Fate: Remnant of Four Souls

Un fututo brillante

Ni Fate ni Rwby son de mi autoría, crédito a sus autores.
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Una vez mas el tiempo transcurrió sin descanso para nadie.

Los pájaros cantaban fuera de la ventana mientras débiles rayos de sol entraban por ella.

La conciencia de Shirou estaba entre ir y venir cuando su cara sintió el grosor de sus propios brazos haciendo de almohada.

"-ou."

Uno vos le llamaba, pero estaba muy somnoliento para entender.

"-hirou."

"Shirou!"

El grito en el oído hizo que Shirou se sobresaltara y cayera de la silla donde estaba sentado. Cuando miro una vez hacia arriba se encontró con la mirada acusatoria de quien se podría considerar una hermanita para el, aunque en realidad no.

"Oh, hola Ruby."

La joven de ya 15 años de edad le miraba con esos hermosos ojos de plata que había heredado de Summer. La mocosa que antes correteaba por doquier se había vuelto algo mas tímida a su alrededor en algún momento, y no entendía el por que.

"O-Otra vez te dormiste en el taller?"

Shirou se recompuso y sonrió irónicamente. Desde hace un tiempo había estado quedándose dormido en el taller de la casa debido al habito de mecánico que había adquirido desde que logro diseñar sus armas.

Noir Rose y Gwyn Lily.

Dos espadas con cambio a pistolas de medio alcance.

El mecanismo fue particularmente difícil de hacer debido que quería hacer que el cambio fuera lo mas fluido posible.

"Mamá te va a regañar ¿sabes?" Ruby lo miro mientras jugueteaba con sus pies, como si en realidad estuviera esperando algo.

Shirou le dio una larga mirada para después suspirar. "...Quieres galletas con chispas de chocolate o fresas?"

"Chispas!"

"Es un trato."

"Yay!" Vitoreo Ruby. "Te quiero Shirou!" Ella salto con su semblanza y abrazo al pelirrojo.

"Si si, yo también de quiero," Este le acaricio la cabeza gesto fraternal.

Pero no noto el pequeño sonrojo en las pálidas mejillas de la caperucita debido a su diferencia de altura por mas de una cabeza.

Pero de repente una cabeza rubia se asomo desde la puerta.

"Hey hey ¿tanto cariño desde la mañana?" Yang silbo al ver la escena generando diferentes reacciones en cada uno.

Ruby se separo rápidamente y se puso la capucha intentando ocular su rostro enrojecido.

Pero por otra parte, Shirou permaneció estoico y solo saludo.

"Hey Yang, por favor no digas las cosas así, solo era un abrazo."

Oye un sonido asfixiado que pareció venir de Ruby y vio como la cara de Yang se torcía un poco antes de volver a la normalidad.

"En este punto... ya no me sorprende..."

Shirou parpadeo confundido. "Que quieres decir?"

"Nada nada, no tendría sentido que yo te lo dijera."

"O-key...?"

Después de eso el pelirrojo abandono el taller para darse una ducha antes de Summer descubriera que volvía a dormir ahí. Fue un poco complicado debido a que tenia un poco de dolor en la espalda, pero nada que aura no pudiera arreglar.