de repente parecía que eso no sería posible

Simón Evan, el héroe del imperio y también llamado "cazador de dragones" por una especie de leyenda, que decía que había matado a uno de esos poderosos seres con tan solo una vieja espada oxidada

Ese hombre extraordinario se le acercó

-Felicidades, su Alteza. El día de hoy empieza su camino para ser todo un hombre, espero esté colmado de salud y bendiciones

-Le agradezco mucho sus buenos deseos, Lord Evan... - fue entonces cuando su mirada se posó en los niños que estaban junto a Simón

Ambos constaban de ojos azules y un cabello rojo idéntico al de Selena

-Oh, ¿Son sus hijos?

-Sí, Alteza. El niño se llama Celestine y la niña Selena

Ignis sintió que su corazón se paraba, ¿era acaso esa la niña que había cuidado?

No podía preguntar descuidadamente, así que se agachó a la altura de la niña

-Hola, pequeña. ¿Cómo te va? - preguntó dulcemente

La niña solo se escondió detrás de su padre, no salió ni una palabra de su boca

-Es algo tímida, su Alteza. Le pido que la disculpe

-Está bien, es solo una niña - respondió Ignis mientras se levantaba

Celestine, el niño, se le acercó

-¿Usted es el príncipe?

-Sí, lo soy

-Quiero trabajar para usted, cuando sea grande

-Entonces te tendré en cuenta, pequeño - respondió Ignis mientras le acariciaba la cabeza suavemente

Selena seguía mirándolo desde detrás de las piernas de su padre; tenía el cabello un poco por debajo de los hombros y estaba decorado con un broche de zafiro azul en forma de rosa con hojas de oro. A sus ojos se veía muy hermosa, trató de que lo tomara de la mano, pero fue en vano

La niña solo lo miraba, mientras se ocultaba de él

-Fue un gusto saludarlo, Lord Evan. Ahora mismo debo irme, espero nos veamos en otra ocasión

-El gusto fue mío, su Alteza. También espero volvernos a ver pronto - le dijo Simón mientras hacía una reverencia

Ignis se alejó, quería pensar mejor todo lo ocurrido

Rowan, que no se había alejado de él en ningún momento, lo siguió

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En uno de los balcones del lugar

-Su Alteza, debe controlarse - le dijo mientras usaba magia para ocultar la magia que Ignis dejaba regada a su paso

Mariposas moradas, fue lo que vio y trató de que se desaparecieran apresuradamente

-¿Qué sucedió? Creo que el nombre de la hija de Lord Evan es el mismo que el de la niña que usted dice que cuidó

-Sí... Es el mismo, se parece tanto. Lo único distinto es su edad, pero si siguió viviendo debería tener la misma edad que esa niña

Ignis estaba alterado, no podía comprender porqué la niña se alejó de él con miedo, mientras que su hermano le habló con confianza

Estaba sentado en el piso del balcón, mientras trataba de encontrar la respuesta a sus dudas

-Su Alteza - dijo Rowan mientras sujetaba ambos hombros de Ignis  -Aún si esa niña que desapareció fuera la hija de Evan, la actitud que le mostró demuestra que lo olvidó y en lugar de cariño siente miedo por usted. También demuestra que es hora de que finalmente se olvide de ella, es lo mejor

-Yo.. No la quiero olvidar, así me cueste la vida

Rowan lo soltó, estaba arto de que se negara a olvidar

-De acuerdo, usted se lo busca solo, y si se muere yo también lo haré

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Más tarde

Ignis estaba paseando al rededor del salón, era solo una celebración ya que la ceremonia verdadera se había realizado el día de su cumpleaños

Mientras paseaba, se detuvo en la terraza para mirar las estrellas

El sonido de unos pequeños pasos llamó su atención, al voltear pudo ver a esa niña

Aquellos ojos azules tan profundos, ese color marino tan hermoso y puro que se parecía a las joyas; fue ese color el que captó su atención primeramente

La niña hizo torpemente una reverencia, mientras que Ignis se le acercaba lentamente

Él se arrodilló frente a ella, luego comenzó a hablarle tomando las manos de ella entre las suyas

-Mi niña, te he extrañado tanto. Estás muy hermosa, tanto como la primera vez que te vi

-Al... Su Alteza. - dijo la niña, luego de intentarlo por un largo rato

-Dime, cariño

-¿Desde cuando me conoce?